El Metrobús fue un problema más que una solución en Neuquén

Entre la reducción de la circulación, la falta de inversión y los inconvenientes de los frentistas, la obra no tuvo los resultados imaginados cuando se planificó.

Entre la reducción de la circulación, la falta de inversión y los inconvenientes de los frentistas, la obra no tuvo los resultados imaginados cuando se planificó.

La pandemia de coronavirus y la cuarentena que redujo al mínimo la movilidad urbana se tradujeron en un duro golpe para la obra del Metrobús, que fue concebida como un carril exclusivo para agilizar el tránsito del transporte público de pasajeros en una avenida que, se preveía, iba a estar atestada de autos particulares, taxis y motos. Tras el cambio de gestión y con la llegada del virus, el escenario imaginado por la gestión de Horacio Quiroga se modificó, y hoy son pocas las unidades que circulan por esa obra que, para muchos, es más una molestia que una solución.

«Es una obra que se hizo y que ya está», dijo el secretario de Coordinación e Infraestructura de la Municipalidad, Alejandro Nicola, sobre la presencia de Metrobús sobre la Avenida del Trabajador. Mientras que la gestión municipal sólo analiza modificaciones para reforzar las paradas frente a los constantes actos de vandalismo , muchos usuarios de colectivos y frentistas se quejan por un carril exclusivo por donde, se estima, pasa un colectivo cada 10 minutos.
Aunque esta calle no cumple la función que se le había asignado al planificar la obra, Nicola aseguró que la pandemia afectó en gran medida el uso del Metrobús y agregó que la vuelta a la normalidad permitir reevaluar las necesidades del Metrobús y de la movilidad urbana en general para toda la ciudad, que tendrá una configuración distinta cuando todas las actividades vuelvan a ser presenciales y eso derive en más traslados de los neuquinos.

Aclaró que tanto la Universidad Nacional del Comahue (UNCo) como la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) trabajan en un estudio técnico para evaluar el sistema de transporte público de pasajeros en Neuquén y así proponer mejoras que apunten a contar un servicio más eficiente. Aunque los técnicos aún no llegaron a las conclusiones finales, se buscan alternativas para mejorar la experiencia de los usuarios a bordo de los colectivos.

Según informa el portal ¿Cuándo pasa?, por la traza del Metrobus, sobre Avenida del Trabajador, pasan las líneas 12, 13, 14, 4, 516, 5a, 5b, 7a, 7b. Sin embargo, los usuarios del servicio señalan que el servicio tiene pocas frecuencias, por lo que no son numerosos los coches que transitan por ese sector.

En la vereda contraria
Por su parte, Marcelo Bermúdez, concejal del PRO y ex funcionario de la gestión de Horacio Quiroga en la Municipalidad de Neuquén, defendió la obra del Metrobús, inaugurada durante la pasada administración, y agregó que la falta de uso de ese carril exclusivo responde a la ausencia de inversiones en el sistema público de transporte. «El Metrobús es inútil si dejan caer el sistema de colectivos», aseguró.

Bermúdez defendió esta obra pública y aclaró que el Metrobús llevó asfalto, cordón cuneta e iluminación LED a una arteria principal de la ciudad que no tenía aún pavimento. Para él, esas mejoras, sumadas a la posibilidad de llegar al centro en sólo 15 minutos en colectivo, revalorizaron las propiedades del sector, por lo que negó la postura de los frentistas sobre la falta de estacionamiento.

«Si le preguntás a los colectiveros, te van a decir que es mucho más ágil y eficiente manejar por un carril exclusivo que compartir la calle con bicicletas, taxis y autos», dijo Bermúdez, aunque agregó que «si tenés un solo colectivo circulando es inútil tener un Metrobús». Por eso, aclaró que el verdadero problema es que «dejaron caer el sistema de transporte».

El concejal aseguró que cuando terminó la gestión de Quiroga, por la ciudad circulaban 110 unidades de Indalo y 25 de Pehuenche. Hoy, en cambio, los colectivos de Indalo en circulación son apenas 80. «No es una excusa la pandemia, porque con más colectivos la gente viajaría menos apiñada», expresó.

Aclaró que la empresa lleva dos años sin invertir, y la prórroga de su contrato por otro año y medio desmotiva aún más la inversión para la compañía. Por eso, aclaró que es necesario fortalecer el sistema de transporte público con más unidades y más frecuencias.

«Es muy bueno continuar las obras públicas de Pechi, pero a la vez es muy fácil porque ya tenés los proyectos y las licitaciones armadas», dijo y agregó: «Otra cosa es imaginarse la ciudad que viene, y no se están imaginando la ciudad que viene; por eso desvalorizan esta obra pública».

Casas desvalorizadas
Agentes inmobiliarios consultados por LMNeuquén aseguraron que la obra del Metrobús es un gran detractor en la valuación de una propiedad. «Las propiedades bajaron mucho en dólares y lo más difícil de vender hoy es una casa», explicaron. «Teniendo en cuenta que ese sector sólo tiene casas bajas y que la falta de estacionamiento obliga a los propietarios a subir el auto a la vereda, las propiedades frente al Metrobús bajaron más que las ubicadas en otros barrios», agregaron.

A este factor también se suman las complicaciones de los comerciantes, que se nutrían con el paso de vehículos por la Avenida del Trabajador. Según informó LMNeuquén en 2019, los negocios han perdido un 60% de las ventas desde la inauguración de la obra, ya que no contaban con la clientela que estacionaba el auto para comprar algo de paso hacia otro barrio de la ciudad. Por eso, el intendente Mariano Gaido dispuso ese año una serie de beneficios impositivos para los locales ubicados en esa calle.

Fuente: La Mañana Neuquén