Centenario duplicará su territorio
10/10/2014 MUNICIPIOSAsí lo marca un estudio que planifica el crecimiento a 10 años.
El fenómeno Vaca Muerta podría extender en más de un 50 por ciento el territorio para urbanizar esta ciudad en los próximos diez años, según un estudio que lleva adelante un foro que elabora la propuesta estratégica “100×100 Centenario”.
Los datos no implican que aumente la población en forma exponencial, sino que la ciudad podrá soportar la expansión urbana hacia la segunda meseta sin complicaciones, siempre y cuando se estudien varios ejes relacionados con los servicios, el transporte y la calidad de vida.
Ayer, en la Casa de la Cultura, se realizó la segunda jornada del foro donde participó el Consejo Federal de Inversiones (CFI), el Copade, entidades intermedias, el gobierno provincial y representantes del Municipio local. Durante la charla, saltaron varios ejes a discutir sobre la identidad histórica de la ciudad ligada a la construcción de la fruticultura y el repentino cambio de matriz productiva hacia la actividad petrolera y el derrame de servicios que derivan de esa actividad.
“Me queda la sensación de que somos el equipo que le está transmitiendo a la gente del territorio parte de los fenómenos que están ocurriendo, y que somos los que, de alguna manera, estamos haciendo los análisis de viabilidad y cosas a las que hay que tenerles cuidados y amenazas”, explicó a LM Neuquén el arquitecto Marcelo Lorelli, coordinador del foro y profesor de la cátedra Explora de la Universidad de Buenos Aires.
La discusión de la convivencia entre lo urbano y lo rural es compleja y tiene años en esta ciudad. Ha tenido luchas y enfrentamientos ente productores y funcionarios. Sin embargo, hoy el escenario cambió desde la irrupción de los hidrocarburos no convencionales y las posibilidades de desarrollo en las ciudades de los alrededores.
El equipo hizo un estudio aéreo sobre las zonas del Casco Viejo, los barrios Sarmiento y Sayhueque I y II, y el polígono de la segunda meseta. Además, analizó variables como el sistema de transporte, accesos, seguridad, cultura, servicios y todo lo referido a la huella urbana de la ciudad.
La mayoría de los participantes se mostraron preocupados por la presión inmobiliaria, el aumento de los precios y el desequilibrio que produce la industria petrolera en los otros rubros económicos de la localidad.