El partido de López Obrador le arrebató al PRI el estratégico Estado de México

"Han sido largos 100 años de corrupción, pero los tiempos cambian y el pueblo se unió y venció", dijo Gómez en su discurso luego de las elecciones del domingo.

«Han sido largos 100 años de corrupción, pero los tiempos cambian y el pueblo se unió y venció», dijo Gómez en su discurso luego de las elecciones del domingo.

El Movimiento de Renovación Nacional (Morena), que lidera el presidente Andrés Manuel López Obrador, consiguió un éxito rotundo en las elecciones celebradas en el Estado de México, el más popular del país y ahora exbastión electoral del Partido Revolucionario Institucional (PRI). De acuerdo al conteo rápido del Instituto Nacional Electoral, la candidata a gobernadora del oficialista Morena, Delfina Gómez, le sacó ocho puntos de ventaja a su rival del PRI, Alejandra del Moral. El tradicional partido de derecha consiguió en cambio una victoria en el otro estado en juego el domingo, el norteño Coahuila.

«El pueblo se unió y venció»

«La transformación comienza hoy en el Estado de México, gracias a todas, todes y todos. Tu voto no solo marca un parteaguas, sino que trae la esperanza a nuestra tierra», dijo Gómez en su discurso tras las elecciones. «Han sido largos 100 años de corrupción, pero los tiempos cambian y el pueblo se unió y venció. Llegó el fin de esos 100 años de oscuridad y maltrato, comienza una nueva historia en el Estado de México», aseguró la maestra de primaria de Texcoco que antes se convirtió en alcaldesa, diputada federal, senadora y secretaria de Educación Pública.

En la otra vereda, del Moral reconoció en un mensaje a medios que «los resultados preliminares no la favorecen», con lo que tácitamente reconoció el triunfo de Gómez. «Saludo a la maestra Delfina Gómez Álvarez que será la próxima gobernadora del Estado de México y le deseo todo el éxito. En democracia para poder ganar hay que saber perder», agregó la candidata del PRI.

En conferencia de prensa, la presidenta del Instituto Electoral del Estado de México, Amalia Pulido, dijo que la participación ciudadana fue de entre un 48,7 y un 50,2 por ciento. Este estado es uno de los más violentos del país, con alta tasa de homicidios y desapariciones en sus localidades más pobres, agraviadas además por la impunidad y corrupción de sus autoridades, pero también alberga grandes industrias (Nestlé, Ford) y atractivos turísticos como las ruinas prehispánicas de Teotihuacán. Tiene 17 millones de habitantes y un peso económico equivalente al 9,1 por ciento del PBI nacional.

Avance del oficialismo
El Morena, que ya gobierna solo o en alianza en 22 de los 32 estados mexicanos, afianza con este resultado su por ahora imbatible liderazgo de cara a las presidenciales del año próximo. En esta elección le arrebata además al otrora hegemónico PRI su mayor baluarte electoral, que gobernó ininterrumpidamente por 94 años. El PRI gobernó México y todos sus estados durante siete décadas del siglo XX, hasta el 2000, y volvió a retomar las riendas del país en el sexenio 2012-2018 con el mandato de Enrique Peña Nieto, antecesor de López Obrador.

El domingo también se celebraron elecciones en el estado de Coahuila, limítrofe con Estados Unidos, donde se votó por un nuevo gobernador y 25 legisladores del Parlamento local. Manolo Jiménez fue el representante de la Alianza Ciudadana por la Seguridad, integrada por los partidos PRI, Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD), quien superó por más de 30 puntos porcentuales a Armando Guadiana, candidato de Morena, su principal adversario.

Sin problemas, aunque con retrasos en la instalación y apertura de algunas mesas de votación, filas nutridas e incidentes menores, la jornada electoral se desarrolló en el Estado de México y Coahuila, donde Morena denunció el presunto secuestro de dirigentes. Estos comicios del domingo fueron el último obstáculo que los partidos políticos sortearon en México antes de definir sus candidatos rumbo a la sucesión presidencial de 2024 de la que partirá como favorito el candidato que postule Morena, mientras la oposición no reacciona y queda un tanto aturdida con el duro golpe sufrido el fin de semana.

«No va a haber dedazo»
Los festejos del Morena y la proyección electoral a nivel nacional de los resultados, sin embargo, amenazan también con atizar la fuerte disputa al interior de la formación progresista por quién será el candidato presidencial que compita para suceder a AMLO, una contienda que por ahora muestra dos claros protagonistas: la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, y el canciller, Marcelo Ebrard.

López Obrador dijo este lunes que la decisión sobre quién será el candidato de Morena se resolverá de manera democrática. «No va a haber dedazo. Va a ser la gente, van a ser los ciudadanos», subrayó desde el atril de Palacio Nacional. «Estamos a un año de la elección presidencial del 2024″, dijo el mandatario de izquierda, quien exhortó a «afianzar la democracia» de cara al posible estallido de «medios de manipulación» y «los pactos de las cúpulas económicas».

López Obrador también aprovechó su rueda de prensa matutina para felicitar a los ganadores de las elecciones en Coahuila y Estado de México, al destacar que en los comicios se vio una «pluralidad» que significa la «representación de todo el pueblo». El líder progresista sostuvo que a un año de las elecciones presidenciales lo importante es «afianzar la democracia, no solo como sistema político o como forma de gobierno, sino como forma de vida».

Fuente: Página 12