La cosecha en Mendoza se verá afectada por la falta de mano de obra para levantar la uva

Este año habrá entre un 30% y 40% menos de cosechadores por diversas razones: creencia de que les quitarán los planes sociales, vienen menos trabajadores desde el Norte y el precio del tacho, entre otras

Este año habrá entre un 30% y 40% menos de cosechadores por diversas razones: creencia de que les quitarán los planes sociales, vienen menos trabajadores desde el Norte y el precio del tacho, entre otras

La cosecha de uva para esta temporada en Mendoza no viene bien. Al anuncio del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV) que estimó que por las heladas y el granizo se reducirá el 14%, se suma la falta de cosechadores , que es un fenómeno tan real como multicausal y que desde distintos sectores coinciden en que esa reducción de mano de obra será de entre el 30% y 40%.

Ese porcentaje es un cálculo estimado pero resulta difícil de traducirlo en números reales porque año a año varía y depende de las necesidades de cada establecimiento o bodega que contrata a los trabajadores.

Una de las razones, por muchos apuntadas como principal, es que pese a que el Gobierno dispuso hace tiempo que los beneficiarios de planes sociales pueden acceder tranquilamente a este tipo de trabajos temporarios sin que por ello sufran la quita total o parcial de esos programas de ANSES, muchos descreen de que sea así.

Otro de los motivos es que este año son muchos menos los que llegan desde el Norte del país, especialmente desde Jujuy y Tucumán que son las provincias que siempre proveen gran cantidad de cosechadores a la zona Cuyo. La mayoría ha preferido quedarse por temor a que les suceda lo que pasó en 2021 cuando muchos quedaron varados en Mendoza por la pandemia y sufrieron inumerables y serios problemas, desde no tener qué comer y dónde pernoctar hasta la incertidumbre de no saber cuándo podrían regresar a sus lugares de orígenes.

El precio del tacho de uva y el poco apego de los mendocinos a esta tarea también forman parte del combo que provoca la falta de cosechadores para 2022.

La desconfianza de los cosechadores
Desde el Sindicato de Obreros y Empleados Vitivinícolas (SOEVA) el secretario gremial, Juan Aguirre, explicó en Radio Nihuil que «pese a la decisión del Gobierno, ampliamente difundida, de que nadie va a perder su plan social por trabajar en la cosecha, hay mucha gente que no lo cree».

«Tampoco vienen -sumó- porque nos le conviene lo que se paga por tacho de uva que es entre $60 y $70. Sacan cuentas y ven que no vale la pena hacerse el viaje, que muchas veces se lo tienen que pagar ellos mismos, para después volverse sin nada».

Aguirre añadió que «también están los que quedaron con miedo el año pasado por el tema Covid. La pasaron muy mal y entonces ahora lo piensan dos veces antes de decidirse a venir».

Finalmente el dirigente consideró que «antes llegaba la cosecha y era una fiesta para las familias, pero la realidad es que el joven mendocino no sabe cosechar y es muy poca la mano de obra en Mendoza. El único que cosecha es el que vive en la finca, el empleado permanente, que trata de que sus hijos o estudien o hagan otra cosa».

Piden campaña de información
Por eso de que muchos no creen que van a conservar sus planes sociales, desde el Centro de Viñateros y Bodegeros del Este realizaron un pedido especial al Ministerio de Trabajo de la Nación con el fin de que se difunda en una campaña sobre los beneficios que no se perderán a quienes accedan a inscribirse en puestos en blanco durante la cosecha.

Mauro Sosa, director ejecutivo de esa entidad, pidió en una nota difundida por medios del Valle de Uco una campaña de difusión en que se comuniquen los alcances del decreto “que establece que aquellas personas que sean contratadas bajo las modalidades de trabajo temporario o trabajo permanente discontinuo en el ámbito rural no perderán los beneficios de los planes y programas sociales. Es decir, llevar tranquilidad a los trabajadores viñateros».

Las heladas, el granizo, las peses y la falta de cosechadores
Eduardo Córdoba, presidente de la Asociación de Viñateros, coincidió en que «faltan cosechadores. Llega el momento de la cosecha y uno se entusiasma, pero lamentablemente nos afectan las heladas, el granizo, las pestes y ahora la falta de mano de obra, sobre todo para las zonas más alejadas».

«No es porque estén mal pagos -se diferenció del representante de SOEVA- pero la verdad es que cuesta conseguir cosechadores a pesar de que pueden hacer entre $3.000 y $4.000 por día. Los cuadrilleros van por las barriadas con sus camionetas y no encuentran muchachos que se sumen».

En cambio, contó: «Se ve más participación de las mujeres. Las mendocinas son muy guapas para este trabajo».

«Poca uva y poca gente»
Mabel González, pequeña productora mendocina, también fue entrevistada en radio Nihuil. «La cosecha viene bastante mal en varios sentidos -comentó- porque hay poca uva y poca gente».

«Es verdad que hay gente que no cree que la dejarán sin su plan social si es blanqueada en la cosecha y también que ha venido poca gente del Norte», añadió.

Fuente: Uno