El «colchón» que tiene Brasil
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, aseguró que el país sudamericano tiene un "colchón" de reservas internacionales que le permite enfrentar las turbulencias financieras que provocan los aranceles a las importaciones de Estados Unidos.
10/04/2025 EL MUNDOEl presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, aseguró que el país sudamericano tiene un «colchón» de reservas internacionales que le permite enfrentar las turbulencias financieras que provocan los aranceles a las importaciones de Estados Unidos. «En mis dos primeros mandatos (2003-2010) hicimos una acumulación de reservas internacionales que puede enfrentar cualquier crisis, incluso cuando el presidente Trump diga lo que quiera», aseguró el mandatario durante un acto en la ciudad de Cajamar, en el estado de Sao Paulo. «Brasil está seguro porque tenemos un colchón de 350.000 millones de dólares que nos dan cierta tranquilidad», reafirmó.
Lula da Silva dijo que en 2003, cuando asumió por primera vez, Brasil, la principal economía de América Latina, tenía problemas de endeudamiento y que logró ajustar las cuentas pagando 30.000 millones de deuda al Fondo Monetario Internacional (FMI) para dejar de depender de las orientaciones del organismo internacional.
«Brasil tenía problemas para crecer y en esos años pagamos al FMI y logramos crecer e hicimos reservas internacionales que siguen hasta hoy», explicó el mandatario de Brasil. La nación sudamericana recibió 10% de aranceles para todos sus productos que ingresen en Estados Unidos, luego de ser afectado, además, por el aumento de tarifas en las ventas al país norteamericano de acero y aluminio.
Esta semana, técnicos del Ministerio de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior debían reunirse en Washington con representantes estadounidenses de comercio para discutir el nuevo cuadro tarifario. La Argentina, por su parte, recibió un trato arancelario similar, aunque sufre, a diferencia del país vecino, una situación de reservas internacionales que se encuentran en un nivel negativo, lo cual deja a la economía local en una situación de enorme vulnerabilidad ante shocks externos, como el actual.