La Casa Rosada reflota gestiones para reducir los subsidios en Buenos Aires

Presionado por los insistentes reclamos de gobernadores de la oposición, el Gobierno nacional reflotó ayer las gestiones para dejar de subsidiar el transporte y la energía en la Capital Federal y en la provincia de Buenos Aires.

Presionado por los insistentes reclamos de gobernadores de la oposición, el Gobierno nacional reflotó ayer las gestiones para dejar de subsidiar el transporte y la energía en la Capital Federal y en la provincia de Buenos Aires.

Varias fueron las señales que se enviaron desde la Casa Rosada para calmar los planteos de los mandatarios provinciales, quienes siguen un camino abierto por el cordobés Juan Schiaretti y se quejan por los fondos que la Nación destina a las administraciones de Horacio Rodríguez Larretay María Eugenia Vidal.

Según confirmaron fuentes oficiales a La Voz, el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, analizó ayer el tema con Rodríguez Larreta y con Vidal durante una reunión en el despacho del jefe de Gabinete, Marcos Peña.

Un partido que recién empieza y que durará 81 días
Puntualmente, en el cónclave se evaluó la posibilidad de transferir las empresas metropolitanas Edesur y Edenor a las órbitas de la Capital Federal y de la provincia de Buenos Aires, para que el Gobierno nacional deje de afrontar los costos por el funcionamiento de esas dos distribuidoras de energía eléctrica.

El encuentro terminó con un compromiso para continuar evaluando la situación, pero trascendió que se descartó actuar en el mismo sentido con Aysa, la proveedora de agua potable en Capital Federal y 26 municipios.

En el Gobierno aseguran que los fondos que se destinan a la empresa de aguas sólo son para obras y que se compensan en el resto de las provincias con las partidas que se entregan a través del Ministerio del Interior, conducido por Rogelio Frigerio.

“Sólo recibe subsidios para realizar obras, aproximadamente unos 15 mil millones de pesos”, remarcó Dujovne el martes pasado cuando expuso en el Congreso y escuchó la queja del senador cordobés Carlos Caserio por el dinero enviado a Aysa.

Los gobernadores opositores fundamentan sus reclamos con un documento, en el que indican que la Nación se ahorraría 49.210 millones de dólares (0,12 por ciento del PBI) si dejara de subsidiar el transporte en el Amba, y otros 15.268 millones de dólares (0,39 por ciento del PBI) si dejara de entregar fondos a Aysa.

Los mandatarios provinciales también se quejan porque, advierten, la vigente asistencia presupuestaria del Gobierno a las administraciones de Vidal y de Rodríguez Larreta parecieran responder a planes electorales de Cambiemos, cuyo poderío se sustenta en esos distritos.

La promesa de eliminar los subsidios que se destinan al Área Metropolitana de Buenos Aires (Amba) también se plasmó en el Informe de Avance del Proyecto de Ley del Presupuesto 2019 que la Jefatura de Gabinete, a cargo de Marcos Peña, envió al Congreso.

En el texto se ratificaron varios de los compromisos asumidos en el Consenso Fiscal de noviembre de 2017 y se recordó que uno de ellos es que “en materia de subsidios energéticos y al transporte, se convino la eliminación de aquellos destinados al Amba, diferenciales con respecto al resto del país”.

De esta manera, la administración de Cambiemos trató de acercar voluntades con los gobernadores peronistas y ratificó que continúa sobre la mesa la discusión para dar respuesta a sus reclamos.

La necesidad de mantener la buena sintonía también la expuso el presidente Macri, en el discurso que ofreció ayer en Chaco: “Necesito que digamos que estamos juntos y nos comprometamos a trabajar juntos… Presidente, gobernadores, intendentes, los dirigentes y los argentinos”.

“Les pido colaboración y que no reclamen soluciones mágicas”

El presidente Mauricio Macri les pidió a la oposición, a sindicalistas, a empresarios y a comunicadores que no reclamen “soluciones mágicas” ante los problemas financieros que enfrenta el país. “Pido que colaboren diciendo qué van a hacer para ayudar a sortear estos obstáculos”, reclamó.

El Presidente estuvo ayer en Chaco, junto al gobernador Domingo Peppo, para inaugurar la extensión de 500 kilómetros del tren Belgrano Cargas.

Macri habló de la coyuntura: “Lo que pasa en el resto del mundo no se puede controlar. Sé que todos los argentinos están poniendo el hombro. Contra viento y marea, estamos haciendo cosas bien. Por eso pido que nos comprometamos a trabajar juntos”.

Fuente: La Voz