Cierra una planta de Adidas

A pesar de las masivas manifestaciones que realizaron los empleados para mantener en pie la planta, la empresa brasileña Paquetá, que produce zapatillas para Adidas, confirmó ayer el cierre de su planta de Chivilcoy.

A pesar de las masivas manifestaciones que realizaron los empleados para mantener en pie la planta, la empresa brasileña Paquetá, que produce zapatillas para Adidas, confirmó ayer el cierre de su planta de Chivilcoy. La compañía, máxima empleadora privada de la localidad de 60 mil habitantes, convirtió las más de 600 suspensiones ejecutadas en agosto en 397 despidos y rápidamente pidió a la Secretaría de Trabajo de María Eugenia Vidal que dictara una prórroga de la conciliación obligatoria para evitar nuevas medidas de fuerza de los trabajadores que quedaron activos.

La textil reforzó el plan de ajuste que había iniciado en agosto, cuando implementó suspensiones escalonadas del 65 por ciento del personal de la fábrica para restar un equivalente a un mes de producción, tiempo que los responsables administrativos de la empresa utilizaron para colocar parte del stock acumulado por la retracción del mercado interno. Como si eso no fuera suficiente, Paquetá confirmó ayer el despido de 397 trabajadores y adelantó que cerrará definitivamente la fábrica el 31 de diciembre, lo que deja en una situación delicada a los empleados que no fueron cesanteados.

Según circuló, del total de trabajadores, 178 personas ya aceptaron el retiro voluntario y 25 estarían interesadas en negociar una salida, pero los otros 397 operarios quieren que la firma consiga nuevos contratos y permanezca abierta. Mientras tanto, la empresa reclamó nuevamente la intervención de la Provincia para extender la conciliación obligatoria dictada el 14 de noviembre hasta el 28 de noviembre. El 28 habrá una nueva audiencia en la sede de la cartera laboral que conduce Marcelo Villegas, pero la compañía no está dispuesta a dar marcha atrás con su decisión porque no tiene mercado para colocar su producción.

La crisis en el sector textil, pero precisamente en las fábricas de calzado, se potencia por una pronunciada caída en las ventas, sumada a la apertura de importaciones. La contracción en el sector desde que asumió el gobierno de Mauricio Macri alcanza el 30 por ciento y según los sindicatos se registraron en los últimos ocho meses más de 5 mil pérdidas de puestos laborales, según denunciaron desde los gremios textiles.  En los últimos días, la crisis se reflejó en conflictos desatados en otras empresas de renombre en el sector: Dass, Gaelle y Alpargatas, con pérdidas de 2.100 fuentes laborales, de acuerdo con la Unión de Trabajadores de la Industria del Calzado de la República Argentina (UTICRA).

En Argentina, existen alrededor de 1.500 empresas dedicadas al calzado y emplean a unas 65.000 personas que atraviesan una crítica situación por la caída del consumo y la suba de importaciones. La crisis económica con caída de la demanda y el aumento de las importaciones de calzados viene golpeando desde hace tres años a las empresas industriales: en octubre, el sector fabril cayó 3,6 por ciento y terminará el año en recesión. Según un informe sectorial, la importación de calzados creció un 45 por ciento en los últimos dos años, pero el sector más afectado fue el deportivo, ya que el ingreso de productos terminados o semi- terminados desde Brasil aumentó un 116v por ciento  en ese período.

Fuente: Página 12