Concordia será declarada por decreto «ciudad pro vida» tras un fuerte lobby religioso
El intendente Enrique Cresto lo anunció este miércoles durante una reunión con grupos católicos, evangélicos y judíos en medio del debate nacional por la legalización del aborto.
El intendente Enrique Cresto lo anunció este miércoles durante una reunión con grupos católicos, evangélicos y judíos en medio del debate nacional por la legalización del aborto. El Concejo Deliberante había rechazado el mes pasado el proyecto. Duras críticas.
En medio del debate por la legalización del aborto que se está dando en el Congreso nacional y en la sociedad argentina, el intendente de la localidad entrerriana de Concordia, Enrique Cresto, realizó un anuncio polémico: decretará a la ciudad como «pro vida».
El anuncio lo realizó en medio de una reunión con integrantes de grupos católicos, evangélicos y judíos que vienen presionando hace meses para que ese Municipio se declare en contra del proyecto de ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE), que ya cuenta con la aprobación de la cámara de Diputados y disputará su sanción en el recinto de Senadores el 8 de agosto próximo.
«Nos comprometimos con el viceintendente a realizar un decreto ratificando nuestro compromiso con el Pacto de San José de Padua (N.del.E: firmado por varios intendentes en 2016). No sólamente en la defensa de la vida desde la concepción y la defensa de las dos vidas, sino en todos sus términos: de la vida desde la concepción, pero también en todo el transcurso de la vida del ser humano. Ese es nuestro compromiso», aseguró Cresto ante una tribuna pro aborto clandestino que estalló en aplausos y gritos de «Viva la vida».
La decisión del decreto es por lo menos escandalosa, debido a que la propuesta de declarar «pro vida» a Concordia ya había sido rechazada por el Concejo Deliberante en junio pasado cuando cinco legisladores se manifestaron a favor, seis en contra y uno se abstuvo.
Tras esa votación, los grupos religiosos mostraron sus dientes. «Los “honorables” que votaron la Ordenanza N° 35.737 que adhiere en todas sus partes al Pacto de San Antonio de Padua, que expresa taxativamente “proteger a la familia como célula básica de la sociedad y la vida humana desde la concepción” son los mismos “honorables” que el pasado 14 de junio, han rechazado este proyecto de revalorización de la vida y la familia. Nos preguntamos entonces, ¿Donde habrá quedado la honorabilidad de estos honorables? ¿Dónde quedó su coherencia?», lanzaron en esa oportunidad en una carta los evangélicos desde Asociación Pastores Unidos de Concordia.
Fuerte rechazo al decreto
Después del anuncio del intendente, feministas de izquierda y kirchneristas de Entre Ríos repudiaron la toma de postura institucional del gobierno comunal y criticaron el vínculo estrecho entre la Iglesia y el Estado.
«En primer lugar le recordamos al intendente Cresto que Concordia no es una teocracia y que por lo tanto no se puede imponer la doctrina religiosa por decreto. Estamos discutiendo un derecho elemental que es el derecho de salud y democrático de decidir sobre nuestro propio cuerpo. El aborto en nuestro país es un problema de salud pública, DDHH y de justicia social, una deuda de la democracia con las personas con capacidad de gestar», aseguró la referente del Mst-Nueva Izquierda, Nadia Burgos.
«Las acciones de Cresto son una muestra más de la relación privilegiada que el Estado tiene con la Iglesia católica y tenemos que avanzar y luchamos también para su definitiva separación. No se puede imponer la doctrina de un credo al conjunto de la población y muchísimo menos por decreto. Debe darse de inmediato marcha atrás a esta medida», reclamó.
En la misma línea, el Partido Comunista de Concordia también se pronunció al respecto a través de un comunicado en el que tildó de «mesiánico y antidemocrático» al decreto. A continuación, la transcripción del texto completo:
«El Partido Comunista de Concordia repudia enérgicamente el vergonzoso decreto municipal que declara a esta ciudad como pro vida, siendo esto solamente expresión de una dirigencia política y religiosa que quiere escucharse a sí misma y pretende imponer de manera autoritaria sus propias creencias por parte del intendente Enrique Cresto.
Resulta mínimamente del siglo XIX ignorar, pasar por alto y finalmente violentar la existencia de un Estado laico, de la pluralidad de voces en democracia y del propio funcionamiento republicano de las instituciones ya que es el propio Concejo Deliberante, con voto por mayoría de partidos de distinta procedencia ideológica y con un profundo debate, el que ha rechazado esta imposición arbitraria y mesiánica.
Por esto resulta impresentable la postura del Presidente del Concejo Deliberante Armando Gay, quien avala con su presencia en la presentación del decreto todo lo contrario a lo que el propio cuerpo deliberativo que preside votó, faltándole el respeto a los concejales y a la ciudadanía que forma parte de la democracia representativa, que deviene así en una caricatura.
Este decreto a espaldas del pueblo y de toda representación popular, desoye la lucha organizada de las mujeres
Este decreto a espaldas del pueblo y de toda representación popular, desoye la lucha organizada de las mujeres que a lo largo y ancho del país, con múltiples acciones en Concordia, han transformado el derecho a la soberanía sobre sus cuerpos en un clamor popular materializado en el voto mayoritario de Diputados de un amplio arco de partidos políticos por el proyecto de ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo como política de salud pública, para una educación sexual integral y para terminar con el negociado y las muertes por los abortos clandestinos.
La violencia social y personal actual, se fundamenta en la existencia de una sociedad que determina que lxs sujetxs no son libres sino objetos instrumentales para sostener las creencias e imposiciones de otros y este decreto promovido por el intendente es parte de esa violencia, ejercida entonces desde el poder político y reforzando el patriarcado.
Nos convocamos atentos a cada una de las acciones del movimiento de mujeres por su emancipación y llamamos a estar alertas para participar de cada una de sus acciones de repudio a este nefasto decreto.
Educación Sexual Integral con perspectiva de género para decidir, anticonceptivos para no abortar, aborto seguro legal y gratuito para no morir».
