Bolsonaro busca distanciarse de la derrota de sus aliados en las municipales

De los 13 candidatos apoyados por Bolsonaro para alcaldías, sólo dos resultaron electos; el peor resultado se dio en San Pablo, donde Celso Russomano quedó en cuarto lugar, con un 10,5% de los votos.

De los 13 candidatos apoyados por Bolsonaro para alcaldías, sólo dos resultaron electos; el peor resultado se dio en San Pablo, donde Celso Russomano quedó en cuarto lugar, con un 10,5% de los votos.

El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, intentó distanciarse del magro desempeño de sus apadrinados y aliados en la primera vuelta de las elecciones municipales celebradas ayer, en las que sus candidatos tuvieron una cosecha de votos bajísima en ciudades clave como San Pablo, la capital económica y financiera del país, y prefirió destacar el persistente debilitamiento de la izquierda.

«La izquierda sufrió una histórica derrota en estas elecciones, en una clara señal de que la ola conservadora en 2018 llegó para mantenerse», tuiteó el mandatario que hizo campaña por 13 candidatos a alcaldes, nueve de los cuales fueron derrotados en los comicios y dos deberán competir en segunda vuelta, y apoyó a 45 postulantes a concejales, de los que solo 10 de ellos lograron una banca en las asambleas municipales.

«Mi ayuda a unos pocos candidatos a alcalde se resumió a cuatro lives de un total de tres horas», agregó Bolsonaro.

El mandatario no se refirió a la victoria clave en San Pablo del candidato del centrista Partido de la Socialdemocracia Brasileña (PSDB), Bruno Covas, el más votado con el 32,8%, que disputará el balotaje con Guilherme Boulos, del izquierdista Partido Socialismo y Libertad (Psol), que sumó el 20,2%, mientras que el candidato apoyado por Bolsonaro, Celso Russomanno, se ubicó en cuarto lugar con el 10,5%.

En cambio, el gobernador de San Pablo, Joao Doria, del PSDB y considerado un potencial adversario del actual presidente en los comicios de 2022, celebró hoy la victoria de su correligionario de la capital estadual y aseguró «Bolsonaro no va a olvidar estas elecciones».

«En San Pablo, Bruno Covas será reelecto (en el balotaje, el 29 de este mes), ya vencimos a los radicales de extrema derecha (Russomanno) y ahora vamos a vencer a los radicales de extrema izquierda (Boulos)», aseguró Doria, citado por la agencia de noticias ANSA.

No obstante, si bien el PSDB venció en la capital de San Pablo y en otros importantes municipios paulistas, a nivel nacional el partido que despunta como uno de los vencedores de estas elecciones fue Demócratas (Dem, derecha) con buenas perfomances en varias capitales.

En Río de Janeiro, el alcalde saliente Marcelo Crivella, con 21,9%, un exobispo evangélico apoyado por Bolsonaro, quedó en posición desfavorable para el segundo turno, frente a su predecesor Eduardo Paes, del derechista Demócratas con 37%.

Además, los candidatos de Demócratas fueron electos alcaldes en primera vuelta en Salvador, capital del estado de Bahia, en Curitiba, capital de Paraná y en Florianópolis, capital del estado de Santa Catarina.

En números absolutos el primer lugar fue para el Movimiento Democrático Brasileño (MDB, centro derecha) que se impuso en 773 alcaldías, con mayoría de ciudades medias y pequeñas, contra 1035 victorias logradas en la municipales de 2016.

Los políticos de centro y centro-derecha fueron los principales favorecidos en los comicios del domingo.

Bolsonaro, sin partido desde que rompió el año pasado con el PSL -su novena filiación política-, participó de forma ligera en el comienzo de la campaña, pero en la recta final, y ante los sondeos desfavorables para sus aliados, inició transmisiones en vivo diarias en sus redes sociales que fueron cuestionadas por contravenir las reglas de hacer campaña.

De los 45 concejales que Bolsonaro apoyó nominalmente, sólo 9 fueron electos, con el 20%.

El mandatario borró ayer un posteo en Facebook en el que pedía apoyo a candidatos que en su mayoría fueron derrotados.

Su hijo, el concejal de Río de Janeiro Carlos Bolsonaro, fue reelegido pero perdió el puesto de más votado ante Tarcísio Motta, del PSOL.

Esta elección «muestra la fuerza que el centro volvió a tener en el proceso político», afirmó el politólogo de la Universidad Federal de Minas Gerais Felipe Nunes.

En el campo de la izquierda, Nunes destacó que partidos como el PSOL y el Partido Comunista de Brasil (PCdoB), que disputarán segundas vueltas en capitales estatales, surgen como posibles alternativas y minan la hegemonía del Partido de los Trabajadores (PT), del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva.

Fuente: telam