Ante el hambre, más represión: Bullrich y Vidal suman 7500 policías al conurbano

En el marco de la creciente conflictividad social por la crisis económica, Nación y Buenos Aires anunciaron un operativo de "saturación" de fuerzas de seguridad en transportes públicos, barrios marginales y puntos neurálgicos del Gran Buenos Aires.

En el marco de la creciente conflictividad social por la crisis económica, Nación y Buenos Aires anunciaron un operativo de «saturación» de fuerzas de seguridad en transportes públicos, barrios marginales y puntos neurálgicos del Gran Buenos Aires.

En el día en que comienza un paro nacional contra el ajuste del gobierno de Cambiemos y en un contexto de conflictividad social creciente, Nación y Provincia de Buenos Aires anunciaron un despliegue de 7.500 miembros de fuerzas federales y bonaerenses en las calles del conurbano para «combatir el delito».

El operativo de «súper saturación» fue presentado esta mañana en Quilmes por la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, junto a su par bonaerense, Cristian Ritondo, la gobernadora, María Eugenia Vidal, el intendente local, Martiniano Molina, además de otros seis jefes comunales. Los funcionarios fueron escoltados durante el acto por cientos de uniformados.

El operativo implicará una fuerte presencia policial en 47 puestos de control, 20 de ellos fijos, y la utilización de tecnología y otros recursos como helicópteros equipados con cámaras de precisión.

«Las fuerzas van a trabajar en forma coordinada en tres lugares: los que tienen alta densidad de tránsito de gente, los puntos de alta sensibilidad con mucho delito y el transporte público», informó Bullrich y precisó que los efectivos que pertenecen a Nación serán destinados a los trenes, mientras que los provinciales estarán en los colectivos.

La medida represiva llega en medio del ajuste brutal que pretende aplicar la administración macrista en todo el país y que sufrirán principalmente los sectores más vulnerables que residen en las villas de los alrededores de la Capital Federal, uno de los blancos centrales del operativo.

Según el detalle del plan, se trabajará sobre un «mapa del delito» diseñado tras un relevamiento de datos realizado por las fuerzas de seguridad, que tendrán presencia permanente en el interior de los barrios y patrullaje perimetral. El asedio a los habitantes de las zonas más pobres se completará con controles de ingreso y egreso y vigilancia aérea con drones y helicópteros.

Además, aumentará la presencia policial en accesos Oeste, Panamericana, por rutas 8, 3 y 205, además de la Autopista Riccheri, la Plata-Buenos Aires y en pasos afluentes. También realizarán operativos en estaciones y terminales de micros.

Fuente: InfoNews