Santa Cruz: Crece la cantidad de personas que caen bajo la línea de pobreza

Hoy la Canasta Básica Total en la Patagonia está estimada en $ 21.922 para una familia tipo (matrimonio y dos hijos), casi dos veces la categoría inicial de la administración pública provincial y de algunos gremios del sector privado.

Hoy la Canasta Básica Total en la Patagonia está estimada en $ 21.922 para una familia tipo (matrimonio y dos hijos), casi dos veces la categoría inicial de la administración pública provincial y de algunos gremios del sector privado. Mientras que el piso para no caer en la Indigencia es de $ 7.857.90, más que la jubilación mínima nacional.

Llegar a fin de mes es cada vez más difícil para muchos santacruceños. La realidad económica provincial hace que los ingresos familiares no crezcan al ritmo de la inflación y se recorta la brecha con el nivel que se requiere para no ser considerado un hogar por debajo de la línea de la pobreza. Esto hace que hoy, más de 30 mil personas que están en la formalidad, ya sea con un empleo o bien ya es jubilado, no alcancen a cubrir las necesidades mínimas y estén en la pobreza.

Pese a que la inflación anual en la región patagónica fue un punto menor que el promedio nacional: 23,5%, en enero de este año pasó lo contrario: mientras que la inflación fue del 1,8% a nivel nacional, en la Patagonia fue del 2,6%.

Habiendo llegado a un “récord” en diciembre de 2016 con el 13,4% de la población bajo la línea de la pobreza, a junio de 2017 sólo el 9,6% no alcanzaba a cubrir la Canasta Básica Total (CBT). La medición de diciembre del año pasado recién se conocerá el mes próximo.

Caber recordar que el INDEC señaló que la medición de la pobreza se realiza con la metodología de cálculo que se viene utilizando desde 1992, es decir, con una valorización de la Canasta Básica Alimentaria, para medir la indigencia y otra de la Canasta Básica Total, para medir la pobreza.

El organismo indicó que desde 2016, la medición introdujo la actualización de la línea de indigencia y de pobreza en base a la composición de la Canasta Básica Total resultante de la Encuesta Nacional de Gastos de los Hogares.

Así, para Patagonia, un hogar tipo (madre, padre, hijo adolescente y otro menor) requiere ingresos totales por $ 21.922, un 23,9% mayores que los nacionales que fueron fijadas en $ 16.677,44. Ese monto es el nivel de ingresos mínimos que debe contar un hogar de manera mensual para no ser considerado pobre.

Una pareja con dos niños de 6 y 8 años necesitó a nivel nacional 6.644,40 pesos para adquirir la Canasta Básica Alimentaria, y si no llegó a esa cifra, su hogar fue considerado indigente. En la Patagonia, ese monto es aún mayor y fija el límite en $ 7.857,90.

Escenarios
Producto del congelamiento salarial a nivel provincial, más el retraso que tiene la actualización de las jubilaciones nacionales, sumado a la gente que hace changas y gana por debajo del salario mínimo, vital y móvil, nos encontramos con que cada vez es mayor el número de personas que no llega a cubrir una o las dos canastas.

Un año atrás eran 4 mil los hogares, sólo en Río Gallegos, que no tenían ingresos suficientes para cubrir la Canasta Básica Total, es decir, que estaban en la pobreza. Ello abarcaba a unas 15 mil personas. Seis meses después, en la última medición del Indice de Pobreza (el de diciembre del año pasado aún no se difunde), ese número había bajado de manera importante a 11 mil, pero era preocupante que casi el 50% de la población en esa condición se conformara con menores de 15 años.

Pero el Indec sólo mide Río Gallegos y eso hace que la lectura sobre la situación social sea parcializada.

Hay otra forma de marcar el escenario real: la comparación entre la canasta y el salario promedio de los trabajadores y jubilados. Además de considerar los titulares de beneficios de la ANSES, como la asignación universal por hijo o el plan para las embarazadas, etc. Al hacer esa comparación, el número de pobres se multiplica.

Más de lo querido 
A la hora de hacer el análisis de la población afectada, nos encontramos con que hace un año atrás eran 27.500 las personas con ingresos registrados que no superaban el salario mínimo vital y móvil, que el mes pasado quedó fijado en $ 9.500.

