Bariloche: «El sistema está colapsado en todo el país», advierten sobre el futuro del transporte urbano
El gerente operativo de Mi Bus, Rosamel Santana, señaló que el problema del servicio de transporte urbano no es exclusivo de la ciudad y que se requiere de una solución conjunta porque "vamos a tener un problema grave todos".
16/01/2023 MUNICIPIOSEl gerente operativo de Mi Bus, Rosamel Santana, señaló que el problema del servicio de transporte urbano no es exclusivo de la ciudad y que se requiere de una solución conjunta porque «vamos a tener un problema grave todos». También se refirió a los reiterados hechos de violencia.
«Tenemos una problemática importante por el tema de la circulación y calles colapsadas que generan innumerables inconvenientes, lo que genera enojos», explicó el gerente de Mi Bus y enfatizó que es un problema del transporte en el país, no algo puntual en la ciudad.
«Tenemos que encontrar una solución entre todos los sectores, vamos a tener un problema grave todos», aseguró.
Ante la consulta precisó que en base a subsidios no tenemos nada pendiente, el servicio está subsidiado en base a kilometraje y pasajeros, «están muy golpeadas las empresas en el interior». Explicó que «cuando tenés dos pasajeros por kilómetro genera más inconveniente, el sistema a nivel nacional está teniendo un colapso porque la Nación no puede sostener los subsidios para que la empresa preste el servicio y la gente no puede pagar más aumentos, hay que dar una vuelta de rosca a eso».
En cuanto a los reiterados hechos de violencia Santana lo atribuyó «a un flagelo de la sociedad». Manifestó que el tema de la violencia se mantiene vigente, dado que rompen vidrios y apedrean unidades en forma reiterada. «No tiene trascendencia porque tampoco vamos a estar comunicando esto a cada rato», expresó y aclaró que «no es que ha mermado, siempre se dan este tipo de casos».
Expresó que los ataques se dan en distintos lugares, en Los Coihues, los barrios del Sur, el Este, «no es una problemática sectorizada». Planteó que muchas veces los choferes acuden a la suspensión de servicios, «siempre está vigente, la preocupación de todos respecto a ese tipo de ataques que son sorpresivos. Es difícil tener un control, vas circulando y ves gente al costado del camino siempre, no es previsible quién te va a tirar una piedra».