Casalegno: en mayo se viene la primera Fiesta del Lúpulo 100% Santafesino

Con espectáculos artísticos, feria, cerveza artesanal y comidas típicas, la localidad se prepara para festejar el próximo 6 de mayo

Con espectáculos artísticos, feria, cerveza artesanal y comidas típicas, la localidad se prepara para festejar el próximo 6 de mayo

La localidad de Casalegno, en el departamento San Jerónimo, se prepara para disfrutar de la primera Fiesta del Lúpulo 100% Santafesino con artesanos, shows en vivo y una gran cena que se realizará el próximo 6 de mayo. El cronograma de actividades prevé el inicio para las 11 con paseo de artesanos en el predio de lúpulos y por la tarde, será el turno de los shows en vivo y, a partir de las 21, tendrá lugar la cena y baile en el club local. Estas actividades se centran en la intención de celebrar el nuevo y prolífico cultivo que se experimentó en la localidad y llegó para quedarse.

En 2020 un grupo de productores santafesinos decidió desafiar la idea de que el lúpulo era un cultivo exclusivo de la comarca andina patagónica y se animó a producirlo en la zona centro-sur de su provincia. El resultado fue exitoso y por demás inesperado, al punto tal que, tras la primera cosecha en marzo de 2021, pudieron lanzar la primera cerveza elaborada ciento por ciento con materias primas de la localidad y la región.

Casualidad
El resultado fue obra del esmero de los productores y también de la casualidad. Un tiempo antes de aventurarse en el proyecto, la Cooperativa Colonizadora Argentina Limitada, llevó adelante en acuerdo con el Club Sportivo Rivadavia –de la vecina ciudad de San Genaro- un relevamiento de las producciones locales a las que se podía potenciar mediante un agregado de valor. El objetivo era recuperar algunas actividades y proyectos familiares que se perdieron por los vaivenes económicos del país.

Ese sondeo hizo que los productores se toparan con una parcela de plantas de lúpulo en el medio del pequeño pueblo de Casalegno, ubicado entre Díaz y Bernardo de Yrigoyen, en la intersección de las rutas provinciales 10 y 40-S.
“Nos llamó la atención porque no había registradas plantas de lúpulo a esta altura. A través de la comuna nos pusimos en contacto con el titular de esa tierra. Ahí comenzó todo”, relató en su momento Fernando “Patán” Müller, síndico titular de la Cooperativa y coordinador de equipos técnicos de la institución.

En ese momento, Víctor Luraschi, era el dueño de esas plantas quien resultó ser, además, el primer “importador” de lúpulo desde la Patagonia hacia la provincia de Santa Fe. Como pionero de la cerveza artesanal en territorio santafesino, Luraschi –hoy fallecido- comenzó a experimentar con su cultivo y trabajó con rizomas provenientes del vivero Humus de El Bolsón. Sin embargo, algunos problemas de salud le impidieron seguir atendiendo esa parcela.

Ante la situación, la cooperativa hizo un convenio con él y con su hijo Esteban, para que se le diera continuidad al proyecto, mediante la administración de la infraestructura que Luraschi tenía en Casalegno. El consejo de la cooperativa determinó entonces continuar la producción y hacer un ensayo.

“Lo que nos despertó el interés fue ver que esa planta, que desde el punto de vista agronómico no estaba en su zona idónea de desarrollo, estaba desarrollada bien y había rendido un porcentaje muy interesante con respecto al rendimiento del lúpulo en el sur. Pensamos que eso podía ser algo que genere arraigo en el pueblo de Casalegno porque necesita mucha mano de obra para la cosecha y para la elaboración. Lo que había que hacer era tomar la decisión para hacer el ensayo y ver qué variedad de lúpulo se adaptaba acá en la zona”, explicó Müller al portal “Bichos de Campo”.

La producción se llevó adelante con en una hectárea que se preparó durante el 2020. La irrupción de la a pandemia de Covid-19 retrasó los trabajos y los productores reforzaron la atención en la parcela que Luraschi había desarrollado. Allí, se trabajó con cinco variedades de lúpulo de las que se logró cosechar un total de 40 kilos a partir de 4.500 plantas.

El lúpulo
El lúpulo es una enredadera a la que hay que colocarle guías para que crezca y florezca. Según la variedad, alcanza entre sesenta centímetros y un metro de altura. La cosecha de 2021 se hizo con el método utilizado en el sur que implica cortar a la planta desde abajo, llevarla a una mesa de selección y remover las flores de lúpulo.

En 2022, a causa de la sequía que azotó a gran parte del país, el método de cosecha aplicado fue el secuencial ya que el estrés afrontado por las plantas hizo que no maduraran al mismo tiempo. De esta forma se inició la cosecha de algunas partes y se aguarda por la floración de otras.

Las variedades trabajadas hasta el momento son la Cascade, la Golding, la Traful, la Mapuche y la Victoria. Entre la Cooperativa y la comuna la inversión inicial alcanzó los tres millones de pesos.

A partir de esos resultados, la cooperativa de Casalegno comenzó la gestión de un proyecto para el procesamiento del lúpulo y posterior elaboración de cerveza, que fue presentado al Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (Inae) para conseguir fondos.

Además, al no contar con instalaciones propias, firmaron un convenció con dos cervecerías de Rosario para que ellas produzcan cerveza a partir del lúpulo obtenido en Casalegno.

Fue la primera edición de cerveza artesanal 100% santafesina: “la cebada cervecera es de Díaz y se procesa en punta Alvear, el agua es de acá, las levaduras que se utilizan se producen en la provincia y el lúpulo se produjo aquí”, festejó Müller.

Para la cerveza se utiliza la flor hembra sin fecundar. El ácido del lúpulo tiene un suave efecto antibiótico contra las bacterias grampositivas y por esta característica se comenzó a utilizar en la producción de cerveza ya desde la Edad Media.

Actualmente, el aditivo principal que se utiliza para contrarrestar el dulzor de la malta de cebada es el lúpulo.

Fuente: La Capital