En ese espectro encontramos a jubilados y pensionados nacionales que ganan la mínima. Jubilados provinciales en igual condición. Titulares del beneficio de la Asignación Universal Por Hijo y de la Asignación Universal por Embarazo.

En Santa Cruz, según datos registrados por ANSeS a los que tuvo acceso La Opinión Austral, hay unos 13.000 jubilados y pensionados que perciben la jubilación mínima ($ 7.246,64). A ellos se suman los beneficiarios de los distintos programas que lleva adelante el organismo previsional y cuya condición para poder obtenerlos es no contar con ingresos superiores al salario mínimo vital y móvil, hoy fijado en 9.500 pesos.

Así nos encontramos casi 9.500 titulares del beneficio de la Asignación Universal por Hijo que cobran esta percepción por casi 15 mil chicos. A ellos se suman unas 400 mujeres del Plan Universal de Embarazo.

Pero si comparamos los ingresos con la CBT de Patagonia, nos encontramos con que el número de jubilados nacionales que no alcanza a percibir esa cifra es mucho mayor, elevándose a más de 25.000.

A nivel provincial 
De acuerdo a datos gremiales, el 40% de los trabajadores de la Administración Pública Central enrolados en la llamada ex 591, hoy tiene las categorías más bajas. Para la categoría inicial, el ingreso de bolsillo se ubica en los 10.900 pesos.

Hoy, producto del congelamiento salarial y el desfasaje inflacionario, de los poco más de 10 mil trabajadores enrolados en la ex 591, prácticamente el 70% cobra por debajo de la Canasta Básica Total.

Lo propio sucede en algunos municipios, cuya cantidad de personas es muy difícil de dimensionar porque varía en cada localidad.

A esto se suman, por ejemplo, otros sectores estatales, como los maestros que cuentan con un solo cargo y menos de cinco años de antigüedad, que hoy perciben por debajo de la CBT. Fuentes sindicales señalaron a este diario, que serían unos 6 mil los docentes en esas condiciones.

Lo propio sucede con varias escalas salariales del sector privado, donde los salarios iniciales están lejos de ser superiores a los $ 22.000.

De esta forma nos encontramos con que hoy no menos de 50 mil personas, ya sean trabajadores o jubilados, perciben haberes por debajo de la línea de pobreza en Santa Cruz.

Cabe aclarar que es imposible contemplar en este cálculo a la gente que no está formalizada laboralmente o que en el sector privado figura como “media jornada”, debido a la falta de estadísticas actualizadas, lo que sin duda elevaría el porcentual afectado.

Tampoco se contempla las personas que, lamentablemente, están desocupadas, algo difícil de dimensionar fuera de Río Gallegos, única ciudad en la que se mide, de manera fehaciente, la desocupación.

Algunos dirigentes consultados señalaron que según los números que ellos manejan, “el 40% de la población económicamente activa hoy” gana salarios menores a 22 mil pesos. Una cifra que, de manera preliminar, aparece como exagerada, aunque no hay estadísticas certeras con las cuales ratificarla o desmentirla.

A la hora de desagregar por grupos de edad, el nivel de pobreza varía según la misma. Siendo el más grave lo que ocurre con los más desprotegidos, los niños y jóvenes.

Así, mientras que en general el 30,3% de la población vive por debajo de la línea de pobreza, al considerar sólo a la población juvenil nos encontramos con que en esta situación está el 45,8% de niños de entre 0 y 14 años. Esto implica que casi 7 mil chicos sólo en Río Gallegos sufren las limitaciones que da no llegar a cubrir la Canasta Básica Total. Y lo que es peor, son casi 2 mil los chicos que ni siquiera logran cubrir la Canasta Básica Alimentaria, con todo lo que ello implica.

Jubilaciones: 5,71% en marzo
El Gobierno Nacional dio a conocer ayer el incremento que tendrán los jubilados, pensionados y beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo (AUH), el cual será de 5,71% en marzo, en línea con las estimaciones de los expertos, por lo cual la mínima pasaría a $ 7.658. Se trata del primer ajuste con la nueva fórmula de movilidad sancionada en diciembre, en medio de las protestas y represión en la zona de Congreso, la cual establece que las alzas se regirán en un 70% por inflación y el 30% restante por el aumento salarial promedio, cada tres meses en vez de seis.

Fuente: La Opinión Austral