Radicales del Este Mendocino también desdoblan
El trío desdoblador, Abed, Pinto y Mansur con el precandidato a gobernador, Alfredo Cornejo.
Las comunas que conducen Abed (Junín), Mansur (Rivadavia) y Pinto (La Paz) confirmaron que harán sus elecciones municipales separadas del cronograma provincial y nacional. Será en coincidencia con las PASO del bloque del PJ: el 12 de abril y el 14 de junio.
Sobre la hora, se decidieron. Ayer, los tres departamentos radicales del Este, La Paz, Junín y Rivadavia, se subieron al movimiento desdoblador y dijeron que sí van a separar sus elecciones de las fechas nacionales.
Más allá de las vueltas, en el partido ponderaron la definición y la sumaron como estrategia a la judicialización que lleva adelante la UCR contra el Ejecutivo por el decreto de las PASO (suspende la financiación de las campañas electorales).
Con la decisión tomada y el decreto firmado, quienes vivan en estas comunas del Este pasarán por el cuartos oscuro el 12 de abril (PASO) para elegir a los precandidatos a intendentes y concejales que competirán definitivamente el 14 de junio (generales).
Las fechas fueron elegidas en coincidencia a lo que ya habían establecido los departamentos justicialistas que desdoblaron. En este sentido, ayer también se decidieron casi todos los que faltaban por confirmar.
De las cinco intendencias que tiene la UCR, sólo quedará casi en soledad Godoy Cruz, departamento que irá unificado con la elección provincial.
Según daban cuenta ayer en el partido, el departamento comandado por Alfredo Cornejo no se despegará del calendario que fije el gobernador Francisco Pérez. Esto habida cuenta de las intenciones del intendente de ser candidato a gobernador.
Pero fuera de este caso, el resto desdobla. El iniciador fue Capital, histórico departamento radical. El intendente interino, Rodolfo Suárez, primereó tanto en la provincia como en el país y agendó las PASO para el 22 de febrero y las generales para el 3 de mayo. A esta decisión se sumaron ahora La Paz, Junín y Rivadavia pero en las fechas que habían fijado el bloque desdoblador del PJ.
La noticia se conoció sobre el plazo que marcan los 90 días previos para hacer el llamado a elecciones (el lunes es el último día) y luego de varias idas y vueltas.
Y es que los tres territoriales ya habían dejado en claro desde un primer momento su intención de separarse de los comicios provinciales y nacionales, intención que se conocía desde mediados de diciembre. Pero las definiciones se hicieron esperar durante todos estos días y los intendentes optaron en la mayoría de las ocasiones por el silencio.
Hasta el miércoles, en el partido nadie sabía decir qué harían Ricardo Mansur (Rivadavia), Gustavo Pinto (La Paz) y Mario Abed (Junín). “No es tan fácil, son decisiones que se meditan mucho”, justificaban desde una de las intendencias, mientras que el presidente de la UCR, Sergio Pinto, vinculó las especulaciones de último momento a la decisión que tomarían los justicialistas.
“Ellos tenían en claro que esto le permitía transparentar la elección departamental y despegarla de los vaivenes del escenario nacional”, justificó Pinto y apuntó a las motivaciones: “Entendemos que la estrategia del PJ es confundir al electorado en municipios donde, en principio, han sido más favorables. No queremos que se confunda el panorama si sólo el PJ llegara a ganar”.
En otras palabras, en el radicalismo, más allá de las simpatías que pueda despertar la idea o no, ahora rescatan que el desdoblamiento del Este “licuará” la probable victoria en masa del PJ en aquellos departamentos en donde los intendentes peronistas son fuertes.
A su vez, dentro de las valoraciones, en el partido ven las elecciones separadas como una posibilidad más de pelear el financiamiento de campañas publicitarias de las PASO.
Este tema es el foco de la pelea de la UCR con el justicialismo, y el decreto reglamentario de la Ley 8.619 está a punto de ser judicializado por los radicales, tal como han prometido.
En esta línea, la elecciones de La Paz, Rivadavia y Junín le agregarán un nuevo condimento a la pelea por el financiamiento. “El adelantamiento de las elecciones puede servir para la definición judicial”, admitían.
