El bello paraje de San Juan hecho de barro que atrae con sus paisajes y su mística
Cerca del Paso Agua Negra se encuentra este pintoresco pueblo sanjuanino. Un destino con mucha onda al que llegan deportistas de todo el mundo.
Cerca del Paso Agua Negra se encuentra este pintoresco pueblo sanjuanino. Un destino con mucha onda al que llegan deportistas de todo el mundo.
Cada pueblo tiene su magia, aquello que lo destaca del resto de los destinos y enamora a los visitantes. En San Juan, un tranquilo paraje de paisajes imponentes se ha convertido en los últimos años en uno de los principales atractivos turísticos de la provincia y en el sitio que rinde culto a un deporte en auge.
La belleza del entorno en el que se encuentra el paraje y la joya natural que se esconde en él, un embalse con agua de deshielo de color verde azulado, han hecho que este pequeño destino sea el más buscado por aquellos que buscan pasar unos días de desconexión, pero también los amantes de los deportes a vela. Se trata de Cuesta del Viento, situado a 200 kilómetros de la Ciudad de San Juan, muy cerca del paso a Chile Agua Negra, en la localidad de Rodeo, departamento de Iglesia.
Como su nombre lo indica, la fuerza del viento que sopla en el dique hace que este sea uno de los más destacados en el mundo para practicar kitesurf, windsurf, y otros deportes de vela. El embalse, se encuentra emplazado sobre la unión del Río Blanco y el Arroyo Iglesia, donde nace el río Jáchal.
Algo que llama poderosamente la atención de los visitantes es que este embalse parece ser dos diques diferentes durante el día. En las primeras horas de la mañana amanece planchado como si fuese un espejo, es perfecto para quienes disfrutan de hacer kayak, SUP o pescar. Sin embargo, en las siestas, cuando muchos duermen en verano por el agobiante calor, el viento comienza a soplar con fuerza, un fenómeno meteorológico pocas veces visto en Argentina.
El tranquilo paraje de barro
Cuesta del Viento tiene una mística especial. Rodeado de hermosos paisajes, este paraje se ubica en el departamento de Iglesia, un majestuoso desierto de altura resguardado por la Cordillera de Los Andes.
Esta aldea es uno de los sitios más pintorescos de San Juan. Sus calles son de tierra y muy angostas, su flora autóctona permanece casi intacta, quienes construyen en el lugar buscan preservar el entorno natural.
Para generar el menor impacto posible en la naturaleza, está prácticamente construido con barro, eso es lo que le da su toque mágico. Casas de techos bajos, de un solo piso y con galerías que miran hacia la montaña, son las que más abundan, la mayoría hechas con adobe (barro, paja y guano de cabra, vaca o caballo).
Algunas de los tapiales pueden tener hasta 300 años. En Angualasto, por ejemplo, sitio arqueológico que data del 6.000 A.C. ubicado muy cerca del pueblo, se han encontrado construcciones de 600 años que todavía permanecen en pie.
Cuesta del Viento es muy tranquilo, en especial en las estaciones más frías, allí viven muy pocos habitantes todo el año. Muchos de ellos con emprendimientos turísticos, que reciben a visitantes de todo el país y también de otras partes del mundo, en especial aquellos que viajan en busca del viento para desplegar sus velas y practicar kitesurf.
Fue a partir del año 2.000 que este paraje se incluyó en el circuito turístico de San Juan. En ese momento comienzan a arribar a este paraje los primeros navegantes atraídos por las fuertes ráfagas que soplaban en el dique Cuesta del Viento.
El viento sopla prácticamente todos los días, gracias a esto cada año se desarrolla en Cuesta del Viento el evento deportivo de kitesurf más importante de Argentina, en el cual compiten riders internacionales. La cita, por lo general, es el mes de marzo; en esa fecha aproximadamente unas 6.000 y 10.000 personas visitan el destino y todo el pueblo es una verdadera fiesta.
Otros atractivos turísticos
Llegar hasta Iglesia es un espectáculo paisajístico. Cada kilómetro que se avanza es una muestra de la generosa geografía sanjuanina, valles infinitos, imponentes cerros, barreales y alamedas son algunos de los elementos que componen el paisaje.
Estos paisajes son el hogar de innumerables atractivos turísticos, entre los cuales se encuentran -además del dique Cuesta del Viento-, las hermosas formas que adopta la naturaleza en la precordillera de Los Andes, como Los Hongos de Tocota, figuras erosionadas.
Más allá de ser la meca del kitesurf, Iglesia es el sitio ideal para quienes viajan en busca de adrenalina. Su imponente paisaje permite practicar una gran variedad de actividades deportivas y recreativas: escaladas, trekking, parapente en las montañas, cabalgatas, entre otras.
FUente: MDZ
