Un desierto blanco en el norte

Las provincias de Jujuy y Salta comparten las Salinas Grandes, una gran paisaje blanco que enamora a quienes lo visitan.

Las provincias de Jujuy y Salta comparten las Salinas Grandes, una gran paisaje blanco que enamora a quienes lo visitan.

Ubicada a 190 kilómetros de San Salvador de Jujuy encontramos las Salinas Grandes. Como su nombre lo indica, son grandes, de hecho es el tercer salar más grande del mundo con nada menos que 12 mil hectáreas.

Es un lugar que vale la pena visitar, si te animas a ir sin guía turístico es algo que perfectamente se puede hacer sin correr ningún riesgo. Lo único que debes saber es que no cuenta con servicios de comida y bebida, por lo que hay que ir preparado.

Si vas a ir durante el día, la mejor opción, es ir bien temprano por la mañana, ya que a la tarde el sol es muy fuerte. Para los más aventureros (y los que se animen) también es posible visitarlo durante la noche.

La mejor época del año para ir es cuando hay lluvia, porque se produce un efecto espectacular, en donde el suelo se convierte en un espejo, y el horizonte se pierde.

Ya estando en el salar, lo mejor es acercarse a algún artesano de la zona para que te cuente un poco de la historia de este lugar y, porque no, que te muestre la forma de extracción. Al terminar todo el recorrido, se pueden llevar recuerdos de sal esculpidos por los mismos artesanos.

Cuando veas una pileta de agua no dudes en meter la mano, o quizás caminar descalzo, quedarás todo blanco, lleno de sal.

Aviso a tener en cuenta

El sol, debido a la altura y a que no hay ningún lugar en donde resguardarse, es muy fuerte. Además los rayos reflejan en el piso blanco. Por eso es recomendable ir preparado con gorro, lentes y guante, para evitar quemaduras.

Fuente: La Voz