Los intendentes electos que forman parte de la «renovación» generacional en Mendoza
En las elecciones del domingo se impusieron en la categoría de intendente cuatro "debutantes" en el puesto. Algunos son sub 40 y, pese a diferencias partidarias, deberán trabajar en conjunto.
05/10/2023 POLÍTICAEn las elecciones del domingo se impusieron en la categoría de intendente cuatro «debutantes» en el puesto. Algunos son sub 40 y, pese a diferencias partidarias, deberán trabajar en conjunto.
Las elecciones del 24 septiembre dejaron -entre otras cuestiones- un dato a tener en cuenta a la hora de evaluar lo ocurrido en las Intendencias: en cuatro departamentos se dará una renovación generacional que abrirá paso a un cambio en lo que respecta a los nuevos actores que habrá en el escenario político del próximo tiempo. Francisco Lo Presti (Las Heras), Marcos Calvente (Guaymallén), Esteban Allasino (Luján de Cuyo) y Diego Costarelli (Godoy Cruz) conducirán el destino de cuatro territorios de alta densidad poblacional y que poseen numerosas complejidades. Todos tienen menos de 45 años y, pese a que uno de los protagonistas es parte de otro partido, aseguran que habrá buena convivencia más allá de la marcada polarización durante la campaña electoral.
La generación que quedó en el medio -con dirigentes como Tadeo García Zalazar (8 años como intendente), Sebastián Bragagnolo (rechazó ir por la reelección) y Ulpiano Suarez y Matías Stevanato (ambos van por segundo mandato)- aún no es considerada vieja. Pero con la llegada de los intendentes electos mencionados, éstos pasarán al plano de lo conocido. Hasta podría considerarse que algunos perdieron el tren de la Gobernación en los comicios de este año, aunque todavía les quedaría crédito para 2027, siempre dependiendo de múltiples factores. La intendenta de Santa Rosa -que conducirá su comuna cuatro años más- y presidenta del Partido Justicialista (PJ), Flor Destéfanis forma parte de ambos grupos.
Francisco Lo Presti ganó la Intendencia de Las Heras con 28,11% de los votos. Hasta abril de este año fue secretario de Obras y Servicios Públicos en la gestión de Daniel Orozco. Renunció luego de que Orozco pegara el portazo y se uniera a La Unión Mendocina junto a Omar De Marchi. Lo Presti pasó de ser un posible sucesor de Orozco a competir contra él en una campaña que en suelo lasherino estuvo plagada de denuncias penales y acusaciones cruzadas entre dirigentes que hasta hace 8 meses posaban juntos para las fotos.
Con apenas 37 años, Lo Presti se hará cargo del segundo municipio más poblado (228.525 habitantes). «Personalmente, es un sueño cumplido que se me dé la oportunidad a esta edad con bastante experiencia en gestión, propio de mi pasado en la Universidad y en el municipio. Viene bien la renovación porque tiene que ver con una visión distintas a nuevos desafíos y nuevas problemáticas para así poder encararlas. Ya se venía dando una renovación en su momento con Tadeo García Zalazar, Sebastián Bragagnolo y Ulpiano Suarez, que demostraron que hay capacidad de gestión», dijo en diálogo con MDZ. Y luego comentó sobre su salida de la actual administración: «Me quedé siempre en Cambia Mendoza. Se constituyó un frente con funcionarios que apostaron a sus convicciones. Se había quebrado el mandato electoral…».
En tanto, reconoció tener una «muy buena relación» con Esteban Allasino, intendente electo de Luján de Cuyo que forma parte del frente La Unión Mendocina. «Lo conozco desde la secundaria. Participábamos de los modelos de Naciones Unidas en conjunto. Además, cuando Luján estaba en Cambia Mendoza siempre era parte de la mesa de trabajo. Nos reuníamos para generar políticas para el Gran Mendoza. No estamos en la vereda de enfrente. Vamos a trabajar mancomunadamente, más allá de las posiciones partidarias. Todos tenemos la misma vocación», aportó.
Diego Costarelli tiene más años en la política, especialmente en Godoy Cruz. Fue director de Relaciones con la Comunidad, director de Ambiente y hasta secretario privado de Alfredo Cornejo cuando éste era jefe comunal. En la Legislatura pasó por el Senado y actualmente es diputado provincial. Una semana atrás consiguió más del 45% de los votos y será quien reemplace a Tadeo García Zalazar en el municipio tras 8 años. Costarelli, de 45 años, cree que «la renovación está en las ideas a la hora de administrar el Estado porque las demandas van cambiando y se exigen nuevas ideas para satisfacerlas. En Godoy Cruz no solo renovamos los servicios, sino las caras también. Nos anticipamos a la renovación de demandas».
La campaña que polarizó a Cambia Mendoza con La Unión Mendocina terminó y Costarelli también reconoció tener un vínculo con Esteban Allasino. «Allasino el domingo me saludó. Tenemos la mejor de las convivencias y una buena relación», comentó y, después, sumó: «Con Lo Presti y Calvente me llevo realmente bien y compartimos la mirada de lo que viene: administración austera, superávit y renovar los servicios. Hay que trabajar juntos. No se pueden pensar las administraciones de forma aislada».
