La Intendenta de Bariloche firmó convenio con recicladores para uso de la nueva planta
Ayer por la mañana la intendenta María Eugenia Martini y la presidenta de la Asociación de Recicladores Bariloche (ARB) Zulema Morales rubricaron el nuevo acuerdo para el manejo de la nueva planta de clasificación, luego del primer mes de capacitación en la operación de la maquinaria. Entre otras medidas, el Gobierno Municipal eleva de 15 mil a 83 mil el aporte mensual a la organización, para suplir la diferencia de ingresos en esta etapa de transición, y cubrirá el seguro de los trabajadores. Se reiteró el pedido a la comunidad de que se sume a la separación en origen.
“Quiero agradecer a la Asociación por esperar tanto la planta, por esperar tanto la mejora de las condiciones de trabajo, por esperar tanto que las cosas se realicen”, expresó Martini, y señaló que este convenio “es el fruto de todo un equipo de trabajo, de mucho tiempo y mucha gente que ha acompañado a la ARB, tomando decisiones para que hoy podamos tener la planta como algo concreto, algo logrado, que se puede ver, y que mejora las condiciones de trabajo”.
Zulema Morales, presidenta de la ARB, recordó los años de lucha y espera por condiciones dignas de trabajo: “Tantos gobiernos pasaron desde el 2007, en que se empezó a hacer todo el proyecto de la planta de clasificación, y pasaban los gobiernos y siempre eran 18 meses, siempre esperamos y nunca llegó la planta, nunca llegó el sitio de disposición final”. Y añadió que luego “llegó Maru con su gobierno, y gracias a Dios ella nos conocía, conocía nuestro trabajo y se puso en campaña con el Concejo Deliberante, para hacer la expropiación de las tierras, avanzar con el fondo del BID, construir la planta de reciclaje y que hoy podamos firmar este convenio, pudiendo dar un aporte para los sueldos de la gente para que puedan dignificar más su vida, su familia”.
“Creo que hoy por hoy está a la vista todo lo que nosotros hemos logrado y estamos cosechando —sostuvo Morales—, y esto nos da un poco más de confianza para poder seguir adelante, para poder seguir luchando por más, así que te agradezco Maru de corazón todas las cosas que han hecho y hay que seguir trabajando”. E hizo un agradecimiento especial a todos los integrantes de la ARB, “a todos mis compañeros que fueron siempre los que me impulsaron a seguir adelante para defender los derechos del trabajo, también por haber formado esta nueva fuente de trabajo de la ciudad; en el 2001 en la crisis económica que pasamos tuvimos que llegar a la basura a comer, y desde llegar a la basura a comer pudimos formar una fuente de trabajo”.
Con la presencia de muchos de los integrantes de la ARB, el presidente del Concejo Municipal Ramón Chiocconi e integrantes del gabinete y de la Mesa de Gestión de Residuos Sólidos Urbanos, Martini y Morales firmaron el nuevo convenio, que actualiza derechos y obligaciones de ambas partes en el marco de la vinculación colaborativa entre el Municipio y la Asociación, y regula el manejo del Centro Ambiental Municipal. Las cláusulas del acuerdo se elaboraron a lo largo del primer mes de operación de la planta, en función de que el nuevo convenio se ajuste a la nueva práctica.
Tanto la jefa comunal como la presidenta de la Asociación resaltaron el compromiso de los integrantes de la Mesa de Gestión de Residuos Sólidos Urbanos, de la Subsecretaría de Medio Ambiente, a cargo de Susana Moyano, y de la Secretaría de Desarrollo Económico y su titular Fernando Del Campo, en la asistencia para la organización económica de la ARB.
El texto del convenio firmado esta mañana establece que la ARB es la única organización autorizada para la selección, clasificación, acopio y comercialización de todo material reciclable, y que para el manejo de la planta de clasificación debe adecuarse a las directivas técnicas y operativas que defina el Municipio. Dentro de los próximos 60 días, se elaborará un reglamento interno, en el marco de la Mesa de Gestión, que está compuesta por la Asociación, el Ejecutivo, el Concejo, el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación y otras instituciones vinculadas a la temática.
Asimismo, el Municipio se hará cargo del control de ingreso, ordenamiento, traslado de material de rechazo y del mantenimiento de la planta, además de la planta de compostaje y del chipiado. Y cubrirá el pago de los seguros de responsabilidad civil y de accidentes personales de los trabajadores de la ARB.
La intendenta Martini explicó que además, en virtud del impacto en los ingresos que el cambio de la metodología de trabajo tiene en la organización, el Gobierno Municipal otorgará a la ARB, durante los siete meses de vigencia del convenio —que se aplica retroactivamente desde el 1º de julio— , un aporte de 83.600 pesos, que surgen de la diferencia entre el ingreso promedio del último año y el mes más bajo. “El objetivo es suplir las diferencias económicas que surgen de lo que se ganaba antes y de lo que todavía aún hoy, en función de este proceso de transición, no se tiene”, apuntó la jefa comunal. En función de cómo se desarrolle la actividad durante estos siete meses, se diseñará el próximo convenio.
Otro de los temas clave para la mejora de los ingresos de la ARB es la separación en origen de los residuos en cada casa y comercio. “Para que la planta opere aprovechando toda su capacidad de reciclaje y que sean mayores los ingresos de cada uno de los recicladores, es fundamental que cada uno de nosotros en su casa separe en origen”, indicó Martini, y adelantó que desde la Mesa de Gestión de Residuos Sólidos Urbanos se avanza en el texto de una ordenanza que establezca la obligatoriedad de la separación de residuos, optimizando también las rutas de recolección diferenciada.
De hecho, la subsecretaria de Medio Ambiente municipal, Susana Moyano, explicó que “la disminución en el volumen de recuperado se da fundamentalmente por la falta de clasificación en origen, lo que hace que sea demasiado el material de rechazo que ingresa a la cinta, por lo tanto para los recicladores es menor el volumen de lo que pueden llegar a recolectar”. Al Vertedero ingresan aproximadamente 100 toneladas de residuos por día, y en promedio cada habitante de la ciudad genera 900 gramos de residuos diarios. “Por eso surge la importancia de poder hacer la separación en origen, para que cuando entren los residuos a la planta sea más fácil y dinámica la clasificación y mayor el volumen de recuperación”, concluyó Martini.
