Israel fijó para el 17 de marzo la celebración de elecciones anticipadas
04/12/2014 EL MUNDO
Israel celebrará elecciones parlamentarias anticipadas el próximo 17 de marzo, según acordaron ayer los jefes de los distintos grupos parlamentarios con el presidente de la Cámara, Yuli Edelstein. El Parlamento (Knesset) votó su disolución con el respaldo de 84 diputados y una abstención. El premier Benjamin Netanyahu anunció el martes la convocatoria de elecciones anticipadas después de romper con dos de sus principales socios de gobierno, el ministro de Financias, Yair Lapid, y la ministra de Justicia, Tzipi Livni, a quienes destituyó. La coalición de centroderecha encabezada por Netanyahu estaba compuesta por cinco partidos, entre ellos el Partido del Futuro (Yesh Atid) de Lapid y El Movimiento (Hatnua), liderado por Livni. Entre estos partidos y el Likud de Netanyahu había fuertes discrepancias.
Uno de los detonantes de la crisis que desembocó en la ruptura es la disputa en torno al proyecto de ley que consagraría el carácter judío del país y que rechazan los partidos de Lapid y Livni. Ambos ministros se opusieron también recientemente a los planes presupuestarios del jefe de gobierno.
El jefe de gobierno acusó a Lapid y Livni de haber actuado en contra del gobierno e incluso de haber intentado alcanzar un acuerdo a sus espaldas con partidos ultraortodoxos de la oposición. Además la acusó de haberse reunido en mayo, en contra de sus instrucciones, con el presidente palestino Mahmud Abbas, tras la ruptura de las negociaciones de paz en abril. A Lapid le reprochó haberse manifestado en contra de la construcción de asentamientos en Jerusalén este.
Por el momento no está claro si Netanyahu conseguirá formar gobierno tras las elecciones de marzo, ya que su valoración cayó mucho en las últimas encuestas.
Reconstrucción de Gaza
El primer proyecto para remover toneladas de escombros en Gaza tras la reciente guerra con Israel comenzó ayer, un paso importante para reconstruir el devastado territorio. Suecia, a través de la ONU, contribuyó con u$s3,2 millones para el plan y las autoridades palestinas calculan que en un año podrán despejar 140.000 toneladas de escombros. Cien mil edificios o estructuras quedaron dañados por el conflicto.