Corredor del Viento: para potenciar la región norte de Santa Cruz

El nuevo Corredor del Viento buscará vincular la región norte para impulsar los destinos con mejor afluencia.

Hasta aquí, el desarrollo turístico de la provincia ha rondado siempre en virtud del camino que marcan las rutas nacionales 3 y 40. El nuevo Corredor del Viento buscará vincular la región norte para impulsar los destinos con mejor afluencia. Para eso, se realizó un diagnóstico por el que se determinaron roles y acciones específicas de las distintas ciudades implicadas.

“Si cada localidad lograba entender su propio rol en materia turística, entonces comprendería qué debería requerir para desarrollar la actividad”, explicó a este medio la delegada de la Secretaría de Turismo en zona norte, Marina Basalo, para figurar la importancia de realizar un diagnóstico que estableciera la base de un plan de gestión y promoción turística de todas las localidades de la provincia que son miembros del Corredor del Viento: Pico Truncado, Las Heras, Caleta Olivia, Cañadón Seco, Los Antiguos, Perito Moreno, Jaramillo-Fitz Roy, Lago Posadas y Puerto Deseado.

El avance de las rutas nacionales 3 y 40 ha dejado a estas zonas como puntos de paso o como destinos que se alejan de los recorridos más elegidos por los turistas nacionales e internacionales. La necesidad por desarrollar estas ciudades sólo requería de una decisión política que intentara consolidar y coordinar acciones de promoción y desarrollo que garantizaran el fortalecimiento de la actividad turística en el norte de Santa Cruz.

Hacia ese objetivo fue que se gestó en 2016 el Corredor del Viento. Con nuevos aires en la Secretaría de Turismo, este año la gestión apunta hacia una “integración territorial”, tal como lo definió la titular de la cartera, Valeria Pellizza, al brindar una entrevista a La Opinión Austral días atrás. “El trabajo de integración territorial mano a mano con los municipios es un camino en el que creo mucho y me parece más asertivo para realizar las transformaciones turísticas que necesitamos”, sostuvo.

En consonancia con esos lineamientos es que las localidades trabajan mancomunadamente para consolidar el crecimiento y el desarrollo del turismo, en busca de una especia de reconversión de esos pueblos. “Es imprescindible articular desde lo territorial, planificar y organizar con una mirada federal y solidaria”, argumentó el presidente de la Comisión de Fomento de Cañadón Seco, Jorge Soloaga.

El “remedio que necesitan”

Las estrategias, las acciones coordinadas y en conjunto, más la promoción y el desarrollo de los destinos y sus atractivos hacen a la consolidación del turismo como una pata fundamental en las economías regionales en expansión. En provincias como Santa Cruz, con tanta extensión y riqueza natural, el avance en esa materia se torna fundamental para las regiones.

La zona cordillerana, siempre ayudada por las montañas, la vegetación y en casos excepcionales por glaciares (como ocurre en El Calafate o El Chaltén), ha tenido una evolución significativa en todos sus niveles. La ruta nacional 40, que ahora se extiende en todo el territorio nacional, colabora para que el turista que prefiera el camino terrestre -antes que el aéreo- transcurra por cientos de paisajes atractivos.

En el otro margen, la ruta nacional 3 se ha transformado en la vía de conexión terrestre entre la Patagonia y el resto del país, por lo que los destinos que atraviesa se han vuelto más de paso que de turismo y hacia allí es donde se intentará dar el mayor salto cualitativo con el Corredor del Viento.

Por eso, en su conformación y avance se elaboró un diagnóstico de las necesidades de cada localidad, para entonces establecer “el remedio que necesitan” en materia turística, aseguró Marina Basalo, quien, además, planteó que “no se puede mirar como un todo”. Desde esa base, entonces, es que se aspirará a explotar los atractivos de esas ciudades mediante acciones que serán coordinadas y promovidas por la Secretaría de Turismo de la provincia.

Fuente: La Opinión Austral