El derecho a comer: un plan busca sacar de la indigencia a 90 mil familias de Santa Fe
Una ONG elaboró una propuesta para cubrir la brecha pendiente en la canasta alimentaria básica de las personas indigentes de toda la provincia. Sería mediante una tarjeta que se destinaría exclusivamente a la compra de alimentos.
Una ONG elaboró una propuesta para cubrir la brecha pendiente en la canasta alimentaria básica de las personas indigentes de toda la provincia. Sería mediante una tarjeta que se destinaría exclusivamente a la compra de alimentos.
El «Efecto Indec», que se dio luego de que se conocieran los crudos datos de la pobreza e indigencia en los grandes conglomerados de Santa Fe, puso a la sociedad de cara al flagelo más doloroso: el hambre. Y el Movimiento Los Sin Techo (MLST) ya venía desde algunos meses elaborando una propuesta que abarca al doloroso universo de las personas indigentes, allí donde no hay garantías de comer todos los días.
El proyecto consiste en facilitar una tarjeta para la compra exclusiva de alimentos a las personas en condición de indigencia (en toda la provincia el MLST estima ese número en unas 90 mil familias), siempre que sean titulares de la Asignación Universal por Hijo (AUH). La propuesta de distribución de cada tarjeta está estipulada en una escala (ver Relacionada).
Todo está medido en cálculos matemáticos: el límite económico de la canasta básica alimentaria que determina que una familia es indigente es de 27.060 pesos. Y la idea es compensar en esa tarjeta lo que falta para cubrir el «derecho a comer», que el MLST calcula en unos 13 mil pesos. Este monto es la brecha a complementar para que esa familia indigente, que padece una vida de supervivencia, pueda alimentarse todos los días, con los parámetros proteicos y calóricos saludables necesarios.
«Nuestra preocupación central es la indigencia. Estamos proponiendo cubrir la brecha alimentaria de cada persona que está en esta condición. Tenemos esta obsesión; en 2023 conmemoraremos los 450 años de la fundación de Santa Fe. Y el objetivo los Sin Techo es celebrar esa fecha que no haya más indigentes en la ciudad, o que el número esté reducido al mínimo de su expresión», dicen en diálogo con El Litoral el Ing. José Ambrosino, José Luis «Colo» Salazar y Jorge Jourdan, referentes del Movimiento.
Naciones Unidas plantea como el gran objetivo de la humanidad para este milenio erradicar no la pobreza, sino la pobreza extrema, que es la indigencia. «Y para superar esa indigencia, la gente en tal condición debe tener un ingreso seguro para alimentación, que sólo se puede garantizar con una tarjeta alimentaria y con la cual, sumada al ingreso por AUH, podría cubrir ese derecho humano básico: comer», coinciden.
Líneas económicas
La línea de indigencia y la de la pobreza se miden por variables económicas. «En este momento, la sumatoria del costo de todos los alimentos para una familia tipo (cuatro integrantes) en Santa Fe está calculado por nosotros en 27.060 pesos: eso es lo que una familia en situación de indigencia necesita por mes, solamente en comida», explica Ambrosino.
La línea de la canasta básica alimentaria (CBA-indigencia) es de 29.060 pesos, y la línea de la Canasta Básica Total (CBT-pobreza) es de 70.615 pesos para un grupo familiar (4 integrantes). «El último número incluye, además de la comida, gastos en salud, movilidad, educación, ropa, servicios, etcétera», añaden los referentes. En limpio, para no ser pobre una familia debe superar los 70 mil pesos de ingresos mensuales.
Con todo, la tarjeta alimentaria sería recibida por los titulares que reciben la AUH en la provincia de Santa Fe, que en el 98% de los casos es la mujer. En total, habría unas 193 mil tarjetas de ingreso alimentario: «Con ese número se llegaría a la totalidad de las familias indigentes, más un sector pobre que está en el límite de entrar de la indigencia a la pobreza, para cubrir sólo la alimentación», añaden.
El contexto
Hoy hay en la provincia 3.600.000 habitantes santafesinos. En números globales, según el Indec el 10% es indigente: así, hay 360.000 personas en esa condición. Si este número se divide por cuatro (integrantes de una familia tipo), hay unas 90 mil familias en condición de indigencia. Asimismo, en el Gran Santa Fe son 12.700 familias en situación de indigentes, y en la ciudad capital unas 10 mil.
Con todo ello, «nuestra propuesta es llegar con esta tarjeta de refuerzo alimentario a quienes perciben la AUH y la Tarjeta Alimentar Nación, porque si al beneficio de ambas se le suma el monto de esta tarjeta, se les garantiza a esas personas la alimentación», precisa Ambrosino.
Salazar dimensiona en términos sociales el objetivo del plan. «Esos 13 mil pesos que denominamos la brecha a cubrir serían para comer, nada más. Y para ‘meter’ a los indigentes en la línea de pobreza? Es así de cruda la situación; pero tenemos que rescatar a la gente indigente del acto de revolver un basural para llevarse algo al estómago. Es una cuestión de justicia, de empezar a revertir la inequidad más dura».
