Paran los médicos residentes de hospitales públicos, municipales y privados
Realizarán además una movilización en reclamo de "salarios adeudados, aportes jubilatorios y antigüedad" entre otras demandas.
17/11/2022 MUNICIPIOSRealizarán además una movilización en reclamo de «salarios adeudados, aportes jubilatorios y antigüedad» entre otras demandas.
El jueves los médicos residentes municipales, provinciales y privados de Rosario realizarán un paro sin asistencia a los efectores en reclamo de pago de salarios adeudados, aportes jubilatorios, asignaciones, antigüedad y pago para todos los residentes ya que algunos reciben la mitad del salario o directamente no cobra, según anunciaron desde la organización Graduados por el Derecho a la Salud.
Todos los hospitales y sanatorios afectados por la medida aseguraron que las guardias mínimas serán garantizadas.
A las 12, los residentes se concentrarán en la plaza 25 de mayo desde donde marcharán hacia gobernación.
Mariano Iglesias, representante de este grupo de médicos (que son más de 1.400 en todo Rosario), aseguró que «el gobierno municipal y provincial debe escucharnos. Todavía hay muchos médicos sin cobrar. Los compañeros no pueden vivir de plata prestada mientras están trabajando todo el día adentro del hospital. Es una desconsideración»
Conrado Gysin, otro de los representantes, agregó: «Necesitamos que el intendente Pablo Javkin y el Gobernador Omar Perotti nos escuchen. Queremos que se nos reconozca como trabajadores. Trabajamos a destajo, brindamos lo mejor a la población y le damos calidad de atención pero esto no puede ser a costas de nuestra salud, de no dormir por 24 o 48 horas y del incumplimiento de nuestros derechos. Por eso estaremos movilizándonos y haciendo visible nuestros reclamos junto al resto de los profesionales».
Desde el Ministerio de Salud de Santa Fe, hubo este martes una respuesta contundente: «Vemos que los reclamos se unifican pero no sucede lo mismo en todos los ámbitos. La provincia tiene una única situación pendiente que en realidad ya se solucionó y es el pago de los ingresantes del 3 de octubre que van a cobrar en los primeros días de diciembre y eso es por un proceso lógico del que los residentes estaban avisados», señaló a este diario Leandro Costantini, subsecretario de Planificación y Fortalecimiento Institucional del Minsterio de Salud de Santa Fe, en cuya órbita está la Dirección de Residencias de Salud.
En alerta
El martes 8 de noviembre, cientos de médicos residentes de la ciudad hicieron una marcha desde el Cemar hasta la sede de Gobernación, oportunidad en la que plantearon diversos reclamos y donde anunciaron posibles medidas «más fuertes» de no obtener respuesta a sus pedidos de mejora laboral.
La situación de los residentes (que son médicos que están cumpliendo tareas en sanatorios y hospitales en el marco de la formación de la especialidad que eligieron) es compleja en todo el país.
En distintas provincias se vienen movilizando en reclamo de lo que consideran un incumplimiento en los derechos como trabajadores.
La elección de la residencia como espacio de formación profesional está en jaque, al punto que cada año quedan vacantes más puestos en las distintas especialidades.
Muchos egresados de Ciencias Médicas buscan hacer cursos o posgrados que les permitan formarse sin tener que pasar por los tres años mínimos de residencia en condiciones tan poco favorables, según vienen expresando los jóvenes médicos.
De hecho, este último año, en Rosario, “más del 50% de los puestos disponibles tanto en el sector público como privado quedaron vacantes”, lo que generó alarma entre funcionarios del área de Salud y los colegios profesionales.
Incluso en residencias clave, como la de pediatría, para 18 ofrecimientos que hubo en el sector privado rosarino, solo se presentó un residente.
Uno de los reclamos fuertes durante la jornada de protesta del 8 de noviembre fue la demora en el pago de los salarios de los residentes que ingresaron este año que, al igual que los jefes de cada área, que «cobrarán con varios meses de demora», según denunció Mariano Iglesias, de Graduados por el derecho a la Salud, la entidad que promovió la multitudinaria marcha a la que se sumaron autoconvocados y otras organizaciones que los representan.
“No queremos ser mano de obra barata”; “estamos agotados”; “nos usan para mantener al sistema de salud y no nos consideran como verdaderos trabajadores”; “nos llenaron de aplausos en la pandemia, pero ahora no nos cumplen ni las horas de descanso”; «eso que llaman vocación es trabajo no pago», fueron algunas de las quejas que se escucharon a viva voz y que volverán a oírse el jueves.