Bariloche resguarda (y gana) sus fondos en plazo fijo
Bariloche obtuvo ingresos extraordinarios en los últimos meses. Lo hizo en el sistema financiero donde colocó recursos de obra pública y de recaudación propia en cuatro plazo fijos
Bariloche obtuvo ingresos extraordinarios en los últimos meses. Lo hizo en el sistema financiero donde colocó recursos de obra pública y de recaudación propia en cuatro plazo fijos, aprovechando las altas tasas fijadas por el Banco Central y, en lo que va del año, ganó el equivalente a una masa salarial.
«Haber dejado inmovilizado el dinero hubiera significado una pérdida millonaria y la imposibilidad de pago de las futuras obligaciones», aseguró el jefe de Gabinete, Marcos Barberis, a En Estos Días.
El razonamiento es lógico: el dinero destinado a obra pública ingresa a las cuentas municipales en un único desembolso, pero se ejecuta por etapas, contra la presentación de las certificaciones de avance de los trabajos. En consecuencia, el excedente, el municipio lo ingresa al mercado financiero para evitar que el dinero sea devaluado por la inflación.
Bariloche administra recursos destinados a la obra pública -mayoritariamente del Plan Castello y del PROMEBA- y también generados por recaudación propia, fueron colocados en cuatro plazos fijos en pesos y de distintas entidades bancarias, entre ellas el Banco Galicia y el Patagonia.
La decisión del intendente Gustavo Gennsuo decidió aprovechar las altas tasas y colocar fondos municipales en plazos fijos y financiar así las arcas estatales.
Las siderales tasas de interés que actualmente maneja el sistema financiero -hoy por sobre el 83%- arrojaron ingresos que excedieron ampliamente las expectativas del gobierno local, y consolidados en el Ejecutado bajo el ítem Intereses por Colocaciones Financieras. La gestión Gennuso había presupuestados 30,3 millones de pesos por ese concepto para todo el ejercicio, pero en sólo ocho meses obtuvo 97,2 millones de pesos, es decir 66,8 millones más de lo previsto.
En años anteriores, los intereses percibidos por colocaciones financieras fueron sustancialmente menores: en 2018, ingresaron 12,9 millones de pesos por ese concepto y en 2017 fueron 2,7 millones. Este año, sólo en mayo entraron 19,7 millones por este ítem, y desde entonces, el monto no baja de las dos cifras: 17,8 millones en junio, 18,5 millones en julio y 12,4 millones de pesos en agosto.
La magnitud de la incidencia de los intereses generados por las colocaciones bancarias es tal, que ya se convirtió en el tercer ingreso más importante del Municipio, sólo detrás de la coparticipación y las tasas.
Los casi 100 millones recaudados hasta el momento equivalen a una masa salarial completa de los trabajadores municipales -neto cobrado-, y a un tercio de los ingresos previstos por tasas municipales para todo el año. Es, además, el triple de lo recaudado en el mismo período con la polémica Ecotasa (31,8 millones); por todas las infracciones y multas (31 millones de pesos); y suma más de cuatro desembolsos del canon por la concesión del Cerro Catedral (21 millones).
Los portentosos ingresos permitieron al Gobierno Municipal compensar la marcada baja en la recaudación por otros conceptos como las tasas municipales, que en algunas zonas de la ciudad cayeron del 70 al 40% de cumplimiento en los últimos meses.
Barberis explicó que gracias a esos ingresos el Ejecutivo cumplió con los acuerdos paritarios sellados con el gremio SOYEM, y con el pago de compromisos salariales sin necesidad de apelar al descubierto bancario.
-Poner a jugar en la bicicleta financiera dinero de la recaudación, ¿no implica distraerlo de necesidades urgentes como la ayuda social?, le consultaron.
«No, porque las actuales condiciones permiten una rápida recuperación de los fondos. El sistema habilita realizar estas operaciones de muy corto plazo. No tenemos la necesidad de dejar dinero sin poder tocarlo durante tres meses; hay una renovación permanente y una ganancia clara por los intereses», respondió el Jefe de Gabinete.
