Avanza el mapa final del sur de Las Grutas
El «mapa final» de la franja costera al sur del balneario rionegrino quedará prácticamente terminado.
La zona de los pulperos pasará a manos municipales
El presidente del Concejo Deliberante, Claudio Palomequez, afirmó días atrás que está «prácticamente cerrado» el ‘mapa final’ en el que se estuvo trabajando tras el acuerdo de porcentajes efectuado con la familia Tarruella. Ese trato resolvió extrajudicialmente el histórico litigio por una importante franja de tierras ubicadas al sur de este balneario. Lo que debían negociar era cómo se distribuían los valores acordados (65% para el Estado y 35% para los particulares) en cada una de las cinco parcelas en las que se divide la franja. Entre los puntos más salientes que el funcionario dio a conocer se encuentra la determinación de que la villa de los pulperos ubicada a la altura de la Séptima Bajada quede en manos del municipio, que deberá resolver de qué modo interviene en el lugar, que desde hace años ocupan vecinos ligados a la recolección costera de los tradicionales pulpitos.
Palomequez también adelantó que aquellos que construyeron de manera irregular a lo largo de la zona en tierras adquiridas a los Tarruella tendrán un plazo perentorio para presentar los planos de esas construcciones. Igualmente, en el acuerdo sellado se prevé que las obras que no cumplan con lo previsto por la ley de costas (por estar al límite de la línea que trazan los cánones vigentes) deberán ser destruidas. Esto será analizado por el área de planeamiento, cuando se formalice la presentación de ese «mapa final» y se avance en la regularización del lugar.
Sobre la villa de los pulperos el edil explicó que «la situación es sensible y nos corresponde a nosotros como municipio resolverla, teniendo en cuenta que hay entre 14 y 20 familias que poseen ocupaciones allí». Agregó que «el asentamiento tiene una extensión de más o menos tres hectáreas» y adelantó que a futuro «uno de los proyectos en el que podría trabajarse sería el de establecer un núcleo productivo, donde los pulperos pudieran exhibir y vender sus productos. Algo que se pensó cuando el arquitecto Diego Capandeguy trabajó en el plan director. Eso implicaría que esas tierras no se destinaran para viviendas, y que ese punto se tratara de resolver mediante otro acuerdo con los ocupantes», dijo.
En relación con las construcciones que ya están efectuadas en las 80 hectáreas que les quedarán a los Tarruella Palomequez expresó que «cada ocupante tendrá 6 meses para presentar los planos. El código de ordenamiento territorial lo contempla. Tienen que ingresar a catastro, regularizarse, y a partir de allí nos corresponderá a nosotros ordenar la situación», aseveró.
