En el Conurbano, varios liderazgos amenazados
24/10/2015 POLÍTICA
Hugo Curto, intendente de Tres de Febrero. En Malvinas, Cariglino quedó comprometido. El jefe comunal de Hurlingham, Luis Acuña
Intendentes de los “históricos” del Gran Buenos Aires pelearán por no entregar el poder tras el revés en las PASO
Las elecciones del domingo podrían derivar en una modificación del mapa político del Conurbano bonaerense, donde varios liderazgos históricos quedaron seriamente amenazados ante el surgimiento de nuevas figuras con chances de quedarse con intendencias.
En efecto, las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) del pasado 9 de agosto dejaron planteado un escenario complejo para la continuidad en el poder de varios de los denominados “caciques” del Conurbano, jaqueados por la buena perfomance de candidatos opositores.
El fenómeno también se presenta en el interior bonaerense, pero tiene en el Gran Buenos Aires algunos de sus mayores exponentes.
En rigor, el recambio tuvo su primer capítulo en las Primarias de agosto. Las internas del Frente para la Victoria dejaron sin posibilidad de reelección a varios históricos que perdieron en la compulsa.
Raúl Othacehé fue derrotado en la pelea interna de su distrito, Merlo, igual que Mariano West, de Moreno, y Darío Giustozzi (Almirante Brown). Los tres quedaron fuera de la carrera por la reelección.
Pero más allá de haber pasado el “filtro” de las Primarias, un grupo de intendentes del Frente para la Victoria y del Frente Renovador quedaron seriamente comprometidos en sus chances de seguir al frente de sus distritos.
En la lista hay algunos nombres destacados. Uno de los “históricos” amenazados es el intendente de Tres de Febrero, Hugo Curto, quien comanda ese distrito del oeste del Gran Buenos Aires desde 1991.
Curto no tuvo oposición interna en las PASO, pero su perfomance en las urnas en agosto lo dejó opacado ante la excelente elección del candidato de Cambiemos, el periodista e historiador Diego Valenzuela.
Curto obtuvo en las PASO el 32,34 por ciento contra el 30,23 por ciento del postulante de Cambiemos, quien quedó de esa manera muy bien posicionado para destronar al histórico “cacique”.
Otro de los casos resonantes es el de Luis Acuña, intendente de Hurlingham desde 2001. El jefe comunal alineado en el Frente Renovador massista obtuvo un porcentaje mucho menor de votos en las PASO que el postulante del Frente para la Victoria en el distrito, Juan Zabaleta, quien lo derrotó con el 40 contra el 22 por ciento de los votos.
En Malvinas Argentinas, el intendente Jesús Cariglino quedó también seriamente amenazado ante la buena perfomance del candidato del Frente para la Victoria, Leo Nardini. De perder Cariglino, se acabaría un liderazgo que comenzó en 1995.
PELEAS PALMO A PALMO
En tanto, lo comicios del domingo serán escenario de peleas “palmo a palmo” en otros distritos de peso del Conurbano bonaerense. En Morón, los sondeos marcan una paridad en la intención de votos de Hernán Sabbatella, hermano de Martín, candidato a vicegobernador y postulante de Nuevo Encuentro, y su rival de Cambiemos, Ramiro Tagliaferro, esposo de María Eugenia Vidal.
En tanto, otro distrito con “final abierto” en la pelea por el control de la intendencia es Lanús. Allí, el actual intendente, Darío Díaz Pérez, dejó el camino despejado al renunciar a la reelección para integrar la lista de candidatos a legisladores.
El FpV, en ese marco, impulsó la postulación del camporista Julián Alvarez, actual subsecretario de Justicia. En las PASO, Alvarez obtuvo una diferencia mínima con respecto al postulante de Cambiemos, el ministro de Hacienda porteño Néstor Grindetti.
Finalmente, en Quilmes también se presentará una pelea que podría deparar sorpresas entre el intendente kirchnerista Francisco “Barba” Gutiérrez y Martiniano Molina, de Cambiemos.