Crisis económica: se triplicaron los cartoneros entre 2017 y 2019 en Rosario

El gabinete social de la intendenta Fein mostró ejemplos de cómo las variables macroeconómicas influyen en el territorio local. También cómo perjudica a los que menos tienen.

El gabinete social de la intendenta Fein mostró ejemplos de cómo las variables macroeconómicas influyen en el territorio local. También cómo perjudica a los que menos tienen.
El impacto de la crisis económica sigue mostrando indicadores sociales en la realidad rosarina. Ayer varios miembros del gabinete de la intendenta Mónica Fein detallaron señales y ejemplos del incremento de la pobreza y la indigencia.

En 2017 un relevamiento oficial indicó que había 260 cartoneros recorriendo las calles del centro. Ahora el número trepó a 700. Además, los operadores del municipio detectaron que se duplicó en el último año la cantidad de gente en situación de calle. El refugio de Grandoli 3460 aumentará sus camas para este invierno. Pasará de 35 a 60. “La situación en muy compleja”, dijeron los funcionarios.

Pobreza
Un 31,8 por ciento de pobreza (415 mil rosarinos) y un 12,8 por ciento de desocupación para el área metropolitana, entre otros factores negativos, explican el impacto en las familias rosarinas. Alta inflación, dólar por las nubes y pérdida del poder adquisitivo por la devaluación de los salarios.

Los integrantes del gabinete social (Laura Capilla, de Desarrollo Social; Leonardo Caruana, de Salud, Nicolás Gianelloni, de Economía Solidaria; y Germán Giró, de Producción) brindaron detalles, área por área, de los alcances de la crisis. Los números reflejan un efecto preocupante.

Caruana recordó que se han incoporado 42 mil nuevas historias clínicas a la red de salud pública. Pero además reveló que aumentó el pedido de medicamentos crónicos en un 15 por ciento. El mismo porcentaje que el Colegio de Farmacéuticos detectó en la caída en las ventas en sus locales adheridos.

Capilla indicó que se ha duplicado la ayuda social, con familias “nuevas” que ahora solicitan asistencia del Estado. En lo que respecta a la Tarjeta de Ciudadanía (para la compra de alimentos) aumentó la cantidad a 62 mil familias al incorporarse 5 mil nuevas. Y se sumaron jubilados como hecho novedoso. Se incrementó la ayuda para los 200 comedores comunitarios que funcionan en la ciudad, “porque ha aumentado la cantidad de platos y tienen lista de espera”.

Además, se duplicó la cantidad de jóvenes en el programa Nueva Oportunidad (de capacitación en oficios entre 16 y 30 años). El año pasado hubo 160 personas detectadas en situación de calle. Lo llamativo es que el 40 por ciento no tenía más de un año en circunstancia de vulnerabilidad y en su mayoría son jóvenes.

Recesión
Desde abril Argentina está en recesión. En Rosario, en agosto se notó el efecto. ¿Hay un escenario parecido a 2001?, le preguntaron. Capilla respondió: “En las barriadas hay hambre, hoy se piden alimentos”. Pero a diferencia de aquella crisis, los funcionarios explicaron que la red de dispositivos del Estado generó mecanismos más eficientes de contención territorial.

Fuente: Sin MOrdaza