Calculan que las lluvias ya afectaron a más de seis millones de hectáreas en Buenos Aires

Según un informe elaborado por CARBAP, la superficie afectada pasó de 5,5 a 6,3 millones de hectáreas. Cómo afecta a la agricultura y a la ganadería.

Según un informe elaborado por CARBAP, la superficie afectada pasó de 5,5 a 6,3 millones de hectáreas. Cómo afecta a la agricultura y a la ganadería.

Mientras los productores bonaerenses sufren los efectos de las lluvias, y esperan que el Gobierno provincial empiece a implementar la Emergencia Agropecuaria en los distritos afectados, CARBAP actualizó los datos del área agrícola y ganadera perjudicada por los excesos hídricos.

En total, son 840.000 hectáreas que se suman a las 5,5 millones estimadas el pasado mes de agosto. De acuerdo a un documento elaborado por la entidad, un total de 6,3 millones de hectáreas se encuentran bajo agua, que sumadas a 2,5 millones que indirectamente están afectadas redondean 9 millones de hectáreas en esta delicada situación.

En este escenario, la actividad agropecuaria sufrirá complicaciones. Por el lado de la agricultura, y con una implantación de soja y maíz que está en la línea de salida, el informe destaca que la ventana de siembra “está cada vez más comprometida, ya que los pronósticos no son alentadores como para prever una mejora sustancial en las próximas semanas”.

Así, desde el sector privado calculan que la oleaginosa podría sufrir un recorte de área que rondaría el millón de hectáreas, situación que perfila al maíz como el gran ganador de esta campaña. A este hecho, los especialistas remarcan que el cereal ganará puntos sobre la soja al ser más flexible para su siembra, de la mano de  híbridos  con ciclos de madurez más largos, que permitirán estirar las fechas de implantación.

Con 12,7 millones de cabezas afectadas por las precipitaciones, el documento advierte que en las zonas de cría de la Cuenca baja del Salado, al mal estado corporal de los rodeos se sumará el impacto de la baja en la tasa de preñez, de cara a la inminente temporada de servicios.

Otro punto que preocupa a este sector es la demora en la declaración de Emergencia Agropecuaria. Esto, sumado al constante reclamo en la baja de la presión impositiva a la gobernadora María Eugenia Vidal genera un alto grado de impaciencia entre los productores.  Desde el ruralismo ven con buenos ojos el inicio de las obras del Plan Maestro del Salado,y coinciden en que constituye una herramienta que brindará soluciones en el largo plazo, mientras las entidades gremiales del ámbito rural reclaman soluciones para los problemas que los afectan ahora.

Fuetne: InfoCielo