La relación entre Costarelli y Marcos Calvente es de tal cercanía que hasta comparten actividades de ocio, como -por ejemplo- ir juntos al Estadio Malvinas Argentinas a ver a Godoy Cruz. Calvente, de 41 años, tendrá la tarea de reemplazar a Marcelino Iglesias en Guaymallén después de 8 años. Ganó las elecciones con 36,98% de los sufragios y estará al frente del municipio más poblado (321.371 ciudadanos). En la actualidad es secretario de Obras y Servicios Públicos desde 2015 y es la única función estatal que ha cumplido.
«No es solo una renovación generacional. Tiene que ver con la visión y la construcción política. Soy un ingeniero que ha desarrollado una carrera técnica y vengo con otra visión y creo poder dar un aporte desde ahí. Ser secretario de Obras es mi primera intervención en la política», dijo Calvente (43), que aseguró que con Marcelino Iglesias -intendente saliente- tuvo «una gran escuela» al mezclar «la doctrina radical, la visión empresarial y las necesidades que tiene un departamento como Guaymallén».
«Marcelino me enseño a tomar decisiones con costo politico, pero que corresponden», aportó. Sobre el hecho de lograr despegarse de Marcelino, aseveró que no será una gestión con «Calvente al gobierno y Marcelino al poder», como reza la histórica frase que invoca a Juan Domingo Perón y a Héctor Cámpora. En ese orden, señaló que «Si no lo convocan, es muy respetuoso. Él sabe cómo se ejerce el liderazgo en un municipio y sé que lo va a respetar. Tiene claro ese concepto. Me va hacer reclamos como un vecino».
Calvente aseguró que su relación con Esteban Allasino «es excelente». «Es ingeniero civil como yo. Él era empleado de la municipalidad de Guaymallén y se fue a Luján con Omar De Marchi. Hemos tenido un diálogo muy fluido. Nos hemos juntado a dialogar sobre programas de financiamientos y obras».
También indicó que no sería la primera vez que «planifican todo en conjunto». «Ya veníamos trabajando de manera articulada. Por ejemplo, lo estamos haciendo para unificar el código de edificación. No tiene sentido que cada municipio tenga un código diferente. Eso ya sería un gran paso. Y con Costarelli tengo un diálogo muy fluido desde 2015. Es una de las primeras personas con las que tomé confianza».
Esteban Allasino (39) es el jefe de Gabinete de Luján de Cuyo. Sebastián Bragagnolo decidió en abril de este año que no iría por la reelección -pese a tener la posibilidad- y le cedió la candidatura a Allasino, que arrasó con el 44,35% de los votos este en representación del frente La Unión Mendocina.
Respecto a la renovación, el lujanino valoró que «se renueve el estilo y el espíritu. La gente joven permite mayor impronta y una mirada moderna. También es buena porque se terminan las reelecciones indefinidas. Hace que se estén desarrollando perfiles. Yo estuve en todos los escalafones municipales. Fui encargo del equipo de bacheo, secretario, jefe de Gabinete y ahora intendente electo. Todo eso tiene muchas ventajas. Te da un conocimiento profundo para tomar decisiones. Queda pendiente que haya más mujeres. Ojalá sean electas más mujeres en cargos ejecutivos».
Pese a las diferencias partidarias con sus pares de Guaymallén y de Las Heras, destacó: «Lo Presti, Calvente y yo en algún momento manejamos las obras de nuestros municipios. Hemos compartido muchas mesas de trabajo. Son personas muy formadas y tienen el pulso de los servicios municipales. Es muy importante eso». Y añadió: «Tengo un estilo de gestión muy intenso. Es la única forma de que las cosas sucedan. Siempre es más fácil si construís una relación honesta con el otro. Si lo insultás y difamás, te sentás y te saca a los ponchazos. Hay que resolver».
Los que vuelven
La contracara de la renovación se puede ver en municipios donde históricos jefes comunales retornarán la Intendencia. Por ejemplo, Junín, con Mario Abed; Rivadavia, con Ricardo Mansur; Malargüe, con Celso Jaque y San Rafael, con Emir Félix.
Sobre el retorno de viejos conocidos, Lo Presti opinó: «Tiene que ver con morfología de cada departamento. Son municipios que tienden a reconocer en el intendente un vecino muy cercano en poblaciones más chicas. En ese acercamiento tiene mucha significado lo que representan estos líderes».
Costarelli expresó que «en Junín, Abed es un tipo que administra bien. Las elecciones las pierden o ganan los oficialismos. En Rivadavia es un caso emblemático porque la persona que vuelve tiene más de 70 años y lo de Jaque atenta contra la renovación». Aunque insistió más en la renovación de «de ideas y demandas» que «en las personas».
Para Allasino, la población «en la elección hace una preferencia y no elige en libertad de acciones. En Junín, Malargüe y Rivadavia hay una buena valoración de lo que han hecho. Si ahí no hubo una oferta más joven, no había otra opción. Hay que hacer un equilibrio con el temple y las personas mas experimentadas. Está bueno ese laburo de equilibrio».