Río Gallegos: Ingresan 65 millones y la partida salarial llega a 100
Contraponiendo el “ordenamiento” que según enfatizó Pablo Grasso dejó en el Municipio, Roberto Giubetich aseguró que el estado económico y financiero de la Comuna es “crítico”. La partida salarial (incluyendo las retenciones y aportes) asciende a cien millones de pesos y a la Comuna le ingresan por todo concepto un promedio de 65 millones mensuales. “No queda nada para funcionamiento”. Se deben aportes, retenciones y la ART.
El jueves fue un día de fiesta para Roberto Giubetich, más allá de que sabía que le esperaba una dura realidad dentro de la Comuna. Pero el viernes, cuando desde temprano ocupó su despacho, las incesantes llamadas por deudas, hallazgos de expedientes y compromisos a cubrir dejó rápidamente la alegría del jueves para dar paso a una profunda preocupación.
Ese mismo día el jefe comunal habló por teléfono con Alicia Kirchner y la puso al tanto de lo que estaba encontrando. Quedaron en encontrarse esta semana, ya que la gobernadora estaba a punto de partir hacia Buenos Aires a la reunión que tuvo con el presidente Mauricio Macri.
El sábado, el intendente convocó a su Gabinete. Durante casi cinco horas estuvieron analizando, área por área y ya en funciones, la realidad encontrada.
Una de las prioridades, incluso dicha antes de asumir, era garantizar el pago del medio aguinaldo de diciembre y el sueldo correspondiente. “Nos encontramos con que necesitamos 100 millones de pesos para salarios y sólo ingresan 65 millones”, eso sin contar el medio aguinaldo.
Es que si bien es cierto que lo requerido para depositar en las respectivas cuentas sueldos y hacer frente al salario “liquido”, o sea lo que efectivamente cobra el trabajador, asciende a unos 59 millones de pesos, a esta cifra se le suman las retenciones judiciales, préstamos personales y otras obligaciones que afronta el trabajador que les son descontadas de su recibo de sueldo, como así también los aportes personales a las cajas.
“Se deben varios meses de aportes y retenciones, sólo se cumplió en parte”, ya que hay 20 millones de pesos por descuentos por planilla, indicó el jefe comunal a La Opinión Austral.
También señaló que hay deudas con la ART, por lo que los trabajadores ahora están sin cobertura ni seguro de vida.
Una de las sorpresas de su primera jornada laboral, ya oficialmente como intendente, fue la de una serie de contratos, “sin decreto”, de 83 monotributistas realizado con fecha 1 de diciembre, pero retroactivo al 1 de noviembre. “No se sabe el destino ni los fundamentos para estos ingresos” que dejó la gestión de Grasso como regalo de despedida.
También se desayunaron con que existen unos 14 vehículos y maquinarias de la flota municipal desperdigados en distintos talleres o empresas que el Municipio no puede recuperar por la deuda que se mantiene con dichos proveedores.
Una piedra, una deuda
“La menos pálida de hoy era del color de la leche”, graficaron desde el sector de Giubetich lo que se vivió en la jornada del viernes y agregaron “es que piedra que movemos, aparece una deuda nueva”. Algo que quedó retratado luego en un extenso comunicado de prensa que se difundió desde el Municipio con el resultado de la primera reunión de Gabinete.
Cabe aclarar que pese a que el Tribunal de Cuentas auditó el traspaso, esto no significa que hubiera aprobado la gestión de Grasso, y se espera que desde dicha área se actúe en consecuencia.
Uno de los anuncios importantes que hizo el intendente saliente, en el discurso de despedida cuando juró Giubetich, fue que había logrado un anticipo de fondos para que se pudiera afrontar el pago de aguinaldos, por 30 millones de pesos.
Pero la realidad es que la Comuna “debe cancelar el anticipo que le pidieron al Banco Santa Cruz para el pago de sueldos de noviembre, por 10 millones de pesos, y las retenciones por préstamos a los trabajadores, que de no ser canceladas podrían generarles inconvenientes con la entidad bancaria” indicaron desde el Municipio. Ambas obligaciones deben ser afrontadas en el día de hoy y el único dinero disponible es el de los aguinaldos. De tener que ocupar esos fondos, quedarían apenas 10 días para lograr reponerlos y que los trabajadores puedan pasar las fiestas en tranquilidad.
Así, hoy con sólo 300 mil pesos en la cuenta general se debe pagar, además de los 10 millones de pesos, las litis por 2,23 millones, 4,88 millones de préstamos personales, más otros 3,7 millones de otro tipo de retenciones hechas al personal sobre los sueldos de noviembre.
Cruda realidad
A través de un comunicado, Giubetich dijo que para saldar dichas cuentas “estamos relevando la deuda que queda pendiente en Tesorería y los compromisos asumidos que están en trámite para el reconocimiento”.
Por tal motivo, “la directiva al equipo es que sólo autorizarán el compromiso del gasto el secretario de Hacienda y el intendente. Todas las secretarías informarán en el transcurso del lunes y martes la totalidad de los expedientes que se encuentren en las distintas áreas que contemplen compromiso de recursos”.
Además detalló que “tanto la situación económica y financiera, como el estado del parque automotor, la falta de herramientas y el mal estado de las instalaciones edilicias, ponen en riesgo a todas las actividades, incluido el desarrollo de las colonias de vacaciones que teníamos pensadas para enero”.
Además está “la situación apremiante del Vaciadero Municipal, por el mal estado de las máquinas viales y el inmediato inicio de la faena en los frigoríficos, que origina una cantidad importante de residuos y por tanto se necesita iniciar una tarea especial”.
Agregó que “la falta de interés con la que se ha gestionado el área de Niñez, Adolescencia y Familia nos deja pendientes más de 2.400 expedientes, más de 80 denuncias sin respuesta y sin financiamiento, lo que nos lleva a comenzar a auditar esa dependencia”.
Finalmente, anticipó Roberto Giubetich que “el objetivo es poder informar a la ciudadanía y a los vecinos el estado real de la situación para el próximo fin de semana. Sin pesimismo, estamos llevando la organización del tradicional Paseo Aniversario sin comprometer las arcas municipales. Con el aporte y patrocinio de distintas empresas, organizaciones y comercios locales, hemos logrado cubrir todos los gastos”, concluyó.
Ayer, a través de su cuenta de Facebook, Pablo Grasso escribió lacónico: “El #Aguinaldo de los #EMPLEADOSMUNICIPALES no se toca, nos costó gestionarlo y el Estado nacional lo aportó para que puedan pasar las fiestas en paz”.
Esto generó una catarata de comentarios debajo, varios de ellos de empleados municipales advirtiendo que “si nos tocan el aguinaldo, vamos al paro”.
