El agroturismo como potenciador; casos de éxito en el Alto Valle
El agroturismo en el Alto Valle de Neuquén y Río Negro, Patagonia Argentina, es una alternativa que tiene un alto potencial de desarrollo.
El agroturismo en el Alto Valle de Neuquén y Río Negro, Patagonia Argentina, es una alternativa que tiene un alto potencial de desarrollo.
En el Alto Valle de Río Negro y Neuquén, surgen cada vez más opciones de turismo rural o agroturismo donde los visitantes pueden experimentar una cercanía con los proyectos productivos locales y su gente. La Organización Mundial del Turismo, considera que el turismo rural viene en crecimiento y que se prevé un futuro mejor en los próximos años. Entre los beneficios que aporta esta práctica se encuentra, la creación de nuevos puestos de trabajo, mejoras de los medios de subsistencia, además de una oportunidad para evitar la despoblación de áreas rurales.
El agroturismo es una práctica ampliamente extendida en todo el mundo, que permite que los visitantes puedan conocer de primera mano, de qué lugar provienen los alimentos y sus productos derivados. Además, facilita el contacto con la naturaleza y la posibilidad de conocer a los protagonistas de cada proyecto productivo.
Los desafíos a tener en cuenta para llevar adelante prácticas de turismo rural, muchas veces se basan en la falta de infraestructura, la ausencia de personal capacitado y la falta de financiamiento para llevar adelante este tipo de proyectos.
Tres casos de éxito en el Alto Valle
En el Alto Valle de Río Negro y Neuquén, las típicas chacras de peras y manzanas, van sumando opciones de visitas guiadas, gastronómicas y en algunos casos de alojamiento. También se suman otros proyectos rurales que se dedican principalmente al cultivo de frutas finas, verduras, olivares y producción de vinos.
Si bien esta zona no se caracteriza por grandes proyectos de turismo rural, más allá del que ofrecen las bodegas, de a poco se van sumando ideas que constituyen excelentes ejemplos de lo que el agroturismo puede ofrecer al sistema económico productivo.
– Praderas Neuquinas.
Se trata de un olivar con 70 hectáreas cultivadas, con seis variedades diferentes de olivos. “Ofrecemos oleoturismo todos los días” explica Mariana Mauad, al frente del proyecto. “Comenzamos a recibir visitas en marzo de 2018, ya que es el único olivar cerca de la capital de Neuquén y eso es muy diferente en la zona” explica.
Praderas Neuquinas cuenta con un almacén en su finca, donde ofrecen todos los aceites elaborados y envasados en el olivar. El espacio está abierto de lunes a sábado de 10 a 15 horas para la compra. Sin embargo, las visitas guiadas se realizan con reserva previa.
“Nuestra propuesta de oleoturismo, es una experiencia de sabores y sensorial. Consiste en un tour que tiene una duración de una hora y media aproximadamente, donde contamos la historia de nuestro olivar, visita a la almazara, paseo por los olivos y cata profesional de las distintas variedades de aceite de oliva virgen extra” desarrollan desde el emprendimiento.
Asimismo, hay otro tipo de actividades como eventos de temporada, que incluyen comidas criollas, cosecha, poda, arte, manualidades y “tantas otras siempre acompañadas de gastronomía local, con nuestros productos como estrella y de colegas de la zona” finaliza la gerente de Praderas Neuquinas, proyecto situado en Ruta 7, Km 13,5 de Centenario.
– Las Lagunas Agroturismo.
Este proyecto nació hace tres años cuando Emilio Scola y su familia compraron la chacra para un cambio de vida más cerca de la naturaleza. De las 16 hectáreas, ocho están plantadas con peras y manzanas y, en las otras ocho, hay una variedad de cosas, entre ellas una serie de lagunas (menucos) totalmente naturales.
“En el medio de la chacra hay cinco hectáreas de monte nativo con vegetación autóctona” nos cuenta Emilio y agrega que además tienen tres hectáreas donde están diversificando la producción. “Tenemos gírgolas que se cultivan en troncos de álamo y una hectárea y media de alfalfa para darle de comer a nuestros animales. También tenemos una plantación de lavandas que se utilizan para elaborar aceites esenciales y derivados” afirma.
Las Lagunas cuenta con dos domos tipo glampling, equipados para cuatro personas cada uno. Los visitantes que pasan la noche, pueden desayunar con productos de la chacra como huevos de campo y dulces caseros. “La gente viene, charla con nosotros, recorre la chacra, pasea, en verano usa la pileta y se come un asado, ideal para desconectarse” asegura Emilio.
Durante las visitas guiadas, que duran una hora y media, se explica la historia del valle y de la chacra y se termina con mate, té, tortas fritas o pan casero. Además, los visitantes pueden adquirir productos como huevos caseros, dulces y gírgolas. Las lagunas Agroturismo está abierto todos los días, aunque es necesario consultar y reservar para las actividades. La chara se encuentra en Lago Quillén 4949, en la zona de Paso Córdoba de General Roca.
– Casa de Sabores.
Esta finca de una hectárea, ubicada en Plottier, cuenta con producción de frambuesas, moras y frutillas cultivadas de manera orgánica, antes conocida como Establecimiento Los García. Casa de Sabores es la casa de té gestionada por Sofía Sartori, mientras que Verónica, la dueña de la chacra, se encarga de la parte productiva y de la producción de mermeladas.
“En la casa de té, tenemos sector de regalería con artesanías de diferentes artistas de la zona, mermeladas artesanales con frutas de la chacra, pastelería artesanal para llevar o para consumir en el lugar” nos cuenta Sofía y agrega que también está la posibilidad recorrer la parte productiva para quien desee conocerla.
“Los cultivos de la chacra los usamos para nuestra pastelería en la casa de té, la mayoría de los productos contienen frutos del bosque y flores comestibles que cultivamos, también para uso propio a modo de decoración” amplía.
“En temporada de primavera verano, nos pueden solicitar hacer un recorrido con previo aviso y les hacemos una guía con charla informativa de como se hace la producción” a la vez que remarca que la venta de frutas finas al público es todo el año.
Los visitantes pueden adquirir directo del productor arándanos, moras, frambuesas y frutillas congeladas. Las frutas frescas, solo se consiguen en época de verano. “También pueden adquirir nuestras mermeladas artesanales hechas en el establecimiento con frutas de producción propia” finaliza. Casa de Sabores se encuentra en ruta 22, Km 1240 de Plottier. Abren de viernes a domingos y feriados, de 9 a 13 horas y de 16 a 20. “Trabajamos con reserva previa por mensaje de WhatsApp” aclaran desde el espacio.
