España: El PSOE presiona a Podemos para formar gobierno sin darle ministros

En España el impasse poselectoral que siguió al voto del 28 de abril no parece tener fecha de finalización.

En España el impasse poselectoral que siguió al voto del 28 de abril no parece tener fecha de finalización.

En España el impasse poselectoral que siguió al voto del 28 de abril no parece tener fecha de finalización. El tiempo y el descanso veraniego no han mejorado la mala relación entre el gobernante PSOE y su potencial aliado, Unidas Podemos. Según el diario El País, las cosas están peor. La desconfianza parece haber crecido desde el fiasco de la última negociación fallida para la investidura de Pedro Sánchez. El presidente ha multiplicado sus reuniones —14 encuentros con unas 180 organizaciones solo en la última semana— con un claro objetivo, que ha expresado a muchos de sus interlocutores: presionar a Unidas Podemos para que acepte un «Gobierno a la portuguesa», esto es, un acuerdo programático con apoyo externo del partido de Pablo Iglesias, pero sin ministros.

A esas decenas de personas que han escuchado al líder del PSOE también les ha dicho que él no quiere elecciones, pero no las teme. Sánchez insiste en que si hay repetición electoral no será el responsable, sino Unidas Podemos. También asegura que serán ellos los más perjudicados en ese escenario, y no los socialistas. Algunos interlocutores le han planteado temor a una enorme abstención de la izquierda, frustrada por el fracaso de la negociación y la necesidad de repetir elecciones. Sánchez está convencido de que ese escenario no es real. El y su equipo creen que habría una abstención mayor, pero no creen que la derecha pueda sumar mayoría para gobernar. Creen que el PP podría recuperar terreno a costa de Ciudadanos y Vox, pero sin ampliar significativamente su bloque. Tampoco contemplan el escenario de una unión de toda la derecha, como sucedió en Navarra, porque la guerra por el liderazgo de este bloque lo impediría.

Los números que tiene el PSOE en caso de repetición de elecciones dan entre 135 y 150 escaños al PSOE —ahora tiene 123— mientras Unidas Podemos sufriría una caída importante. El problema que tiene la formación de Iglesias es que, con el sistema electoral, una pequeña caída en votos en toda España puede suponer la pérdida de 15 o 20 diputados, que obtuvo por muy poca diferencia. En Unidas Podemos, sin embargo, se analiza la estrategia de Sánchez de reunirse con decenas de organizaciones y dejarles a ellos para el final con desconcierto. El grupo de Iglesias también asegura que quiere evitar a toda costa una repetición electoral. No tanto porque les perjudique a ellos, sino porque creen que supondría una ruptura definitiva entre el PSOE y Unidas Podemos abriría paso a una campaña a cara de perro, muy diferente de la de abril, que fue de guante blanco y haría muy difícil cualquier gobierno de izquierdas.

En este dilema vive España y al parecer continuará así por un tiempo.

Fuente: La Capital