Desigualdad y pobreza son las causas del abandono escolar en Latinoamérica
Aunque la educación secundaria es obligatoria en Argentina por la Ley de Educación Nacional cerca de 500.000 chicos y chicas están fuera de la escuela.
18/08/2017 EL MUNDOAunque la educación secundaria es obligatoria en Argentina por la Ley de Educación Nacional cerca de 500.000 chicos y chicas están fuera de la escuela.
Según un informe de Unicef, medio millón de jóvenes argentinos está fuera de la escuela y solo el 45% logra terminar sus estudios secundarios. En Uruguay apenas el 28,5% completó el segundo ciclo. En Brasil, finaliza el 59% mientras que en Chile lo hace el 90%. La desigualdad social, la pobreza y la falta de políticas educativas relevantes son algunos de los escollos que afrontan los más jóvenes.
El panorama en la educación secundaria argentina es desalentador, ya que, según un informe que presentó Unicef, sobre la realidad en salud, educación y derechos de los chicos y las chicas de entre 10 y 18 años-, más de la mitad de ellos no termina el secundario y uno de cada seis trabaja.
Se trata de un rango de edad que cubre 5,5 millones de jóvenes. De ellos, medio millón está fuera de la escuela y solo el 45% logra terminar sus estudios secundarios.
El informe remarca que el abandono escolar «está fuertemente relacionado con la inserción temprana en el mercado de trabajo, sobre todo entre los varones, y el embarazo entre las mujeres». El 15% de los nacimientos en Argentina son de embarazos adolescentes: seis de cada diez no son planificados y uno de cada diez mujeres abandona la secundaria por tal motivo.
Aunque la educación secundaria es obligatoria en Argentina por la Ley de Educación Nacional 26.206, de 2006, cerca de 500.000 chicos y chicas están fuera de la escuela y menos de la mitad de los adolescentes que ingresa a la secundaria logra completarla, el 45%.
La desigualdad también se manifiesta en al acceso a la protección social. Si bien la Asignación Universal por Hijo alcanzó a un millón de adolescentes entre 12 y 17 años, a partir de los 13 años los niveles de cobertura tienden a descender y esto se acentúa en la población de 16 y 17 años.
El caso de Uruguay
Desde 1973 existe la Educación Media Básica obligatoria a través de la ley 14.101. «El sistema educativo uruguayo es altamente centralizado y burocratizado, la elección de escuelas aplica para la oferta (los docentes) pero no para las familias», advierte Emiliano Pereiro, sociólogo e investigador de Ceibal (programa One Laptop per Child de Uruguay).
Aunque el porcentaje de jóvenes que culmina el ciclo sin atraso aumentó desde el 2006, en 2014, apenas un 28,5% de los jóvenes de 18 a 20 años completó el segundo ciclo de educación media. Y continúa en último lugar cuando miramos el grupo de edad de 21 a 24 a pesar de haber subido 10 puntos porcentuales.
De acuerdo al profesor y especialista Miguel Lagrotta, el Instituto Nacional de Evaluación Educativa, Ineed, revela que a los 17 años, el 96% de los adolescentes de los hogares más ricos accedía al sistema educativo. Entre los más pobres, la cifra cae al 59%. A la misma edad, la diferencia también se nota en el atraso: entre los más ricos, el 76% asiste sin rezago y entre los más pobres, lo hace el 17%. A los 18 años, la diferencia entre niveles socioeconómicos alcanza los 49 puntos.
A los 22 años, el porcentaje de graduados en la educación media superior presenta diferencias marcadas: el 71% de los jóvenes de hogares más favorecidos, mientras que solo egresa un 15% de los que pertenecen a los hogares más desfavorecidos.
Brasil, con problemas similares
El 84% de los jóvenes de 15 a 17 años asiste a la escuela, pero solo el 59% finaliza a los 19 años, de acuerdo a los datos del Anuario Brasileño de Educación Básica, producidas por Todos por la Educación.
El 99% de los niños y adolescentes de 6 a 14 años de las familias más ricas concluyeron la enseñanza primaria. El 97% de los más pobres están matriculados, pero en este estrato está la mayoría de los 430.000 niños y adolescentes de ese grupo de edad que no frecuentó ni concluyó.
Hoy, 1,7 millones de jóvenes de 15 a 17 años no están matriculados en la enseñanza media. La tasa neta de matriculación está en el 62,7%. Los modelos de enseñanza media han sido criticados por reforzar las desigualdades históricas: el 86,6% de la tasa de atención de la enseñanza media es para la población más rica.
La crisis de la enseñanza media se revela en indicadores preocupantes: el 14,6% de los jóvenes De 15 a 17 años no estudian y no concluyeron este paso.
Chile, la diferente
Según el sociólogo y especialista en jóvenes, Raúl Zarzuri, asegura que en Chile el 90% de los adolescentes culmina el secundario. Hoy en día, es el país con mayor porcentaje en este ámbito, al contrario de lo que sucede en Uruguay o Argentina , donde hay una gran deserción.
Por otro lado, Zarzuri remarca, que en casos de embarazos adolescentes hay programas para enfrentarlos para que no haya abandono escolar. Ya que la secundaria es obligatoria desde el Gobierno de Ricardo Lagos (2000- 2006).
En cuanto a la tasa de alfabetización, en Chile es del 96%, la más alta de Latinoamérica por delante de Argentina o Brasil. En 2003, se aprobó una ley que impuso la educación obligatoria hasta los 18 años, es decir, 12 años de educación obligatoria.
La mayoría de los estudiantes, el 93%, se beneficia con los vales que entrega el Estado y un 7% prefiere asistir a escuelas privadas. Este sistema de vales escolares también se usa en otros países como Dinamarca y Suecia, y se introdujo en Chile en 1981.
Casi el 100% de los niños entre 6 y 14 años realizan la educación primaria y cerca del 88% continúa durante la secundaria.