Bahía Blanca: otra vez los salarios perdieron poder adquisitivo por casi 4%
Un informe del CREEBBA detalla que la inflación superó con creces a las actualizaciones salariales medidas por el Índice de Salarios, y además grafica la dinámica del indicador en los últimos doce meses, que refleja una caída del salario real bahiense.
27/11/2019 ECONOMÍAUn informe del CREEBBA detalla que la inflación superó con creces a las actualizaciones salariales medidas por el Índice de Salarios, y además grafica la dinámica del indicador en los últimos doce meses, que refleja una caída del salario real bahiense.
Un informe del Centro Regional de Estudios Económicos de Bahía Blanca (CREEBA) expuso que en el mes de octubre, el Índice de Salarios (ISAL) registró un crecimiento del 0,8% en relación al mes anterior, mientras que en el mismo periodo el costo de vida medido por el IPC – CREEBBA avanzó un 3,7%. Por su parte, la variación acumulada de los primeros diez meses en el ISAL se ubicó en 39,7% en tanto que la tasa de inflación en el mismo periodo ascendió a 41,8%.
Además, el documento grafica la variación porcentual del ISAL junto con la del IPC – CREEBBA para los últimos doce meses, donde se puede observar con mayor frecuencia meses en los que el salario creció por debajo de la tasa de inflación. Según CREEBBA, las recomposiciones responden, en algunos casos, a las reaperturas de negociaciones paritarias donde se firmaron incrementos para readecuar los salarios al contexto inflacionario (diciembre, abril y julio) y al cobro de sumas fijas no remunerativas como en el mes de septiembre.
Por otro lado, la dinámica del indicador de salarios en los últimos doce meses refleja una caída del poder de compra del salario en Bahía Blanca. En octubre, el salario real se contrajo un 2,8% en relación al mes anterior y un 0,8% respecto al mismo mes del año pasado.
“A partir del mes de noviembre, la caída del poder adquisitivo parecía haber encontrado un piso alrededor de los 90 puntos a partir del cual el salario se recuperaría. Sin embargo, el shock cambiario ocurrido en agosto, que interrumpió el proceso de paulatina desaceleración inflacionaria que se venía observando, generó un nuevo deterioro del salario real”, detalla CREEBBA y concluye: “Es importante recalcar que de no haberse percibido en septiembre el bono, el escenario de dicho mes hubiese sido muy distinto al que se terminó dando en la práctica”.