Intendentes presionan en Diputados para que Vidal pague “costo político” por los tarifazos

Intendentes del interior se reunieron hoy en La Plata para alumbrar una estrategia que permita aliviar la carga de los tarifazos sobre los vecinos y no desfinanciar a las comunas, todo sin pagar el "costo político".

Intendentes del interior se reunieron hoy en La Plata para alumbrar una estrategia que permita aliviar la carga de los tarifazos sobre los vecinos y no desfinanciar a las comunas, todo sin pagar el «costo político».

Intendentes del PJ con raigambre en el interior bonaerense se dieron cita esta tarde en la sede del partido, sobre calle 54, para intentar coordinar una estrategia que le ponga freno al intento del oficialismo de eliminar impuestos de la boleta de luz que van a las arcas municipales y a la limitación de parte del Gobierno de la facultad de incluir tasas municipales en la boleta de luz.

Una decena de alcaldes discutieron largamente hasta alumbrar una solución que permitiría defender los recursos municipales y sortear el “costo político” que la discusión, en los términos en los que se descarta la planteará Cambiemos, les puede llegar a hacer pagar.

Se dieron cita, entre otros, Mario Secco, de Ensenada; Germán Lago, de Alberti; Francisco Echarren, de Castelli; Marcelo Santillán, de Gonzáles Cháves, y Alfredo Fisher, de Laprida.

La cuenta es simple, pero muchos no la calcularon bien: si el debate se plantea por el lado de “impedir” que Vidal concrete la idea de eliminar tasas e impuestos de la boleta de luz, la consecuencia será que los vecinos de toda la Provincia pagarán más caros los servicios.

En ese marco, según reconstruyó INFOCIELO, se tejió un acuerdo mejor: los intendentes pedirán a sus legisladores que convoquen a una sesión especial en Diputados –donde, unida, la oposición tiene más fuerza para oponer a Cambiemos- con dos ejes primordiales.

Por un lado, retrotraer las tarifas a diciembre del año pasado, mediante un acuerdo y una ley como la que se aprobó en la Cámara Baja del Congreso, a partir justamente, de un acuerdo entre todos los sectores del peronismo, desde el ala K hasta el Frente Renovador.

Por el otro, el objetivo más ambicioso: conseguir que sean las empresas distribuidoras y no el Estado –en cualquiera de sus niveles- o los vecinos, quienes paguen el seis por ciento que Vidal quiere sacar de las boletas. “La discusión que queremos dar es que nuestros vecinos puedan pagar la luz”; le dijo a este portal un protagonista del cónclave.

“Vidal quiere favorecer a las empresas y queremos que sea ella quien pague el costo político de la decisión”, confirmó otro de los asistentes.

La preocupación del peronismo no es fútil. Antes del cónclave, en Cambiemos se frotaban las manos a la espera de que en Diputados se confirme lo que el relato vidalista iba a presentar como la avaricia de los intendentes imponiéndose a las necesidades de los usuarios y consumidores de servicios esenciales. “Vidal se queda con los laureles, y el costo político lo pagan los intendentes, ¿qué vecino va a estar en contra de que le bajen los impuestos?”, razonaba esta misma tarde un legislador macrista del interior.

Advertidos de la maniobra, los intendentes pararon la bocha y levantaron la cabeza. Ahora articulan con algo más de sigilo para armar la jugada colectiva que les permita imponerse a los planes de Vidal y su nutrida tropa legislativa. Hay un último detalle que los estrategas no pierden de vista: varios jugadores del plantel peronista tienen asteriscos sobre sus nombres y son seguidos muy de cerca.

La posibilidad de una traición está latente y entre las tribus peronistas no falta quien se trace en ese horizonte un objetivo de mínima: dejar expuestos los acuerdos de los que juegan para Vidal. EGM

Fuente: InfoCielo