Cómo se impulsa el fortalecimiento del cooperativismo en Mendoza

En una jornada de encuentro y reflexión, se analizaron las virtudes de las cooperativas y las oportunidades que presentan en el contexto actual.

En una jornada de encuentro y reflexión, se analizaron las virtudes de las cooperativas y las oportunidades que presentan en el contexto actual.

Se desarrolló un encuentro de cooperativismo, Mendoza Coopera 2025, para resaltar el valor de las cooperativas en el desarrollo y el empleo

La celebración del Día Internacional del Cooperativismo fue el puntapié para organizar Mendoza Coopera 2025, un encuentro de referentes del sector, autoridades provinciales y nacionales, y estudiantes, bajo el lema: “Las cooperativas construyen un futuro mejor”.

La jornada fue organizada por la Dirección de Emprendedores y Cooperativas, del Ministerio de Producción, e incluyó paneles, talleres y stands de diversas cooperativas. En los distintos espacios se reflexionó sobre el ADN cooperativo, las ventajas que ofrece el modelo -en particular para los pequeños productores e iniciativas- y el futuro de estas entidades.

En la apertura del encuentro, la directora de Emprendedores y Cooperativas, Andrea Nallim, señaló que la jornada fue pensada para poner en valor el rol del cooperativismo en Mendoza, entendiendo a las cooperativas como empresas que generan empleo, innovación y desarrollo, con una fuerte orientación al bienestar de las personas y las comunidades.

“El cooperativismo mendocino está más vivo que nunca, con alrededor de 400 cooperativas activas, que día a día muestran su capacidad para adaptarse, crecer y aportar valor genuino a la comunidad”, resaltó.

Detalló que, desde la Dirección, el compromiso ha sido acompañar el crecimiento del sector a través de programas de financiamiento, capacitación, visibilización y también mediante tareas de fiscalización, siempre con una mirada de fortalecimiento.

El ministro de Producción, Rodolfo Vargas Arizu, mencionó que el contexto es desafiante, pero también ofrece oportunidades, y destacó la necesidad de organizarse para crear empleo y desarrollo en las comunidades. Subrayó que, en medio de la crisis y las transformaciones globales, hay que encontrar nuevas formas de construir prosperidad y “las cooperativas, lejos de ser una herramienta del pasado, pueden y deben ser protagonistas de nuestro futuro”.

Planteó una nueva visión del cooperativismo, lejos de esa idea de lentitud y escasa innovación, que impulse una “cooperativa moderna, que innova y que es eficiente”, sin renunciar a los valores de solidaridad, participación y arraigo comunitario. Y que es una herramienta para que los pequeños y medianos productores puedan crecer y producir más, invirtiendo y agregando valor, organizándose para lograr resultados que solos no podrían lograr.

“Las cooperativas, al producir y generar empleo, son agentes transformadores de la realidad de las personas”, subrayó. Y advirtió que, “sin innovación, no hay futuro para nuestras economías regionales”. El ministro añadió que impulsan un Estado inteligente y comprometido con el desarrollo productivo, y por eso están trabajando en simplificarle la vida al sector privado, para que pueda enfocarse en generar riqueza.

Por su parte, el intendente de la Ciudad de Mendoza, Ulpiano Suárez, anfitrión porque el encuentro de realizó en la Nave Cultural, consideró muy importante “hablar de cooperativas para construir un futuro mejor, hablar de un modelo cooperativo, hablar de que es posible generar riqueza y empleo con las personas en el centro, humanizando la agenda de desarrollo, en momentos en que esto está fuera de la agenda pública”.

El modelo cooperativo en la agenda pública
El encuentro tuvo dos paneles en la mañana y otros dos en la tarde, y, en simultáneo, se realizó un taller de Buenas Prácticas Cooperativas. El primer panel giró en torno a Políticas Públicas y participaron el director del Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (Inaes), Marcelo Collomb; el gerente de Acovi (Asociación de Cooperativas Vitivinícolas Argentinas), Nicolás Vicchi; Andrea Nallim; y Rodolfo Vargas Arizu.

Consultado por Soledad González, editora de la sección Economía de Los Andes y moderadora, Collomb detalló que el organismo se ha enfocado en el registro, la promoción y el control público; en este último caso, para evitar la desvirtuación de la figura de las cooperativas. Esto, porque indicó que deben nacer de la necesidad común, por la libre decisión de asociarse y no por una obligatoriedad impuesta desde el Estado.

