Neuquén: hubo inscripción récord en los cursos de oficios

Son los que impulsa el Gobierno, a través del ministerio de Desarrollo Social y Trabajo. En tres horas se anotaron 4300 personas.

Son los que impulsa el Gobierno, a través del ministerio de Desarrollo Social y Trabajo. En tres horas se anotaron 4300 personas.

En apenas tres horas, 4300 neuquinos se inscribieron para realizar alguno de los cursos de capacitación en oficios que ofrece el Ministerio de Desarrollo Social y Trabajo de la provincia. La mayoría de los alumnos son jóvenes desempleados o trabajadores independientes que tienen menos pedidos a causa de la pandemia y que buscan nuevas herramientas para generar ingresos económicos.

«Por lo general, tenemos 2500 alumnos por cuatrimestre, pero este año tuvimos casi el doble», sostuvo Janette Ampuero López, directora provincial de Coordinación de Capacitación Comunitaria de ese ministerio. Según indicó, los cursos cumplen una doble función: por un lado, la contención social y el entretenimiento en cuarentena y, por el otro, la posibilidad de generar saberes que permitan una nueva salida laboral.

De los inscriptos, el 63% son mujeres, y la mayoría de ellas son adolescentes o jóvenes que buscan aprender habilidades para ofrecer nuevos servicios. Se trata del segmento que suele ser más golpeado por el desempleo. Por su parte, un 20% de los estudiantes son adultos mayores que se inscribieron, sobre todo, en las clases de pintura y arte, tapicería o corte y confección.

«Entre los cursos más populares vemos todos los referidos a oficios, como agua y gas, construcción en seco o soldadura», dijo Ampuero López, y aclaró que no solo son requeridos como una posible salida laboral. Explicó que también existen aquellos que quieren aprender estos oficios para ahorrar dinero al hacer sus propias reparaciones caseras, en un contexto en que el dinero escasea.

Servicios

Un 10% de los anotados son albañiles o trabajadores de la construcción que desean sumar nuevas disciplinas a su abanico de servicios, por lo que decidieron aprender a soldar o a construir en seco. Por otro lado, muchas personas jóvenes optaron por otras disciplinas como barbería, que es una nueva oferta y ya tiene 320 inscriptos, tapicería, con 400, y corte y confección, que atrajo a más de 250.

Los cursos que comienzan el lunes 10 son barbería, locución comercial, vitrofusión, fotografía, peluquería, soldadura, electricidad domiciliaria, edición audiovisual, mecánica de motos, pintura infantil, instalación de gas, manipulación de alimentos para celíacos, bordado mexicano y yugoslavo, maquillaje social, electricidad básica y pintura/arte.

Vía web

Si bien los talleres se dictan todos los cuatrimestres, este año se realizarán por primera vez en formato virtual. Se ofrecen clases semanales a través de la plataforma Zoom y se prevé que el curso culmine con un mes de clases prácticas, que se llevarán adelante cuando las condiciones sanitarias lo permitan.

«Es importante que terminen con una etapa presencial, porque es necesario que el capacitador evalúe los saberes adquiridos», explicó la directora, y aclaró: «En algunos casos también es importante comprobar que cumplan las medidas de seguridad, en clases como electricidad o soldadura donde existen muchos riesgos».

Los 4300 anotados son de la ciudad de Neuquén o localidades cercanas. Para los estudiantes del interior se ofrece otro formato, por las dificultades que suelen surgir en la conectividad. En ese caso, las clases se graban y los alumnos ven los videos en diferido. Luego, tienen clases quincenales con un capacitador local para sacarse las dudas que aparezcan.

Un plus para saber venderse el el mercado
Como en muchos casos estos cursos funcionan como la semilla de un nuevo emprendimiento, desde el Ministerio de Desarrollo Social y Trabajo también se ofrecen capacitaciones para que los estudiantes sepan cómo utilizar las redes sociales para promocionar sus productos y servicios.

“Hay muchos cuentapropistas que quieren ampliar sus herramientas para afrontar este nuevo contexto”, sostuvo la ministra de Desarrollo Social y Trabajo, Adriana Figueroa, con relación a la pandemia que obligó a muchas personas a reinventarse. La mayoría de los alumnos eran trabajadores independientes que vivían de empleos eventuales y ahora vieron una merma en las solicitudes.

Figueroa aclaró que el taller es solo el inicio de un proceso de acompañamiento que busca que las personas puedan insertarse en el mundo laboral con sus propios emprendimientos. Así, se los apoya para que puedan destacarse en las redes sociales y recibir más pedidos y clientes.

Fuente: La Mañana Neuquén