El “caso Chascomús” aborta la división de otros distritos

EN 2009, CUANDO LA LEGISLATURA DEBATÍA LA DIVISIÓN DE LEZAMA DE CHASCOMÚS, VECINOS RECLAMABAN EN LAS CALLES DE NUESTRA CIUDAD A FAVOR Y EN CONTRA DE LA LEY

EN 2009, CUANDO LA LEGISLATURA DEBATÍA LA DIVISIÓN DE LEZAMA DE CHASCOMÚS, VECINOS RECLAMABAN EN LAS CALLES DE NUESTRA CIUDAD A FAVOR Y EN CONTRA DE LA LEY

La difícil situación económica del municipio desalienta otros reclamos de autonomía

La acuciante situación económica que atraviesa el municipio de Chascomús, luego de su división con Lezama, desalienta por estos días las posibilidades de reimpulsar los reclamos de creación de nuevos distritos en la Provincia.

En el marco de lo que consideró una situación de “turbulencia económica”, la semana pasada el intendente chascomunense, Juan Gobbi, se quejó de la mala herencia que le dejó a su distrito la división de Lezama, al explicar las razones que lo llevaron a decretar la emergencia económica.

El jefe comunal había atribuido la situación estrictamente a esa escisión, votada por ley en 2009, pero desaconsejada por los estudios de viabilidad que había realizado la facultad de Ciencias Económicas de la UNLP. “Lezama se creó a expensas de Chascomús”, sentenció el jefe comunal.

Se refería puntualmente a la baja de los ingresos y de los índices de coparticipación que provocó la separación de esa localidad de la órbita de Chascomús.

Cuando esa división todavía se analizaba, los especialistas afirmaban que provocaría un fuerte impacto en las finanzas municipales, con una consecuente pérdida de recursos y de puntos de la coparticipación, por la fórmula en la que se calcula el coeficiente para su repartición. No se equivocaron, según las estimaciones de Gobbi, quien lamentó lo que considera “disparidades” en el reparto de los recursos, fundamentalmente a nivel tributario, que dejó a Chascomús más debilitado que antes.

Varios proyectos

En los últimos quince años se presentaron en la Cámara de Diputados más de diez proyectos de ley para la división de municipios bonaerenses, que fueron perdiendo estado parlamentario ante la falta de avance, pero que no por eso sus autores abandonaron una repetida insistencia por volver a presentarlos.

Los municipios con más intenciones de ser divididos fueron La Matanza, Lomas de Zamora, Almirante Brown, Moreno, Merlo, y Necochea.

En este último caso, el proyecto del senador del GEN Omar Foglia para la creación del municipio de Quequén, con una parte del territorio de Necochea y de Lobería, aún está vigente y espera ser analizado en comisión.

El resto de las iniciativas, que apuntan a dividir distritos del Conurbano, perdieron vigencia.

La misma suerte corrió en Diputados un proyecto que en 2011 había alcanzado la media sanción del Senado para ofrecer una “ley marco” a la creación de nuevos distritos, al ver las consecuencias que en ese momento ya se evidenciaban de la creación de Lezama.

La iniciativa establecía como requisitos para los pueblos que quisieran convertirse en municipios que tuvieran una clara identificación de límites, detalles y características institucionales, un resumen de antecedentes históricos y una población no menor a 60 mil habitantes para el Conurbano y 10 mil para el interior.

Luego de la división de Chascomús, el gobierno bonaerense no mostró intenciones de impulsar nuevas divisiones, y muchas de las movidas vecinales en ese sentido fueron perdiendo fuerza. No obstante, las asambleas de Quequén continuaron insistiendo con la separación de Necochea con cortes de ruta y distintos tipos de protestas.

Reimpulso del massismo

Quien reflotó recientemente la idea de las creaciones de nuevos municipios fue el intendente de San Fernando, Luis Andreotti. Enmarcado en el Frente Renovador, opinó los municipios que, en el Conurbano, “deberían tender a ser más chicos”.

En ese sentido, se refirió especialmente a La Matanza y Lomas de Zamora, así como también a Merlo y Moreno, distritos que consideró “muy grandes” para que “la atención al vecino sea cercana”

Fuente: El Día