Planteó que han revitalizado la relación con las provincias y están empezando a trabajar de manera conjunta para coordinar políticas públicas, y que apuntan a favorecer el desarrollo de estas entidades y, sobre todo, en desburocratizar e impulsar la innovación y la generación de proyectos que incorporen tecnología, apuntando al cooperativismo del futuro.

Asimismo, resaltó que desde el Gobierno nacional ven en el sector una gran oportunidad para el desarrollo y el crecimiento, en tanto haya capacitación, innovación, incorporación de tecnología y participación de los jóvenes.

El ministro Vargas Arizu resaltó que el cooperativismo está muy arraigado en Mendoza y consideró que, a medida que la macro se estabilice, el sector tiene características que marcan una diferencia. La principal, que, en una sociedad anónima, los accionistas no conocen profundamente el negocio, mientras en la cooperativa, todos los socios lo hacen y esto es muy enriquecedor. Pero resaltó que también es fundamental que tengan buenos resultados.

Indicó que el sector cooperativo es fundamental, por la atomización productiva: en la agricultura mendocina, cada productor tiene 7,8 hectáreas en promedio. Y quien tiene 5 o 10 hectáreas puede sostenerse, pero no solo, porque el campo demanda tecnología e innovación.

Nallim, por su parte, mencionó que también realizaron una tarea de control y relevamiento de las necesidades de las cooperativas de distintas ramas de actividad. Sumó que no siempre necesitan financiamiento para crecer -informó que hay una línea específica disponible en el Fondo para la Transformación y el Crecimiento-, y que el acompañamiento a veces implica la vinculación con algún otro organismo público o la academia, mentorías o capacitaciones en gestión.

Explicó que, más allá de las cooperativas tradicionales, vinculadas a la vitivinicultura y el campo, también son muy importantes las de servicios públicos -electricidad y agua- y las de vivienda, y que el año pasado se creó la primera cooperativa de economía del conocimiento en Mendoza.

Vicchi enumeró los temas que aborda Acovi, la entidad gremial empresaria vinculada a Fecovita (Federación de Cooperativas Vitivinícolas Argentinas), enfocada en la comercialización. Mencionó la capacitación, la formación de jóvenes dirigentes, la eficiencia hídrica -con una inversión de $400 millones en 2023 y 2024- , la planificación sucesoria para favorecer el arraigo. Y resaltó que no sólo señalan las problemáticas, sino que buscan proponer soluciones.

Planteó que a veces se asocia el modelo cooperativo con experiencias fallidas, cuando “sobreabunda lo bueno”. Por eso, invitó a poner en valor el cooperativismo, que se involucra con su comunidad y el desarrollo, porque no especula y se va a otro lado cuando las cosas se complican.

Casos de éxito, jóvenes y mujeres
El segundo de los paneles de la mañana analizó los sasos de éxito de empresas cooperativas. Participaron el licenciado en Cooperativismo y Mutualismo, Eduardo Fontela; la gerente de la Cooperativa de Provisión de Servicios Vitícolas y Enológicos (SVE), Mariana Beretta; Jerónimo Lagier, vicepresidente de la cooperativa de productores de yerba mate Piporé; y Ana Laura Sayago, de la Cooperativa Apícola Santiago del Estero, quien moderó la charla.

Lagier mencionó la importancia de la cohesión y el compromiso, y que, cuando se toma una decisión por mayoría, aun los que no tenían esa idea, deben acompañar. Sumó que se presentan muchos desafíos, pero con transparencia, honestidad y respeto se pueden sortear.

En una línea similar, Fontela señaló que las cooperativas, como método empresarial, tienen el acuerdo en su esencia, lo que no significa que todos piensen lo mismo, sino que se debe acordar.

Beretta explicó que SVE es una empresa de servicios que nació de Fecovita y es la única del sector vitivinícola que cosecha media hectárea de viñedos o pulveriza una hectárea en General Alvear. Pero también destacó que no sólo prestan un servicio a los pequeños y medianos productores, sino que son rentables, lo que les permite crecer.

Por la tarde se desarrollaron los otros dos paneles. Uno, de jóvenes en el sector cooperativo, vinculado con la tecnología, la innovación y la vitivinicultura; y otro de mujeres líderes en cooperativismo, con la experiencia del sector asegurador.

Fuente: Los Andes