Ambrosino cita un estudio de 2019 sobre 12 barrios pobres de la ciudad, donde se detectó un 59,1% de indigencia y más del 90% de pobreza. «En un relevamiento propio medimos estas variables en gran parte del cordón oeste de la ciudad: vinos una indigencia del 75%. Hablamos de franjas sociales donde cunde la enfermedad, el hacinamiento, la falta de acceso a servicios, a la educación y a la salud», dice.
Nada más alejado que dar plata en efectivo, no: los referentes del MLST aclaran que esta tarjeta estaría destinada a la adquisición de comida y así cubrir la brecha alimentaria. «No queremos decir que estaríamos todos contentos si se cubren estos 27.060 pesos para comer, pero se lograría ‘salvar’ el piso básico alimentario», insiste Jourdan en el espíritu del proyecto.
«La gente podría pensar: ‘¿Por qué mejor no le dan trabajo a la gente?’ Pero, ¿quién se opondría a eso? ¡La persona indigente quisiera trabajar!», enfatiza Salazar. «Hablamos de personas que están en condiciones de no saber si podrán comer un día: es la pobreza más estructural que uno se puede imaginar, y lo que vemos en los barrios», da el duro diagnóstico.
Billetera
Los referentes ponen un ejemplo: la Billetera Santa Fe, aplicación del gobierno provincial de gran aceptación social que permite un reintegro del 30% a los usuarios. Hay en este momento 850 mil adherentes. Cada usuario se ahorra 5 mil pesos, y una pareja 10 mil pesos. «Esta experiencia está muy bien; todos usamos Billetera, da reactivación y consumo. Pero, ¿por qué no inyectar algo parecido a la familia indigente con una tarjeta alimentaria?», interroga Ambrosino.
«¿Y cómo se financiaría ese volumen dinerario a cubrir la brecha alimentaria de las personas indigentes», preguntó El Litoral. «No tenemos una respuesta nosotros, eso correría por parte del Estado. Pero podría financiarse como se financia la Billetera Santa Fe. Porque le estaríamos dando a los que están realmente abajo lo mismo que se le está dando a los que están un poco más arriba», coinciden Jordan y Ambrosino.
«Vemos que los gobiernos actuales tienen sensibilidad social. La relación que mantenemos con los distintos estamentos estatales es excelente. Esperamos que se oiga este proyecto, que sólo busca algo más de equidad en los sectores vulnerables en extremo», cierran los referentes.
ESCALAS
«Indigencia: cómo iniciar su superación mediante un camino factible e impostergable en la provincia de Santa Fe», se llama el proyecto elaborado por el MLST. Dice el documento: «Con una inyección de 13 mil pesos en alimentos mediante una Tarjeta Alimentaria Santa Fe, todos los indigentes que cobran la AUH pasan a superar la Canasta Básica Alimentaria (CBA) y así saldrían de la indigencia».
La propuesta establece escalas sobre la brecha a cubrir para llegar a esa canasta alimentaria. Así:
-En una familia de dos adultos con un hijo/a de 6 años (con una CBA de 22.664,92 pesos, y que cobra una AUH y Alimentar Nación), queda una brecha alimentaria de 12.636,12 pesos a cubrir con la tarjeta alimentaria propuesta;
-En una familia de dos adultos más un hijo de 6 años y otro de 8 años, la CBA es de 29.060 pesos. Con dos ingresos por AUH y Alimentar Nación, queda una brecha alimentaria de 12.002,40 pesos a cubrir con la tarjeta alimentaria propuesta;
-En una familia de dos adultos más un hijo de 6, otro de 8 años y un tercero de 12 años, la CBA es de 35.643,17 pesos. Con tres ingresos por AUH y Alimentar Nación, queda una brecha alimentaria de 11.556,77 pesos a cubrir con la tarjeta alimentaria propuesta.
«Estas familias que ejemplificamos cubren el 93% de las familias que reciben la AUH, otro 5% lo cubren familias de 4 hijos cuya brecha es de 12.700 pesos, y el 2% restante familias de 5 hijos cuya brecha es de 12.151 pesos. Para darle sustentabilidad al monto que tendría que cubrir esa brecha alimentaria en el tiempo, debiera ser actualizado con el Índice de Inflación Mensual del rubro ‘Alimentos y Bebidas’ suministrado por el IPEC», cierran desde el MLST.
«Nuestra preocupación central es la indigencia. Estamos proponiendo cubrir la brecha alimentaria de cada persona que está en esta condición. Tenemos esta obsesión; en 2023 conmemoraremos los 450 años de la fundación de Santa Fe. Y el objetivo los Sin Techo es celebrar esa fecha que no haya más indigentes en la ciudad, o que el número esté reducido al mínimo de su expresión»
