El presidente catalán firmó un histórico decreto que convoca al referéndum independentista
27/09/2014 EL MUNDOArtur Mas firmó hoy el decreto de convocatoria, en un acto solemne que escenificó el desafío de la norteña región de Cataluña al gobierno central de España.
La histórica decisión de Mas está amparada en una ley de consultas aprobada hace una semana por el parlamento catalán, que el Ejecutivo español de Mariano Rajoy considera ilegal y que, al igual que la convocatoria, apelará el próximo lunes ante el Tribunal Constitucional.
“Hoy se abre un camino que representa un antes y un después en la larga, muy larga, historia de Cataluña. Confío en que llegue a buen puerto y confío en ustedes”, aseguró Mas en una declaración institucional desde el Palacio de la Generalitat -sede del gobierno catalán- en Barcelona, luego de firmar la convocatoria.
El líder catalán destacó que “Cataluña quiere hablar, quiere ser escuchada, quiere votar. Y una vez que se haya expresado encontraremos el marco para construir un futuro mejor para todos”.
“A partir de la firma del decreto, el gobierno (catalán) hará todo lo posible para que los catalanes puedan votar”, aseguró. “Queremos votar, queremos decidir, y ahora tenemos el marco legal y es el momento adecuado para hacerlo”, insistió.
Mas destacó que Cataluña llegó a la instancia de convocar su referéndum gracias a cuatro claves: las movilizaciones sociales, el consenso entre las fuerzas políticas catalanas, el diálogo y el respeto al marco legal.
“Nadie podrá negar que hemos tendido la mano al diálogo. Hemos estado y estamos abiertos para hacer posible la consulta, pero no vamos a caer en la trampa del inmovilismo”, aseguró, para luego comparar la actitud de bloqueo y negativa de Mariano Rajoy con la postura democrática del primer ministro británico, David Cameron, quien acordó con Escocia la celebración del reciente referéndum que rechazó la independencia.
Asimismo, Mas recordó que firmó el decreto para que «los catalanes y catalanas puedan opinar” al amparo de una «ley constitucional» que pidió que sea «respetada».
Mas firmó el decreto de la convocatoria esta mañana en un acto solemne del que participaron miembros de su gobierno y los partidos que apoyan el referéndum soberanista, tras entrar en vigor hoy mismo la ley de consultas aprobada por el parlamento catalán el 19 de septiembre.
Luego de plasmar su firma en el documento y pronunciar su mensaje institucional, el presidente catalán salió a las puertas del Palacio de la Generalitat junto al líder independentista Oriol Junqueras, donde un millar de manifestantes independentistas les dieron su respaldo al grito de «Ni un paso atrás» e «Inde-inde- independencia».
El decreto que convoca a la consulta asegura que el objetivo de la misma es llamar a los catalanes a las urnas para conocer «su opinión sobre el futuro político de Cataluña».
Los catalanes deberán responder a una pregunta y otra sucesiva. Primero: «¿Quiere que Cataluña se convierta en un Estado?». Sólo en caso afirmativo tendrán que pronunciarse sobre la siguiente: «¿Quiere que ese Estado sea independiente?».
El texto detalla que podrán votar todos los catalanes mayores de 16 años y los ciudadanos de la Unión Europea que lleven al menos un año en el país, así como los extranjeros de terceros países que acrediten tres años de residencia. A diferencia de Escocia, también podrán votar los catalanes residentes en el exterior, pero deberán expresar su voluntad de hacerlo.
Asimismo, se establecen dos modalidades de voto, una presencial, que tendrá lugar el 9 de noviembre, y otra anticipada por depósito, que se llevará a cabo entre el 20 y 25 de octubre.
El gobierno catalán invitó a organizaciones sociales locales e internacionales a participar en la observación de la consulta.
Antes de que Mas firmara la convocatoria y concretara su desafío, el presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, aseguró desde China que el presidente catalán «se ha metido en un lío. Supongo que pensaba que íbamos a recular», dijo Rajoy en una conversación informal con periodistas españoles que lo acompañaban en su visita a la Gran Muralla china, justo antes de partir de regreso a España y luego de reiterar que su gobierno se reunirá el lunes para recurrir ante el Constitucional la ley de consultas y el decreto de convocatoria.
Desde Barcelona, la líder de su Partido Popular (PP) en Cataluña, Alicia Sánchez Camacho, insistió en que «el decreto del referéndum firmado por Artur Mas no tiene garantías democráticas ni en Cataluña, ni en España, ni en el ámbito internacional».
«El gobierno de España va a garantizar la estabilidad de nuestra democracia y dará respuesta a todos los intentos de los que quieren saltar la ley», afirmó la dirigente conservadora, quien reiteró que el futuro de la soberanía nacional la deciden todos los españoles y no Artur Mas convocando un referéndum inconstitucional».
Camacho advirtió a Mas que no logrará su cometido de utilizar el proceso independentista para «tapar la corrupción» de su padre político y referente del nacionalismo catalán Jordi Pujol, un caso que, según la dirigente del PP, salpica a su partido Convergencia i Unió (CiU).
Por su parte, el líder de los socialistas catalanes, Miquel Iceta, aseguró que la consulta convocada por Mas «no tiene amparo en la ley de consultas catalana, ni en la constitución», y, por lo tanto, es una equivocación.
El rechazo del gobierno central al referéndum por la vía legal cuenta con el respaldo del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), aunque su líder, Pedro Sánchez, pide a Rajoy dar una solución al conflicto de Cataluña a través de una reforma de la Constitución para avanzar hacia un modelo federal.
En tanto, Mas llega a este hito de la historia de Cataluña de la mano del líder independentista Oriol Junqueras, cuyo apoyo ha sido fundamental, y quien ante la eventual suspensión de la consulta por parte del Tribunal Constitucional es partidario de la desobediencia civil. «Todos los demócratas del mundo harán posible la consulta de autodeterminación», dijo hoy Junqueras.