Neuquén tiene una de las rutas más lindas del país, ¿cuál es?

Con solo 107 kilómetros, esta ruta neuquina lo tiene todo: naturaleza virgen, aventuras y vistas que parecen sacadas de una postal.

Con solo 107 kilómetros, esta ruta neuquina lo tiene todo: naturaleza virgen, aventuras y vistas que parecen sacadas de una postal.

Argentina tiene un sinfín de paisajes diversos que vale la pena visitar y una de las mejores formas de recorrerlos es en auto. Entre las rutas más espectaculares del país, hay una que se encuentra en Neuquén y que ha logrado posicionarse entre las más lindas por su belleza escénica, su entorno natural y su versatilidad para disfrutarla a lo largo de todo el año.

Con solo 107 kilómetros, esta ruta neuquina lo tiene todo: naturaleza virgen, aventuras y vistas que parecen sacadas de una postal.

Se trata del Camino de los Siete Lagos, una joya patagónica que une San Martín de los Andes con Villa La Angostura a través de la mítica Ruta Nacional 40. Son 107 kilómetros que atraviesan dos Parques Nacionales —Lanín y Nahuel Huapi— y que ofrecen una experiencia visual y emocional inigualable.

Durante el recorrido, los viajeros se topan con bosques milenarios, cerros imponentes y, por supuesto, con los siete lagos que dan nombre al camino: Lácar, Machónico, Falkner, Villarino, Escondido, Espejo Chico y Espejo Grande. Cada uno tiene su encanto particular y muchos ofrecen áreas de descanso, playas para tomar sol o bañarse, y zonas de camping para quienes deseen prolongar la estadía.

Uno de los puntos más impactantes es el Lago Espejo, cuyo nombre se debe al reflejo perfecto de las montañas en sus aguas calmas. Ver la luna elevarse sobre su superficie espejada es una postal que difícilmente se olvida. Además, hay varios campings organizados en la zona que permiten pasar la noche al aire libre con todas las comodidades necesarias.

Este camino se puede hacer en un día, pero lo recomendable es tomarse al menos un par para disfrutarlo sin apuros. Muchos turistas optan por acampar, hacer senderismo o actividades acuáticas como kayak y pesca, lo que convierte el paseo en una experiencia completa de conexión con la naturaleza.

Otras rutas que enamoran
Aunque el Camino de los Siete Lagos se lleva los aplausos en la Patagonia norte, no es la única ruta argentina que merece ser recorrida con calma y los ojos bien abiertos.

En el norte del país, la Cuesta del Obispo, en Salta, ofrece un recorrido zigzagueante entre nubes, montañas y cardones. El camino conecta la ciudad de Salta con Payogasta, cruzando el Parque Nacional Los Cardones, uno de los paisajes más característicos del norte argentino. Este tramo de la Ruta Provincial N° 33, de apenas 20 kilómetros, es tan empinado como fascinante y alcanza su punto más alto en la Piedra del Molino, a 3.348 metros sobre el nivel del mar.

Más al oeste, en Mendoza, el Cañón del Atuel es una explosión de formas y colores. Desde San Rafael, el recorrido en auto permite explorar el Dique El Nihuil y el Embalse Los Reyunos, donde es posible realizar actividades como kayak, pesca, rafting y trekking. Las formaciones rocosas esculpidas por el viento y el agua hacen que cada curva del camino ofrezca una nueva postal.

Hacia el sur, el Parque Nacional Los Glaciares, en Santa Cruz, se encuentra a solo media hora de El Calafate. Si bien es un trayecto corto, el destino final lo convierte en uno de los más impactantes: el Glaciar Perito Moreno, una de las maravillas naturales del planeta. Desde los miradores, el espectáculo de los bloques de hielo desprendiéndose y cayendo al agua es hipnótico.

Y para quienes prefieren la costa, la Ruta Provincial N° 11, en la provincia de Buenos Aires, conecta algunos de los destinos más populares del Atlántico argentino. Desde Mar del Plata hasta Mar del Sur, pasando por Chapadmalal y Miramar, el recorrido combina playas, bosques y pequeñas localidades donde el turismo tranquilo y la buena pesca son protagonistas.

Fuente: La Mañana Neuquén