Lula confirma su primer puesto en los sondeos para las presidenciales

Lula da Silva, condenado a 9 años y medio de prisión en suspenso por corrupción, encabeza con mucha diferencia las preferencias de los brasileños para las elecciones presidenciales de 2018, según una encuesta de la empresa Ibope.

Lula da Silva, condenado a 9 años y medio de prisión en suspenso por corrupción, encabeza con mucha diferencia las preferencias de los brasileños para las elecciones presidenciales de 2018, según una encuesta de la empresa Ibope.

Lula da Silva, condenado a 9 años y medio de prisión en suspenso por corrupción, encabeza con mucha diferencia las preferencias de los brasileños para las elecciones presidenciales de 2018, según una encuesta de la empresa Ibope.

El presidente de Brasil entre 2003 y 2010 y fundador del Partido de los Trabajadores (PT), consigue un mínimo del 35 por ciento de las adhesiones en todos los posibles escenarios analizados por la encuestadora, según publica el diario O Globo.

Los guarismos le dan a Lula sacar más de 20 puntos de diferencia con el diputado derechista Jair Bolsonaro, que se ubica en el segundo lugar.

Pero el ex mandatario no consigue la mayoría absoluta (la mitad más uno de los votos) en ninguno de los escenarios analizados, y debería ir a una segunda vuelta.

Bolsonaro, perteneciente al Partido Social Cristiano (PSC), ha tomado mucha notoriedad en Brasil desde hace un tiempo debido a sus posiciones abiertamente conservadoras en temas sociales (por ejemplo, de cara a la homosexualidad) y a su defensa de las fuerzas armadas, así como del golpe de Estado de 1964.

Detrás de Lula y Bolsonaro hoy se ubican la líder ecologistas y ex ministra de Lula Marina Silva, el alcalde de la ciudad de San Pablo, Joao Doria, y el gobernador de ese estado, Gerardo Alckmin, aunque todos con cifras que los dejan muy lejos de los primeros lugares.

Uno de los «candidatos sorpresa», cuyo nombre resuena cada vez más es Luciano Huck, popular animador televisivo de la cadena Globo. En un posible escenario sin Lula, Huck llegaría a un 8 por ciento y quedaría detrás de Silva y Bolsonaro, ambos con un 15 por ciento.

Las elecciones presidenciales en Brasil se celebrarán en octubre de 2018 y definirán quién sucederá al actual presidente Michel Temer, quien asumió el 31 de agosto de 2016 en lugar de la destituida Dilma Rousseff, del PT.

La gran incógnita es la presencia de Lula. Fue condenado en primera instancia por el juez Sergio Moro en el caso «Lava Jato» a nueve años y medio de prisión. En consideración a su carácter de ex presidente, Moro le concedió la libertad. Pero si se confirma su condena en segunda instancia, Lula sería inhabilitado para ejercer cargos políticos y además iría preso. Quedaría obviamente fuera de carrera.

Fuente: La Capital Rosario