Las cuentas de todos
El gobierno provincial seleccionó cuidadosamente los datos de las elecciones del domingo pasado para engordar su cosecha de votos.
07/07/2025 OPINIÓNEl gobierno provincial seleccionó cuidadosamente los datos de las elecciones del domingo pasado para engordar su cosecha de votos. Eligió contar las localidades en las que se impuso para disimular el triunfo del peronismo en cantidad de sufragios y, sobre todo, ocultar las derrotas en ciudades importantes y principalmente en Rosario. A su vez, el socialismo también salió a destacar su colaboración en la performance general del Frente Unidos y eligió subrayar que el partido “amplió su representación territorial” por el triunfo de sus candidatos en cuatro ciudades y 31 comunas. Pero lo cierto es que le costó mucho omitir que por primera vez en décadas no llevó una lista propia en Rosario, la ciudad que gobernó por más de 30 años y donde todo empezó.
El gobernador Maximiliano Pullaro volvió a mostrarse como el fighter de la política que es, poniéndose al frente de la campaña en Rosario para impulsar a la candidata del intendente Pablo Javkin. Después diría que Carolina Labayru era una “desconocida total” y que gracias a él (no lo dijo así) había protagonizado “una remontada histórica” de votos en comparación a lo obtenido en las PASO de abril. En rigor, la candidata y ahora concejala electa del oficialismo no pasó de los 38 mil votos de las internas a los 95 mil de las generales; sino que sumó el 29 de junio lo que dejaron en el camino los otros candidatos de Unidos y creció unos miles de votos más.
Pero en la intimidad, el gobierno que ya había experimentado una enorme sangría de votos en la elección de convencionales donde Pullaro fue candidato; acusó el golpe y relanzó su hit de gestión: La seguridad. Sólo dos días después de las elecciones el gobernador formó a todo el funcionariado en una helada mañana en la sede de la Policía de Investigaciones, para presentar un despliegue de uniformes, armas sofisticadas y tecnología para hacer entrar en escena a la Unidad de Capturas de Alto Perfil, una célula de policías y agentes penitenciarios creada para rastrear y apresar a personas fugitivas de renombre en el crimen organizado de la provincia. «Vamos a ir a cada cueva, barrio o casa donde estén escondidos», prometió de nuevo en el tono habitual que impone en materia de seguridad pública.
No sólo eso, también dio a conocer cifras que indican una disminución del delito común en el departamento Rosario. Según dijo, el mes de junio fue el que menos denuncias de robos registró la jurisdicción desde que existen mediciones sobre tal fenómeno, en los últimos diez años. «Hubo 1.800 robos en todo el mes. Cuando comenzó nuestra gestión teníamos 8.000 robos mensuales en esta ciudad. El descenso ha sido abrupto, gracias al trabajo que llevó adelante nuestra policía de prevención. En todo el país y en muchos lugares de América Latina miran la experiencia de Santa Fe», se ufanó.
Pero la velocidad actual de las demandas sociales hacen que lo que ayer era una necesidad vital, hoy conforme un panorama normal que hace crecer nuevas demandas en una serie interminable e imposible de satisfacer a tiempo por las distintas gestiones.
Pullaro pasó del millón de votos del 2023 a los 400 mil de abril del 2025, y a los 340 mil de junio pasado. Más allá del desgaste lógico de un gobierno que consiguió todo lo que quería en el primer año de rodaje; empezaron a operar las matemáticas. El oficialismo dejó de dividir por dos en los comicios y pasó a un escenario de tercios por la aparición activa de la La Libertad Avanza. Esa nueva distribución de tercios siempre beneficia al peronismo. “Por eso a nosotros no nos va bien en los ballotage”, grafica el diputado nacional Germán Martínez, convencido de que el mismo día que nació el peronismo, “también nació el antiperonismo”.
Y la nueva polarización nacional deja a Unidos recorriendo la angosta avenida del medio, con un discurso que intenta lanzar mandobles hacia el kirchnerismo y golpes más suaves contra los libertarios con los que comparten todavía una porción de electorado. Un terreno resbaladizo a la hora de afirmar una identidad política.
La organización vence al tiempo
El triunfo de Juan Monteverde en Rosario se proyectó a nivel nacional. Sobre todo porque impidió un festejo de Javier Milei que era lo que más se temía. Es más, con el diario del lunes, casi todos están convencidos de que la figura presidencial frenó más que impulsó al candidato Juan Pedro Aleart que mide más que la marca libertaria.
El conductor televisivo hizo una gran elección pero sabe a derrota porque el único resultado posible era el triunfo, repetir la conquista de las elecciones de convencionales en las que Aleart se impuso en el departamento Rosario y Milei sí festejó.
Pero la presencia de un candidato con el discurso libertario calcado hasta en el más mínimo detalle de la crueldad política; terminó por favorecer a Monteverde y la alianza con el sector oficial del PJ en detrimento de los otros postulantes peronistas que, a pesar de todo, se llevaron 10 de los 40 puntos que el peronismo cosechó en las elecciones del domingo. Eso supone que subsiste una resistencia interna a las decisiones tomadas por la conducción partidaria que vio en Ciudad Futura y en Monteverde el vehículo más adecuado para la competencia, pero que no pudo transportar a todos.
Son las secuelas del armado de listas para convencionales constituyentes de las que el gobernador Pullaro sustrajo las primarias abiertas para complicar al peronismo. Y es también el escenario de cara los comicios nacionales de octubre donde se estrenará calendario sin PASO.
Por eso esta semana el intendente de Funes, Rolly Santacroce, le mandó una carta al presidente del PJ Guillermo Cornaglia para que “informe públicamente” cuál será el mecanismo para seleccionar a los candidatos a diputados nacionales. “Sin las PASO el PJ tiene la obligación de garantizar la participación de la militancia. Presentamos formalmente un pedido para que haya internas abiertas, con reglas claras y transparencia. El peronismo se hace grande con democracia interna”, dijo el intendente de Funes en su cuenta de la red social X. Cerca del mandatario funense dijeron que la nota enviada por Santacroce es la “suma de intendentes y presidentes comunales que acompañan el planteo”, aunque no brindaron nombres.
El triunfo de Monteverde renueva posibilidades para los socios directos de Ciudad Futura en el PJ, es decir, el Movimiento Evita. En ese marco crecen las acciones del diputado nacional Eduardo Toniolli que pretende renovar su banca a partir de diciembre y hace más difícil el camino para Agustín Rossi que fue el primero de los lanzados para las elecciones de octubre. El propio Santacroce y el perottista Roberto Mirabella, son los otros que empezaron a mostrar sus movimientos.
Por Leo Ricciardino