En retirada, el intendente de Mar del Plata ni siquiera paga las becas para evitar que los jóvenes acudan al basural
Es una iniciativa que comenzó durante la gestión anterior pero que el gobierno de Carlos Arroyo incumple constantemente. De hecho, no se registran pagos desde marzo de este año. A su vez, las becas no superan los 4.500 pesos.
Es una iniciativa que comenzó durante la gestión anterior pero que el gobierno de Carlos Arroyo incumple constantemente. De hecho, no se registran pagos desde marzo de este año. A su vez, las becas no superan los 4.500 pesos.
El municipio a cargo de Carlos Arroyo no entrega las becas para unos cincuenta chicos que frecuentan el basural local y se encuentran en estado de indigencia. Así lo comunicaron desde la Mesa de Diálogo del Basural del Obispado de Mar del Plata, que asegura que desde marzo no se registra el pago a ninguno de los jóvenes entre 13 y 18 años que acuden al lugar en busca de materiales reciclables.
“No tenemos confirmación alguna de que las becas se estén otorgando. Según lo que pudimos saber de manera extraoficial, las mismas no se están pagando desde marzo, pero nosotros, que trabajamos todos los días con las familias que trabajan en el predio, no conocemos un joven que la haya cobrado en los últimos dos años”, explicó para La Capital, Ana Laura Vulcano, abogada y coordinadora de la mesa.
El objetivo de la beca apunta a que los menores y jóvenes de la ciudad no vuelvan al basural, asechado de elementos peligrosos y enfermedades. Pero la acelerada crisis política que vive el gobierno local de Arroyo, demuestra con mayor claridad las prioridades de su gobierno.
“Venimos haciendo diferentes reclamos por los programas de inclusión social pero no recibimos ninguna respuesta. El responsable político, el presidente del Emsur (Ente Municipal de Servicios Urbanos), Eduardo Leitao, tampoco nos da detalles de gestiones tendientes a brindar soluciones a las diferentes problemáticas sociales que se dan en el predio”, agregó la abogada.
Según se supo, las becas solo son para unos cincuenta jóvenes en el marco de un proyecto que comenzó a aplicarse antes de que el intendente Arroyo llegara al poder en 2015.
No solo el municipio debe varios meses de las becas, sino que el valor de las mismas se encuentran congeladas a pesar de los niveles altísimos de inflación que se dieron desde entonces.
Por ejemplo, para un adolescente que es sostén de una familia, sólo se destina tres $3.000. Mientras que para otros que contemplan una situación de menor responsabilidad económica, se destina $ 1.500.
Según el plan, solo se evalúa una suma superior a los $4.000 para “casos excepcionales”.
