Familias de marineros marcharon en Madryn y exigen una solución urgente al conflicto pesquero
“Esto no es vida, es sobrevivir”, expresaron con crudeza los manifestantes, quienes denunciaron la crítica situación económica y social que atraviesan muchas familias.
Ante la falta de resolución al conflicto pesquero, un numeroso grupo de familiares autoconvocados de marineros se movilizó en la mañana de este viernes, desde el playón del muelle Luis Piedrabuena hasta la plaza San Martín de Puerto Madryn. La manifestación cargada de reclamos fue pacífica, aunque no faltaron algunos momentos de tensión.
Durante la protesta, los manifestantes entregaron una carta al intendente Gustavo Sastre, quien se comprometió a llevar el reclamo a la reunión prevista para este viernes en la Ciudad de Buenos Aires, donde se encontrarán autoridades nacionales, algunos gobernadores de provincias con litoral marítimo y representantes del Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU).
“Esto no es vida, es sobrevivir”, expresaron con crudeza los manifestantes, quienes denunciaron la crítica situación económica y social que atraviesan muchas familias. Según indicaron, la mayoría de los trabajadores del mar no percibe ingresos desde hace meses, y la falta de compromiso del gobierno Nacional ha generado hoy presente bastante complejo para miles de familias que viven de la pesca; sin posibilidades de afrontar gastos esenciales como alimentos, alquileres y servicios básicos.
Aunque Sastre aseguró que acompañará las gestiones para destrabar el conflicto y que buscará visibilizar la urgencia del tema ante Nación, los autoconvocados remarcaron que no hay más tiempo para promesas: “No es solo una fuente de trabajo lo que está en juego, son familias enteras que están siendo abandonadas”, señalaron.
Desde el Municipio, Sastre informó que se brindará ayuda directa a las familias afectadas a través de la entrega de bolsones de alimentos y la asistencia para evitar cortes en el servicio de electricidad.
El conflicto entre el SOMU y las empresas del sector sigue sin resolverse, y su prolongación genera un fuerte impacto en la economía local, al interrumpirse el derrame económico que generan los salarios de cientos de marineros que habitualmente consumen en los comercios de la ciudad.
Mientras tanto, los familiares aseguran que seguirán movilizados hasta obtener una respuesta concreta: la paz social, advierten, depende de que la situación empiece a encaminarse de manera urgente.
