Concejales de Rosario de Lerma impulsan una nueva carta orgánica

Los concejales quieren independencia económica y proponen modificaciones profundas en la carta magna.

Los concejales quieren independencia económica y proponen modificaciones profundas en la carta magna.

La carta orgánica de Rosario de Lerma necesita imperiosamente una modificación integral. Redactada y puesta en vigencia en el año 1.989, sus 29 años han dejado huellas insoslayables en esta comunidad.

En aquellos momentos nunca se tomó en cuenta la igualdad de género, o el derecho a convivir en un medio ambiente protegido, o las construcciones de altura, las torres de comunicaciones y su legislación, o la protección de los animales. La carta orgánica de Rosario de Lerma quedó tan obsoleta como la administración económica del Concejo Deliberante, cuya autonomía no existe, sino que más bien tiende a ser dependiente del sistema económico del Ejecutivo comunal, con una llamada «caja chica» para gastos menores de todo el cuerpo, siendo que su presupuesto anual, ronda los 5 millones de pesos.

El Ejecutivo municipal ha enviado al Concejo el pedido de impulsar modificaciones profundas como para actualizar cuestiones inherentes a la vida actual de la comunidad, que de 15 mil habitantes en 1.989, pasó a alrededor de 35 mil en la actualidad.

«Estamos convocando a todos los actores civiles de la comunidad para debatir en un espacio de ideas las posibles modificaciones que debe tener nuestra Carta Orgánica. Cuando se sancionó no se tomaron en cuenta temas puntuales que hoy son de vital importancia para nuestra comunidad», explicó Griselda Galleguillos, presidente del Concejo Deliberante de la ciudad.

«Los tiempos cambiaron, ahora somos una ciudad y el Concejo Deliberante necesita autonomía para comenzar a trabajar de otra manera», dijo Sara Gerez, concejala.
La emergencia por violencia de género no se tomó en cuenta en aquellos años, cuando las denuncias y los hechos extremos no tomaban el matiz social de estos días. Tampoco los loteos y sus reglamentaciones, o las responsabilidades penales para quienes hayan cometido dolo con el erario público, y por contar con mandato cumplido no se hacen responsables de su accionar fraudulento.

«Queremos una carta organiza que refrende claramente las responsabilidades de los funcionarios porque después es la comunidad la que se debe hacer cargo de sus irresponsabilidades», afirmó Galleguillos.

Por otro lado, el Concejo trabaja en un proyecto que busca la autonomía económica del cuerpo una vez reformada la Carta Magna municipal. En la actualidad, el Ejecutivo designa un monto pequeño, llamado «caja chica», para los gastos comunes del Concejo.

«Se trata de un proyecto de autonomía del Concejo a través de la reforma de la Carta Orgánica municipal, con lo que podríamos tener otras personas para controlar y resguardar los fondos y las arcas municipales», explicó la edil Sara Gerez y agregó que se podría «contratar el servicio de contadores y otros abogados».

«Los tiempos cambiaron, ahora somos una ciudad y el Concejo Deliberante necesita autonomía para comenzar a trabajar de otra manera», insistió.

Gerez señaló que «tenemos que trabajar sobre los fondos que se van a requerir para la modificación: hoy el Concejo Deliberante gira 5 millones y medio de pesos de presupuesto anual y nosotros creemos que subiéndolo a 6 millones y medio podemos andar muy bien» y aseguró que «una caja chica de 8 mil pesos para gastos administrativos no cierra».

Gerez apuntó a evitar aquellas críticas a los concejos por malas rendiciones y mal manejo de fondos. Para la reforma de la Carta Orgánica de Rosario de Lerma se debe cumplir con el paso de someterlo a la consideración de la Legislatura provincial, que aprueba o no la iniciativa. Y luego se debe convocar a elecciones de convencionales constituyentes.

Fuente: El Tribuno