Brasil: Pacto contra el Hambre quiere sacar de la pobreza extrema a 20 millones de personas
La declaración fue dada este martes (23) en el lanzamiento del Pacto contra el Hambre, un movimiento multipartidista y multisectorial que tiene como objetivo erradicar el hambre en Brasil para 2030 y reducir el desperdicio de alimentos en Brasil.
Tasas de interés adecuadas y ambiente de crecimiento económico, aprobación del nuevo marco regulatorio fiscal , la reforma tributaria y la política de ganancia real del salario mínimo son metas integradas para sacar a las personas de la pobreza, señaló el ministro Wellington Dias, de Desarrollo y Asistencia Social, Familia y Lucha contra el Hambre en Brasil.
La declaración fue dada este martes (23) en el lanzamiento del Pacto contra el Hambre, un movimiento multipartidista y multisectorial que tiene como objetivo erradicar el hambre en Brasil para 2030 y reducir el desperdicio de alimentos en Brasil. Al evento asistieron líderes de entidades gubernamentales, académicas, empresariales, no gubernamentales y religiosas, entre otras.
Según el ministro, a fines de este año, con la implementación del pacto, alrededor de 8,5 millones de familias, alrededor de 20 millones de personas, deberán salir de la pobreza extrema.
El movimiento tiene como objetivo “involucrar a toda la sociedad para erradicar el hambre de manera estructural y permanente y reducir el desperdicio a lo largo de la cadena alimentaria”. Además, pretende que nadie pase hambre en Brasil para 2030 y, para 2040, que todos en el país estén bien alimentados.
Según los organizadores, la acción se realizará a través de la articulación, la inteligencia estratégica y el reconocimiento de buenas prácticas para tender puentes entre la sociedad civil organizada, el sector privado y el gobierno.
La ministra Simone Tebet, de Planificación y Presupuesto, también presente en el evento, evalúa que esta alianza entre los sectores, dentro del Pacto Contra el Hambre, es fundamental para erradicar la pobreza extrema y el hambre en el país. “Cuando hablamos de hambre, no podemos olvidar que un Brasil que alimenta al mundo desperdicia casi ocho veces lo que se necesita para matar el hambre, entonces tenemos que garantizar una red junto con la sociedad civil organizada y el tercer sector de la cultura de conciencia al respecto. .”
Simone Tebet enfatizó que el hambre es un problema complejo y que no es fácil de resolver. “El gobierno federal tiene los recursos y el presupuesto para, a través de la asistencia, garantizar Bolsa Família y toda la red de protección familiar”, dijo.
“Pero esto implica algo más, implica no solo hacer los deberes, tener políticas públicas eficientes para que los R$ 160 mil millones de la Bolsa Família lleguen a quienes realmente los necesitan, sacando del padrón a los que ganan irregularmente, como solían sucedió en el último gobierno, por lo tanto, para no despilfarrar el dinero público”, agregó.
