Puerto Deseado impulsa una fuerte propuesta de turismo rural con vistas a la apertura
La localidad santacruceña, conocida como uno de los paraísos de la biodiversidad marina de la Patagonia, suma a este tradicional atractivo turístico propuestas rurales, con emprendimientos de operadores privados y fuerte respaldo estatal, con vistas a la apertura de un turismo de espacios abiertos y naturales.
16/10/2020 MUNICIPIOSLa localidad santacruceña, conocida como uno de los paraísos de la biodiversidad marina de la Patagonia, suma a este tradicional atractivo turístico propuestas rurales, con emprendimientos de operadores privados y fuerte respaldo estatal, con vistas a la apertura de un turismo de espacios abiertos y naturales.
El norte de esta iniciativa está puesto en torno a otro reconocido atractivo de esta comuna, que son los Miradores de Darwin, donde la ría Deseado se une al río del mismo nombre, a 42 kilómetros de su desembocadura en el mar y del casco urbano, una zona donde comenzó a desarrollarse el turismo de estancias, típico de la Patagonia sur.
En esa zona, el paisaje de la única ría de Sudamérica, que frente a la ciudad está colmado de mamíferos marinos y aves terrestres y acuáticas, varía hacia el típico de estepa, árido y desértico, sólo alterado por el cañón de la ría, «esa grieta rocosa en medio de tan extensa llanura», como la describió el naturalista inglés Charles Darwin al verla por primera vez, en 1833.
La subsecretaria de Turismo de Deseado, Mónica Quintomán, dijo a Télam que junto a emprendedores privados llevan adelante «esta propuesta que fomenta el turismo rural y también a los segmentos de turismo activo y de naturaleza, que serán los más requeridos en la nueva modalidad de los viajes tras la pandemia porque se desarrollan en grupos reducidos y espacios amplios y con aire puro».
La transformación o adaptación de estancias para la actividad, junto a la oferta de actividades participativas y observación de paisajes y fauna, se enmarca también en un proceso de incremento de plazas turísticas, lo que permite a esta comuna recibir mayor cantidad de visitantes y tentarlos a permanecer más días en el destino.
Esta semana, Puerto Deseado presentó el último de estos proyectos puesto en marcha, que se desarrolla en tierras privadas y de la Reserva Provincial Intangible Ría Deseado, donde una estancia fue remodelada hasta convertirse en una «eco lodge», destinado a posicionar este destino emergente cuando llegue la apertura del turismo.
El emprendimiento, denominado Campamento Darwin EcoLodge, es producto de la restauración de la antigua estancia Cerro El Paso, que a diferencia de las tradicionales fincas de grandes hacendados patagónicos era un establecimiento donde habitaron los primeros colonos de la zona, de los conocidos como Unidades Familiares.
Sobre su puesta en valor, con materiales originales, Quitomán destacó que esa «increíble transformación» pone de manifiesto «las posibilidades que existen cuando los sectores público y privado trabajan en forma conjunta».
La funcionaria aclaró que la propuesta rural para los visitantes de Puerto Deseado no se limita a la observación de paisajes, actividades de campo o la singular fauna de la estepa patagónica, sino que apunta también al turismo activo, con la participación de los viajeros en las tareas de campo, su gastronomía y otros quehaceres.
Desde esa zona alejada de la ciudad se pueden iniciar recorridos a caballo, en vehículos o de trekking, a través de senderos organizados por los anfitriones, que brindan una nueva forma de aproximación a la naturaleza, la ría y los Miradores, con la posibilidad de combinarlos con excursiones náuticas.
El responsable del Eco-Lodge, Daniel Fueyo, señaló a esta agencia que «gran parte de las 12 mil hectáreas de la estancia forman parte de la reserva provincial intangible Ría Deseado, lo que ofrece la posibilidad de disfrutar de la fauna marina y terrestre de la región, en un perfecto estado de conservación».
Las excursiones tradicionales a los miradores o a las estancias se realizaban normalmente en sólo una jornada, pero con la habilitación del hospedaje muchos turistas podrán pernoctar cuantos días deseen, lo que aumentará los ingresos en el sistema turístico de esta ciudad puerto.
Quintomán explicó que Deseado «cuenta con unas 300 plazas hoteleras, muchas de las cuales a veces están ocupadas por huéspedes vinculados a las actividades portuarias o mineras, y si bien los turistas siempre consiguen camas, el abrir hospedaje en estancias da seguridad de tener plazas disponibles cuando realizamos nuestras promociones».