En Orán continúan sin servicios
El agua es turbia y sin presión, el servicio eléctrico es intermitente pero no hay desabastecimiento.
La situación de los vecinos de Orán aún está lejos de normalizarse. El peligro de que el puente carretero ubicado en la ruta 50 sobre el río Colorado sea arrastrado por la corriente está latente. Por el momento se permite el paso solo de vehículos livianos. En el caso de camiones, pasan los que transportan mercaderías, agua y combustible, alternando una mano por vez y de a un solo vehículo. Los pasajeros de los ómnibus deben descender y cruzar el puente caminando.
A esto se suma que los despojos del puente ferroviario fueron a encallar en las bases del viejo puente vial por lo que se están acumulando sedimentos que en cualquier momento pueden hacerlo ceder. Hay que recordar que la cañería que transporta gas domiciliario a Orán y Pichanal pasa por el costado lateral del puente por lo que la empresa Gasnor declaró el estado de alerta.
En cuanto a los servicios, Orán dispone de electricidad de manera intermitente. Los vecinos informaron que recibieron un comunicado de Edesa aconsejando el uso racional de la energía para evitar los cortes selectivos.
La electricidad también afecta el servicio de agua. Según informaron las autoridades, el líquido elemento volverá a la normalidad cuando se regularice la energía eléctrica ya que dependen del funcionamiento de las bombas. Sin embargo, este no es el único problema, ya que los filtros de los tanques están obstruidos por tierra y arena que arrastra la corriente. Eso fuerza el trabajo de las bombas, el agua es turbia y tiene poca presión, por esto no sube a los tanques de las casas.
Aislados
Los parajes de Los Naranjos y Río Blanquito siguen aislados, aunque no hay evacuados.
Sobre la comunidades de las partes altas de Orán aseguran que están bien y que podrán entrar cuando baje el agua. Son unas 300 las familias aisladas.
