El embargo económico contra Cuba vuelve a la agenda política yanqui
23/10/2014 EL MUNDO
A pocos días de las legislativas, presionan a Obama para que relaje las tensas relaciones entre Washington y La Habana. La prensa adopta posiciones enfrentadas sobre la política de la Casa Blanca para la isla.
¿Es hora de levantar el embargo a Cuba? ¿Podría ser ésta una de las grandes medidas del presidente Barack Obama en sus últimos dos años de mandato? El tema reapareció en estos días como argumento político en Estados Unidos, donde crecen aparentemente las posiciones a favor de relajar la tensa relación con el único gobierno comunista del hemisferio occidental, un viejo enemigo ideológico de Washington. A pocos días de las elecciones al Capitolio, el 4 de noviembre, el embargo, que lleva vigente más de 50 años, está en la agenda de Washington y de Miami, principal refugio del exilio cubano.
Un editorial del influyente diario The New York Times volvió a encender el debate el 12 de octubre al pedir, también en español, al presidente Barack Obama que «reflexione seriamente» sobre Cuba para «reanudar relaciones diplomáticas» con ese país y «acabar con un embargo insensato». Esos mismos días se presentaba tanto en Washington como en La Habana el libro «Back Channel to Cuba», en el que Peter Kornbluh y William M. LeoGrande aseguran que pese a las malas relaciones entre ambos países, el gobierno de Cuba hizo gestos de acercamiento a casi todos los presidentes de Estados Unidos en las últimas décadas. El libro explica las conversaciones informales y secretas que han utilizado La Habana y Washington para mantener contacto a pesar de más de medio siglo de hostilidades. «Creo que los obstáculos políticos domésticos son menores hoy en Estados Unidos de lo que han sido en mucho tiempo», estimó LeoGrande.
El investigador apuntó a los cambios en la comunidad del exilio en Florida, donde los más jóvenes se oponen cada vez más al embargo. El electorado de origen cubano en Florida, un Estado que puede ser clave en las presidenciales, apoyaba en el pasado tradicionalmente posiciones duras frente al gobierno de los Castro. En febrero, una encuesta del Atlantic Council dio como resultado que la mayoría de los estadounidenses está a favor de cambiar la política hacia Cuba. En junio, otro sondeo de la Florida International University (FIU) afirmó que hay una ligera mayoría de cubano-estadounidenses en el condado de Miami-Dade que se opone al embargo de más de medio siglo.
Lo comentó Fidel. Dos días después del editorial del Times, el ex presidente cubano Fidel Castro lo comentó y reprodujo casi íntegro en la prensa cubana. En un texto raro de ver en el órgano oficial del Partido Comunista, el Granma, el veterano líder cubano citaba incluso varias de las críticas que el diario hacía contra el gobierno de la isla.
Este martes, The Washington Post replicó con un editorial titulado «Cuba no debería ser recompensada por negar la libertad a su pueblo». El prestigioso diario de la capital estadounidense citaba las acusaciones por la muerte del disidente Oswaldo Payá en un accidente vial en julio de 2012 y la detención del cooperante estadounidense Alan Gross. «El embargo se ha relajado sustancialmente en los últimos años», afirmó en referencia a que el gobierno de Obama ya retiró en 2009 y 2011 restricciones a viajes y al envío de remesas. «Levantar completamente el embargo ahora recompensaría y ratificaría su intransingencia (de los hermanos Castro)», opinó el diario.
Las posiciones enfrentadas del Post contra el Times resumen bien los argumentos a favor y en contra del embargo económico y comercial que Washington impuso tras el triunfo de la revolución de 1959 y la posterior expropiación de empresas estadounidenses. Estados Unidos y Cuba rompieron sus relaciones diplomáticas en 1961 y Washington empezó a aplicar el embargo económico contra la isla un año después, en 1962.
Rechazo de la ONU. La próxima semana, la Asamblea General de la ONU volverá previsiblemente a rechazarlo con el apoyo de una abrumadora mayoría de países en su votación anual. ¿Por qué resurge el asunto ahora? «Es parte de un movimiento político de diferentes sectores que se viene viendo desde principios de año», afirmó Jorge Duany, director del Cuban Research Institute de la FIU, de Miami.
Duany se refirió entre otras cosas a la publicación del libro de Hillary Clinton, ex secretaria de Estado y posible candidata demócrata las presidenciales de 2016. En sus memorias, asegura que el embargo sólo le ha dado a los Castro una excusa para no hacer reformas democráticas y «alguien a quien culpar de los problemas económicos de Cuba». «El tema está ocupando más espacio porque en sus dos últimos años de mandato, el presidente (Barack) Obama tendrá una oportunidad especial para introducir cambios sustanciales a la política del embargo eliminando irracionalidades como la presencia de Cuba en la lista de naciones patrocinadoras del terrorismo», explicó Arturo López-Levy, politólogo cubano-estadounidense de la universidad de Denver.
Obama encara sus dos últimos años de mandato con la esperanza de no perder la mayoría del Senado el 4 de noviembre y con muchas tareas pendientes, incluida de la Cuba, una de sus promesas cuando entró al Despacho Oval en 2008. López-Levy citó como claves para dar un giro a la política de Washington las reformas económicas de la isla y el cambio de mando en Cuba en 2018, cuando Raúl Castro deje el poder. En el horizonte cercano asoma la Cumbre de las Américas en Panamá en abril de 2015. Ante la posible invitación al gobierno de Raúl Castro, habría que ver si Estados Unidos asiste o no. Podría ser la primera vez que Washington y La Habana se sienten en una mesa en una cumbre regional.
La Duma pidió el levantamientio
La Duma estatal (Cámara baja del Parlamento ruso) respaldó por unanimidad una resolución que reclama el cese del bloqueo de más de medio siglo por Estados Unidos contra Cuba. Expresión de la coincidencia de las cuatro fuerzas políticas representadas en el órgano legislativo moscovita en que esa represalia contra 11 millones de personas de la isla debe finalizar fueron los 447 votos a favor de todos los legisladores presentes en el plenario. Según el vicepresidente primero de esa instancia, Iván Melnikov, las resoluciones adoptadas por la Duma en reclamo del cese del bloqueo suman cada vez más partidarios sin distinción política.