Soja, Salario Municipal y el silencio de los Intendentes
Por Claudio Leoni
Cuando iniciamos la discusión salarial en Paritarias, le pedimos a los Intendentes que la negociación debía enmarcarse en un aumento superior al del año pasado (26%) y cercano al incrementos de los Recursos de Coparticipación del 2013, que se ubicaron en el 35%. Con esto se garantiza el normal funcionamiento de los municipios y comunas, pero también la certeza de que los trabajadores podremos cobrar el incremento salarial que se pacte.
Dentro del total de Recursos de Coparticipación que reciben los municipios (del cual tomamos referencia para el pedido de aumento de salarios), uno de ellos tiene un impacto importante sobre ese monto total. Me refiero al dinero que ingresa por las exportaciones de la soja.
Se trata del Fondo Federal Solidario que la Nación coparticipa a las Provincias y esta a sus Municipios y Comunas. Este Fondo se constituye con el 30% de la recaudación por el impuesto a las exportaciones de la soja.
Por eso, cuando escuchamos a los dirigentes de la Mesa de Enlace o de la Sociedad Rural, afirmar que no venden y acumulan la soja esperando un devaluación para obtener mayores ganancias, a los trabajadores municipales y a sus familias nos someten a un doble despojo en nuestras condiciones de vida.
Primero le restan recursos a los municipios para destinar al salario y por otro lado generan expectativas del aumento del dólar que se traslada a los precios generando mas inflación y reduciendo nuestro poder adquisitivo.
Cuando el presidente de la Sociedad Rural dice que hay entre 6 y 7 millones de toneladas de sojas retenidas en los silos con un monto estimado en 10 mil millones de dólares, a la espera de que se estabilice la economía, que quiere decir?
Dice simplemente que esperan una devaluación para que lo que hoy venden a $8 pesos, en los próximos días lo puedan vender a $12 o $13. Como el que “guarda” siempre “tiene”, con solo “guardar” se quieren asegurar una ganancia extra de 45%.
Eso es lisa y llanamente un verdadera especulación financiera que indefectiblemente pagan los trabajadores.
Del otro lado del mostrador, si esto ocurre, el trabajador tendrá que pagar mañana $13 pesos lo que hoy paga $8 y ayer pagaba $6.
Los trabajadores municipales para poder compensar la perdida del poder adquisitivo ocasionada por la acción de estos especuladores, requiere que los recursos de los municipios se incrementen para poder destinarlo a los salarios y además continuar prestando los servicios públicos a nuestros vecinos.
Pero entonces, nuevamente la misma pregunta. Cuando el Presidente de la Sociedad Rural o Buzzi de la FA, afirman que hay soja en los silos sin vender por un monto de 10.000 millones de dólares, esperando que la economía se estabilice, que quieren decir?
Dicen simplemente que los Municipios y Comunas de nuestra Provincia dejaron de recibir 230 millones de pesos. El equivalente a salario promedio mensual de aproximadamente 28.000 trabajadores y trabajadoras municipales.
En la paritaria, los Intendentes ofrecieron un aumento mínimo garantizado de $ 945.
Si contaran con los recursos derivado de las 7 millones de toneladas de soja que los exportadores tiene abarrocada en los silos, a la espera de una mayor devaluación, podrían asegurar un aumento mínimo de $ 1500 para todos los trabajadores durante los 12 meses del 2014.
El silencio de los Intendentes
Aquí corresponde preguntarse:
Por que dicen que no les alcanzan los recursos para otorgarnos el aumento que legítimamente nos corresponde?
Por que dicen que tienen que parar las obras públicas si aumentan los sueldo de sus trabajadores?
Por que nos pretenden enfrentar con los vecinos diciendo que les aumentan los impuestos para pagar un incremento salarial?
Por que se quedan en silencio y no reclaman a los exportadores que vendan lo que tienen guardado para especular con sus fabulosas ganancias?
Por que se hacen los distraídos frente a la injustificada remarcaciones de precios y la alevosa evasión fiscal que pasa delante de sus narices?
Por que saben que el hilo se corta por lo mas delgado.
Simplemente por que es políticamente mas conveniente cercenar un incremento salarial de sus empleados que enfrentarse con los poderosos.
