El norte santafesino, jaqueado por las intensas lluvias

Tras ocho semanas de lluvias el anegamiento de los terrenos y la sobresaturación de los suelos frenaron los procesos de siembra y cosecha.

Tras ocho semanas de lluvias el anegamiento de los terrenos y la sobresaturación de los suelos frenaron los procesos de siembra y cosecha.

Los departamentos más afectados son 9 de Julio, Vera y General Obligado, a los que se sumó San Cristóbal. El fenómeno produjo el anegamiento de extensas zonas.

 

Las intensas lluvias que desde el mes de diciembre azotan al norte provincial pusieron en estado de alerta permanente a pobladores y autoridades santafesinas. El fenómeno climatológico que produjo la caída de mucha más agua de la que generalmente registran las marcas en esta época del año, provocaron el anegamiento de extensas zonas productivas y hay casos de parajes aislados debido a la intransitabilidad de los caminos rurales. Los departamentos más afectados son 9 de Julio, Vera y General Obligado y en las últimas 72 horas la situación se extendió al departamento San Cristóbal. El pronóstico para los próximos días prevé más precipitaciones y desde el gobierno santafesino se analiza declarar la emergencia hídrica.

Ante la gravedad de la situación, las autoridades provinciales realizaron desde el fin de semana incursiones en las zonas más afectadas, para lo que contaron con dos helicópteros ?uno de la provincia y otro del Ejército- con los que se desarrollaron tareas de aprovisionamiento y relevamientos sanitarios.

En los vuelos de reconocimiento participó el secretario de Protección Civil, Marcos Escajadillo, quien indicó que en primer momento se realizaron «dos sobrevuelos a las zonas afectadas para tomar contacto con los vecinos, que si bien estaban incomunicados contaban con provisiones, pero las nuevas lluvias hacen necesario la participación de los distintos estamentos provinciales de Desarrollo Social, Salud, Aguas, y Seguridad para atender los requerimientos de los afectados».

Vera, castigado. El departamento Vera es uno de los más vulnerados, específicamente los parajes Fortín Charrúa, y en el Paraje 70-800 y hacia allí fueron trasladados grupos electrógenos para impedir que se corte la cadena de frío en los medicamentos y está previsto que, de seguir las lluvias, la asistencia seguirá por vía aérea.

En algunos lugares, como en Reconquista, ya cayeron más de mil milímetros de agua en lo que va de diciembre y enero, lo que provocó que las napas suban y se sature la capacidad del suelo para absorber las precipitaciones. Entretanto, el calor y la humedad del ambiente pronostican que habrá más lluvias.

Respecto del impacto que la realidad climática generará en los sectores productivos, el Ministerio de la Producción está haciendo una evaluación para determinar qué medidas se implementarán para aliviar la situación, pero en primera instancia lo que se está haciendo es asistir a las poblaciones aisladas.

Emergencia hídrica.En declaraciones radiales durante la mañana de ayer, el ministro de la Producción de Santa Fe, Carlos Fascendini, afirmó que «la cantidad de milímetros que cayeron en los últimos 45 días, en la zona de Vera, San Javier, y General Obligado, perjudica los cultivos y la ganadería», y destacó que junto con el INTA analizan las zonas a declarar en emergencia a la brevedad, posiblemente durante la próxima semana.

Desde la Bolsa de Comercio de Santa Fe y el Ministerio de la Producción se aseguró que tras ocho semanas de lluvias «el anegamiento de los terrenos y la sobresaturación de los suelos frenaron los procesos de siembra y cosecha».

Específicamente están detenidos los procesos de siembra de soja de segunda, algodón y sorgo y de cosecha del girasol. En cuanto a los sembrados de arroz se indicó que «las abundantes precipitaciones causaron un gran aumento en los niveles de desagüe de Pájaro Blanco y el arroyo Los Saladillos, que en los últimos días desbordaron hacia los lotes de arroz aledaños a su cauce, con probabilidad de pérdida total de los mismos. Todavía no se pueden cuantificar los daños, ya que queda supeditado a las condiciones futuras. Se produjeron cortes eventuales en la ruta provincial Nº 1 por el exceso de agua en los canales de desagüe».

En tanto, la crecida del río Paraná está complicando la ganadería en algunas zonas de la provincia. «En cualquier momento van a tener que sacar a los animales de las zonas bajas y las islas. Se viene un año complicado para el centro-norte provincial», manifestó Fascendini.

Fuente: La Capital, Rosario