Crisis en Mendoza: tras más de medio siglo cerró el típico café de calle Colón

Lo fundó un reconocido dirigente radical y se convirtió en un lugar “top” del centro mendocino. El lunes bajó las persianas.

Lo fundó un reconocido dirigente radical y se convirtió en un lugar “top” del centro mendocino. El lunes bajó las persianas.

Cerró el Café Ébano, un icono del microcentro mendocino. Cuentan que atendió 55 años y sus persianas bajas confirman que no continuará. La crisis económica de los últimos años se cobra así otro de los emblemas comerciales de Mendoza, tal como ocurriera con Rezagos de Ejército, a principios de este año.

Ubicado en calle Colón al 432 (aunque antes estuvo en un local a pocos metros de allí), el lugar supo constituirse en un clásico de esta vereda, que hoy luce plagada de locales afines y de otros rubros. Fue, además, verdadero bunker de un importante grupo de radicales. Aunque es difícil rastrear su historia, los memoriosos recuerdan que su fundador, a principios de la década del 70, fue Roberto Sosa Paiva, alias Ribi, un dirigente radical muy conocido.

Su principal característica, desde entonces fue que abría las 24 horas y que fue el primero de los cafés ubicados en la calle Colón. Era uno de los locales más “top” del microcentro mendocino.

“Siempre fue un lugar al que asistía ‘lo mejor’ de Mendoza. En aquella época había muy pocos negocios de ese tipo. Después cambió, fue pasando de mano en mano, y se empezó a venir abajo”, señaló Pablo, un asiduo del lugar.  Luego, el comercio pasó a manos de los dueños del local inmobiliario.

Según figura en el boletín oficial de finales de abril de 2000, el fondo de comercio estaba en manos de Fanny Muñoz y de María Eugenia Bordín, aunque fue esta última quien continuaría -al quedarse con el 100% del fondo- con el emprendimiento cafetero hasta 2006. Ese mismo año, también según el boletín oficial de aquel año, Bordín le transfiere el fondo de comercio a la firma Brunbord Sociedad Anónima. A estas alturas, el Ébano tenía su sede en uno de los salones, el número tres, del  edificio La Micela III.

Un robo mediático
El 23 de mayo del año pasado se supo que dos delincuentes habían asaltado el café y se habían llevado dinero de empleados y clientes. Sucedió a las 3 de la mañana y a raíz de esto el dueño, que no se identificaba, evaluaba abandonar la clásica modalidad de “abierto 24 horas”.

Al grito de “les robamos porque ustedes tienen trabajo”, los asaltantes sustrajeron las pertenencias de los cuatro clientes que estaban en el café y de los dos empleados. Uno de los trabajadores fue golpeado con un arma. Luego, clientes y empleados fueron encerrados en el depósito del local.

Finalmente, los malvivientes se llevaron alrededor de $ 5.000 de la recaudación y de la mercadería, y huyeron en un Chevrolet Meriva de uno de los clientes, que luego apareció quemado en el barrio Ferroviario de Maipú.

El último dueño
El último propietario del emprendimiento fue Flavio Fernández, quien lo compró en 2007. Él fue quien confirmó que el cierre se debe a la situación económica del país. “Se fue complicando todo y era imposible seguir con el pago de las expensas y los impuestos municipales”, reconoció a Los Andes el empresario.

Según contó Fernández, trabajaron junto a la firma Brunbord, a medias hasta 2012. Al romperse esta sociedad y a modo de indemnización de sus empleados llegaron a un acuerdo con Fernández para darles continuidad.

“David Cortés se hizo cargo del café desde 2012 hasta 2018. En julio del año pasado acordamos una prórroga de seis meses pero no se pudo levantar. Fue abrupto porque era algo entre nosotros y el administrador, pero se notaba que íbamos al cierre”, explicó Flavio, recordando que había mozos con 35 años de antigüedad.

Para terminar, el hombre señaló que si bien sabe que en el lugar se abrirá un nuevo café, desde la inmobiliaria que alquila el lugar confirmaron que la denominación “Ébano” pasará, con las anécdotas de una generación, a la historia.

Le dio el nombre a un grupo de radicales
Un grupo de radicales, muchos pertenecientes a Franja Morada, de Capital comenzó a juntarse desde 2005 en ese café y terminó siendo bautizado como “Grupo Ébano”.

“Nos empezamos a juntar porque estaba la pelea entre el iglesismo y  el cobismo”,decía el , hoy coordinador de Gabinete de Alfredo Cornejo, Andrés Peti Lombardi, a Los Andes, el 17 de junio de 2018.

Entre los integrantes del grupo están Pamela Verasay (senadora nacional), Patricio Poggio (concejal en Capital), Sergio Marinelli (titular de Irrigación), Alfredo Aciar (jefe de Gabinete del Ministerio de Economía, Infraestructura y Vivienda), Andrea Molina (jefa de Gabinete de Hacienda) y otros.

En tanto, el titular de Irrigación, Sergio Marinelli, asegura que el lugar le trae recuerdos porque fue el primer lugar donde militó. “No sólo tengo recuerdos políticos, tengo muchos de la juventud,”, señaló el funcionario provincial. Y agregó: “Era donde se vivía la militancia de una forma muy diferente a la de ahora. Era como una segunda casa, adonde uno iba a hablar. Allí corrían todas las noticias de boca en boca”.

El incendio de un local y una despedida que al final no fue

Un incendio de grandes proporciones destruyó ayer a la madrugada las instalaciones del conocido café Martínez del barrio Bombal, en Ciudad.  Las llamas en el local de España e Yrigoyen se desataron alrededor de la 1 de la mañana, detallaron fuentes policiales.

Alertados por una enorme columna de humo, vecinos llamaron al 911 y en pocos minutos dotaciones de bomberos y personal policial llegaron a la esquina siniestrada.  Tras horas de intenso trabajo, los bomberos lograron sofocar las llamas. Los daños dentro del local fueron prácticamente totales.

El Retortuño continúa abierto
A mediados de 2018 este y otros medios de comunicación anunciaban el cierre de El Retortuño, el espacio gastronómico y cultural de la calle Dorrego de Guaymallén, con 27 años de historia.

“Hoy, y muy a nuestro pesar, estamos pensando en el cierre. Si de expectativas se trata en muchos aspectos las superó. Pero, durante años , nuestros otros ingresos lo han apuntalado y lamentablemente no podemos sostenerlo más”, señalaba en aquella oportunidad Pocha Toriano, una de las dueñas.

Pero hoy la realidad es que el lugar permanece con las puertas abiertas. “Fue gracias a las gestiones de Diego Gareca y de Viviana Beinat, de la Secretaria de Cultura de la provincia. Ellos hicieron las gestiones para que continuemos y gestionaron un subsidio.”, señaló la mujer.

Cuando El Retortuño anunció su cierre, por las redes sociales, músicos, artistas plásticos, cantantes, bailarines, políticos, vecinos y clientes de todos los ámbitos expresaron su apoyo.

Por ejemplo, el músico Polo Martí escribio en las redes: “Sepan que desde esos primeros tiempos, en los que siempre estábamos allí, inaugurando un lugar mágico de maravillosos encuentros, siempre agradecimos su incansable tarea”. Sin dudas esas palabras y otras de distintos músicos y artistas, contribuyeron a evitar la clausura.

Fuente: Los Andes